Carta de Guillermo Rocha, el exjefe de ANSES, a raíz de las expresiones de Lazzuri en la edición de ayer

ANSES en tiempos de Lazzuri, Fernando de la Rúa y Macri

jueves, 27 de febrero de 2020 · 12:00

Cuando nos toca razonar acerca de la actuación de Gustavo Lazzuri en los dos períodos que estuvo como jefe de UDAI Villa María, hay que poder separar lo personal de lo político. Que si es educado, que si saluda todos los días, y le agrada que le saluden, que si vino a su trabajo todos los días, que si cumplió su rol, que si es un hombre de bien y de sobrada capacidad, al decir de sus pares del centenario partido, lo que por cierto no es una virtud, sino una condición necesaria para ejercer cualquier responsabilidad laboral de gestión de cualquier organismo público, o privado, son datos con los que podemos estar más o menos de acuerdo e incluso coincidir.   Sin embargo, hoy la cuestión pasa por otro lado. Por lo político, que fue lo que este “hombre de bien” vino a hacer al ANSES Villa María y cómo llegó las dos veces que estuvo al frente de la delegación nacional.   

Primer período:

1999 /2001: gobierno de De la Rúa, con Patricia Bullrich al frente del Ministerio de Trabajo del cual dependía el ANSES en ese tiempo. Lazzuri ingresa directamente como jefe de UDAI, representando en ese momento las brutales políticas de achique del Estado: descuento del 13% a empleados del Estado y a jubilados, corralito, represión y muertes. Argentina se encontraba en una fuerte crisis, que terminaría colapsando el país. Ahora bien, en ese tiempo Lazzuri cumplía bien su rol, fue el alumno perfecto de ese modelo económico perverso.

Estuvo solo dos años a cargo, y fue remplazado por una compañera de carrera de ANSES, con más de veinte años de trayectoria, que viniendo desde Córdoba prepara a la organización para las más fundamentales transformaciones que tendrá tiempo después, cuando el proyecto político de país se pone al servicio de la gente:  recuperación y estatización del sistema previsional, jubilaciones de ama de casa, Asignación Universal por Hijo, Progresar, Procrear, Conectar Igualdad, entre tantas otras.

Segundo período:

2016/2020: según entrevista en El Diario, “gracias a la generosidad de Darío Capitani (referente del PRO y de la Alianza) que lo fue a buscar”, asume como jefe de ANSES Villa María. En la misma nota refiere “fue muy duro salir de ANSES”, cuando solo había estado 2 años. La administración a la cual él responde despidió a miles de compañeros a lo largo y a lo ancho del país, algunos de ellos prestigiosos profesionales y científicos, con muchos más años de antigüedad, a los de la Fábrica Militar de Pólvora y Explosivos de nuestra ciudad, con el solo pretexto de sacar la “grasa militante del Estado”. 

En esa misma nota señalaba “nos tenemos que hacer cargo de las equivocaciones de mi partido” apelando a una pretendida actitud dialoguista donde los responsables son otros.    (nota de El Diario del lunes 27 de junio 2016, realizada por Nancy Musa). Hacerse cargo implica reconocer hoy el más cruel de los ajustes,  empobrecimiento del pueblo, crisis alimentaria,  pérdida de poder adquisitivo del salario y de las jubilaciones, precarización laboral, despidos, tarifazo sobre los servicios esenciales, persecuciones políticas, endeudamiento del país una vez más enajenando la soberanía política, represión.  Así son los tiempos políticos cuando aparece en escena Gustavo Lazzuri, solo podemos verlo como partícipe necesario de los peores momentos de la historia del país, no es un análisis de lo personal sino sobre responsabilidades en tiempos históricos.

Una vez más la gestión de Gustavo Lazzuri frente al ANSES Villa María, se ve truncada por el colapso de un proyecto político neoliberal del cual fue y sigue siendo parte, que efectuó un monumental vaciamiento del Estado,  entre ellos del propio ANSES, afectando el Fondo de Garantías de Sustentabilidad, con el que el gobierno de Mauricio Macri financió sus cuentas, reduciéndolo en 45 millones de dólares en solo un año, con las profundas consecuencias sociales y económicas que acarreará.                    

Por último, Gustavo Lazzuri “no es un empleado de carrera” atento que en los dos momentos que aparece en esta historia, lo hace como jefe de UDAI, y de la mano de una fuerza política, para la cual la carrera administrativa comienza donde muchos trabajadores nunca llegan, es más éstos pasan años en el mismo escalafón o en la condición de contratado.  Gustavo Lazzuri solo es uno más de los cientos de directores, jefes de áreas, secretarios, subsecretarios del macrismo, que pretenden victimizarse desde un puesto de trabajo en el Estado, cuando solo habían venido a cumplir un papel que realizaron a la perfección: aplicar las más crueles políticas de ajuste en contra del pueblo argentino.

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