La realidad de las personas trans en medio de la crisis
Un llamado a dar trabajo
Jenifer Astargo pide a los empresarios que brinden posibilidades laborales a integrantes del colectivo. La situación de muchas personas empeoró. La militante hizo hincapié en las características que tienen las vidas de muchas de ellasJenifer Astargo es enfermera y cuida adultos mayores, además de acompañar en situaciones de violencia de género. Lleva ocho años trabajando en la Secretaría de Salud de la Municipalidad de Villa María. Desde su experiencia, expresó una profunda preocupación por la situación que enfrentan muchas chicas trans en la actualidad.
"Muchas chicas trans están sufriendo. Se encuentran sin trabajo, sin oportunidades, esperando conseguir un empleo digno para poder seguir adelante", contó a elDiario.
Muchas de ellas decidieron convivir en un mismo hogar. Es que a la situación socioeconómica adversa en general se le suman las dificultades tradicionales que enfrenta la población trans para tener una vida normal.
Con dos propósitos claros, Jenifer contactó a este diario. Por un lado, para expresar agradecimiento, y por otro, para realizar pedidos urgentes. "Necesitamos que se multipliquen las posibilidades. Es crucial que se cumpla con el cupo laboral trans, que establece que el 1% de los puestos en espacios nacionales sean ocupados por personas trans", manifestó.
También dirigió un mensaje a los empresarios. "Por favor, brinden oportunidades laborales a las personas de la comunidad trans. Es cierto que muchas personas trans tienen poca formación, pero esto se debe a la historia de vida que hay detrás. Muchas han sido expulsadas de sus hogares y se han visto obligadas a abandonar sus estudios. Por eso, hoy pido un trabajo digno para todas."
Jenifer destacó que una parte de la población trans sigue "en la oscuridad, atrapada en la prostitución y las adicciones. Es una realidad que persiste", contó.
"Tengo 40 años y he superado la expectativa de vida promedio para una persona trans, que es de 31 años. Esto ha sido posible gracias a mi familia y a un gran grupo de apoyo, que son personas que me quieren y que me quieren bien. Mi vida es una lucha diaria, por lo que siempre le agradezco a Dios", confió.
Jenifer hizo un llamado urgente para que no se deje morir a las chicas trans, para que no persista la discriminación ni la falta de trabajo que las excluye de la sociedad. "Hoy veo a muchas chicas que están sufriendo", dijo.
Agradeció al Estado local, que "en los últimos dos años ha incorporado a muchas integrantes del colectivo".
En particular, agradeció al intendente Eduardo Accastello, al subsecretario de Salud, Julián López, a la directora de la Asistencia Pública, Victoria Becco, y a la secretaria de Educación e Igualdad, Adela Guirardelli. También, al médico psiquiatra Guillermo Gauna. "Sin embargo, es necesario que estas oportunidades se multipliquen.", marcó.
La comunidad trans es uno de los colectivos más golpeados en la sociedad, no solo en Villa María, sino en todo el país. La expectativa de vida de las personas trans sigue siendo muy baja en comparación con el resto de la población, precisamente, por las razones que Jenifer mencionó.
Recientemente, el ministro de Justicia de la Nación, Mariano Cúneo Libarona, se pronunció en contra de la Ley de Identidad de Género, una ley que busca respetar a las personas tal y como se autoperciben. Mientras en el ámbito político se debate, en muchas casas hay personas trans que están esperando una mano, una oportunidad. Están esperando que no las excluyan.