Murió ayer en Río Cuarto
Osvaldo “Turco” Wehbe ya es una leyenda del relato
El legendario relator deportivo riocuartense tenía 63 años y llevaba dos semanas internado, luego de haber sufrido el pasado 26 de julio, un accidente cerebrovascular
Una enorme conmoción produjo en la tarde de ayer, la noticia de la muerte de Osvaldo “el Turco” Wehbe, uno de los mejores relatores deportivos de la historia, dueño de un estilo extraordinario, de gran profesionalidad y una personalidad de una simpleza enorme y calidez infinita.
“Les informo que el Maestro de Río Cuarto, Osvaldo Wehbe, acaba de dejarnos físicamente, pero sus grandes relatos seguirán retumbando por siempre en nuestros oídos. Descanse en paz amigo y quédese tranquilo... ¡Tus relatos siempre fueron dignos!”, informaron ayer desde su entorno familiar.
El Turco como todos lo llamaban, tenía 63 años y se encontraba internado en la Clínica Regional Sud, donde el domingo 26 de julio pasado por la noche, donde había sido trasladado tras sufrir un accidente cerebrovascular (ACV).
La noticia del fallecimiento del relator riocuartense, conmovió a todo el ambiente deportivo del país y fueron innumerables las expresiones y recuerdos que se multiplicaron en las distintas redes sociales.
La magia de su voz en el fútbol, se convirtió en un ícono por su prosa original y creativa, sumada a su calidad que conmovía con cada relato, marcando una época para los futboleros de nuestra provincia. Sus relatos se repartieron entre partidos memorables, finales que no se olvidarán y partidos de la selección argentina en varios mundiales.
“La pelota se hizo luna” relataba cada vez que un jugador rechazaba el balón fuerte y alto y cada grito de gol dejaba huellas en los hinchas, como la noche del 13 de agosto de 2014, cuando San Lorenzo de Almagro fue campeón de la Copa Libertadores, justamente el equipo del que era hincha, y su emotivo relato se hizo inolvidable.
Wehbe, a pesar de ser uno de los mejores relatores argentinos, nunca dejó Río Cuarto, y conformó con el recordado comentarista Víctor Brizuela, una dupla memorable. También formó parte de Radio Rivadavia e integró el equipo Competencia de radio Continental, compartiendo con uno de los mejores equipos periodísticos que se recuerde, todos liderados por Víctor Hugo Morales.
Su debut como relator, había sucedido el 16 de mayo de 1979, en un encuentro en el que Boca Juniors derrotó a Peñarol de Montevideo por 1-0 por un partido de la fase semifinal de la Copa Libertadores de América. El primer gol que grito fue el del defensor Armando Capurro, que había vencido a Jorge Fossatti.
En 2019, había sido reconocido por la Legislatura provincial, merced a sus cuatro décadas vinculado al deporte y conducía en la actualidad, el programa “Pelota de trapo”, que se emite de lunes a viernes por radio Universidad de los Servicios de Radio y Televisión (SRT) de Córdoba y el Grupo Maradó, de Río Cuarto.
También fue columnista, engalanando con sus narraciones diferentes medios de la capital provincial y también de su ciudad. Ironías del destino aparte, hace dos meses atrás el medio gráfico riocuartense para el que escribía, le había comunicado que prescindía de sus servicios.
“Esperamos haber sido dignos”, finalizaba cada uno de sus programas, con el anhelo de no haber faltado a la ética. Sin lugar dudas que nunca traicionó sus principios.
Se fue un maestro, un relator extraordinario y una persona excepcional. La tribuna lo extrañará cada vez que aparezca en la cancha un equipo, cuando la pelota se haga luna, o que un gol se haga inolvidable por su relato, que sin dudas será digno.
