Tres años de prisión efectiva para él y tres en suspenso para ella
Pareja condenada por narcomenudeo
Se trata de Nicolás Giusti y Débora Márquez, quienes fueron hallados culpables de “tenencia de estupefacientes con fines de comercialización”. El hombre fue declarado reincidente y seguirá alojado en la cárcel local. La mujer continuará en libertadUna pareja fue condenada ayer por un hecho de narcomenudeo desbaratado el año pasado en una vivienda de barrio San Juan Bautista, en el marco de un juicio de trámite abreviado que se realizó en la Cámara del Crimen de Villa María.
La audiencia se llevó a cabo con la modalidad presencial en el caso de la mujer, quien compareció en el recinto del quinto piso de Tribunales, y por videoconferencia con respecto a su concubino y compañero de causa, quien siguió las alternativas del debate por videoconferencia, ya que se encuentra alojado en la cárcel local.
Nicolás Manuel Giusti (33) y Débora Adriana Márquez (32) llegaron al juicio oral acusados como coautores del delito de “tenencia de estupefacientes con fines de comercialización”, pero bajo diferentes circunstancias por un simple y contundente detalle: él es un convicto reincidente que registra una condena anterior por el mismo tipo de delito.
Por esa razón y a raíz de la emergencia sanitaria por la pandemia de coronavirus, Giusti participó de las deliberaciones a través del sistema de teleconferencia. En tanto, en la sede judicial de calle General Paz se dieron cita el camarista Félix Martínez, el fiscal Francisco Márquez, la asesora letrada Silvina Muñoz (defensora oficial de la pareja) y la coimputada Débora Márquez.
A poco de comenzado el proceso, ambos acusados se declararon culpables del episodio delictivo que se les atribuía y posibilitaron que el juicio se abreviara, omitiéndose la recepción de pruebas testimoniales en la sala.
Posteriormente, al momento de formular sus respectivos alegatos, tanto la Fiscalía como la Defensa solicitaron las penas acordadas previamente: tres años de prisión de cumplimiento efectivo para Giusti, con declaración de reincidencia, y la misma sanción, pero de ejecución condicional (es decir, en suspenso), para su pareja.
Otra vez drogas
Nicolás Giusti, alias “Nico” o “Negro”, nació el 9 de septiembre de 1986 y registra una condena dictada por la Justicia villamariense el 3 de febrero de 2016, cuando le impusieron cuatro años de prisión por “comercialización de estupefacientes”, ya que fue hallado culpable de vender drogas en barrio La Floresta de Villa Nueva en la modalidad de narcomenudeo.
Hace poco más de un año, su nombre también alcanzó notoriedad periodística porque fue baleado frente a la puerta de su casa en un presunto “ajuste de cuentas” por venta de estupefacientes, sufriendo heridas de gravedad.
El 20 de febrero de 2019 Giusti recibió tres disparos de arma de fuego cuando se encontraba arreglando una moto en la vereda del domicilio ubicado en Quintana al 2700, entre Aguirre Cámara y Mercedarios.
Previo a la balacera, dos personas habían mantenido una fuerte discusión con la víctima, aunque se retiraron del lugar tras el incidente. Poco después regresó uno de los sujetos a bordo de una moto y, sin mediar palabras, le efectuó tres disparos a quemarropa que impactaron en el tórax y en las dos piernas de Giusti. Uno de los balazos le fracturó la tibia izquierda.
Cuando los investigadores policiales llegaron al lugar, en la casa donde se hallaban el herido y su pareja encontraron varios envoltorios que contenían clorhidrato de cocaína, por lo que dieron intervención a la Fuerza Policial Antinarcotráfico (FPA), iniciándose así la causa por narcomenudeo que se ventiló en la víspera.
Débora Márquez, nacida el 24 de noviembre de 1987, es una convicta primaria que no registraba antecedentes, lo que le permitió comparecer en libertad y conservar ese estado gracias a que la condena aplicada fue en suspenso.