La Laguna - Leonardo Schiaparelli... la lucidez de un hacedor

Las memorias de un intendente “vitalicio” al cumplir sus 90 años

Estuvo al frente de la Municipalidad y de la Cooperativa Eléctrica, del Club Unión Lagunense. Una leyenda viva de la localidad, que se vino a Villa María para seguir al lado de su esposa, que tiene algunas dificultades para movilizarse
domingo, 12 de julio de 2020 · 08:01

“Ustedes me hicieron una linda nota el 26 de agosto de 1986,  porque ese día inauguramos el colegio secundario...”, dijo Leonardo Schiaparelli en el comienzo de su charla con un periodista de El Diario, la que se dio con motivo de su cumpleaños número 90.

-Pero, ¡qué memoria la suya!

-En esa jornada, además, yo cumplía 7.300 días al frente de la Municipalidad. Y pensar que todavía me faltaban cinco años más de gestión... porque seguí hasta septiembre de 1991.

-¿Y cuándo comenzó su primer período?

-En 1970. Fueron 21 años consecutivos hasta la jubilación. Pero mi experiencia había comenzado en la Cooperativa Eléctrica, donde fui el primer presidente y estuve 14 años, con un equipo que pensaba solamente en lo mejor para los vecinos. Solamente se pensaba en el bien común, y  ese espíritu se trasladó después a la Municipalidad. También me desempeñé durante 12 años al frente de Unión Lagunense, que juega en la Liga Béccar Varela, y en el día de hoy la sede del club lleva mi nombre, lo cual me enorgullece, porque quiere decir que algo habremos hecho para merecerlo...

-¿A qué partido representaba?

-Yo era de Junta Vecinal. Pero debo decir que después asumieron personas de la Unión Cívica Radical, del Partido Justicialista y ahora nuevamente del radicalismo, y ha sido toda gente que siguió poniendo el interés común por encima de lo partidario. Por eso es que el pueblo ha progresado tanto.

“Fuimos los primeros en el país en comprar un cuadro de estación de ferrocarril”

-¿Si tuviera que quedarse con una de sus obras en los 21 años al frente de la Municipalidad?

-Una sola, no puedo... Porque nosotros fuimos los primeros en el país en comprar un cuadro de estación de ferrocarril. Al edificio vino una sede del Banco Sudecor, donde hoy funciona el Banco de Córdoba, y alrededor salieron 92 lotes en los que podemos decir que se edificó un pueblo nuevo, porque los dimos por 100 pesos a cada uno, que era el precio de la escrituración. Eso nos permitió empezar a cobrar los impuestos a 92 contribuyentes más, con lo que hicimos la Casa del Jubilado, la sucursal del Correo... Pero otra cosa importante era la relación que teníamos con Vialidad, que nos daba la limpieza de banquinas de Etruria a Silvio Pellico, de Idiazábal a Dalmacio Vélez, de Villa Nueva hasta la Fábrica Militar y,  a cambio fuimos pavimentando decenas de cuadras.

-¿Después de tanta actividad, cómo es la vida en el geriátrico?

-Yo me vine porque quiero estar cerca de mi señora, que tiene 87 años y presenta dificultades para movilizarse. Las chicas de esta Fundación Cántaros nos tratan de una manera excelente y el ambiente es excelente.

-Me dijeron que acá la va de cantor de tangos...

-Somos varios los que cantamos... Ahora, Sus ojos se cerraron y Quién hubiera dicho, forman parte de mi repertorio...

 

Más de
16
80%
Satisfacción
6%
Esperanza
4%
Bronca
3%
Tristeza
1%
Incertidumbre
3%
Indiferencia

Comentarios