ENTE RUTA Nº 6 - Trabajadores y trabajadoras padecen la incertidumbre en la última semana de los peajes

El drama y el daño del final

Mañana habrá otra audiencia en Trabajo, por otro reclamo, mientras esperan los telegramas de despido
domingo, 25 de septiembre de 2022 · 08:30

Escribe: Franco Gazzoli
DE NUESTRA REDACCIÓN


En estos días comenzaron a llegar los telegramas de despido para 50 de los 60 trabajadores y trabajadoras del Ente Intercomunal e Intermunicipal Ruta Provincial Nº 6. Sin más precisiones, como se venían manejando hasta hoy. Quizás lleguen apenas uno o dos días antes de la finalización de esta historia, ya que el 1 de octubre no estarán funcionando las casillas de cobro de peajes sobre esta vía y tampoco se sabe cómo será ese final.

Así lo advirtieron los representantes del gremio que los nuclea, Uecara (Unión Empleados de la Construcción y Afines de la República Argentina), a partir de los diferentes episodios que dieron en este desenlace. El final.

Quizás sean los propios empleados los que el próximo viernes deban “desmantelar” las cabinas para liberar el paso, quitar las barreras y guardar en las oficinas de cada una de las tres casillas los controladores fiscales. Nada, ni siquiera hasta el último día, arroja certezas para los trabajadores, estos futuros desempleados.

Los telegramas, vale mencionar, debieron llegar, al menos, antes del 1 de septiembre o del 1 de agosto, por Ley de Contrato de Trabajo (LCT) -ver recuadro-.

 

Buscando empatía

Y volver a empezar. Después de tanto tiempo en los puestos de peaje en Cruz Alta (27 años, esa casilla), Tancacha (25) y Dalmacio Vélez (23), 60 personas ven desaparecer esa fuente de trabajo. Son 50 que se quedan solo con una indemnización en la mano. Solo eso. Pero además, un “alto daño psicológico en estos dos meses de incertidumbres”, apuntó una delegada, que fue expuesto en audiencias en el Ministerio de Trabajo y con las autoridades del Ente, sin lograr la empatía esperada. Ni siquiera por esa compañera que hace tres semanas fue mamá de mellizos, o sea que después de 20 años de antigüedad y estando de licencia en su residencia en Hernando, se quedó sin su puesto de trabajo.

Contaron que para otros, ya aparece traumático tener que asistir por estos días, después de 23 años. “Estamos medio como sin saber qué día vivimos. Hasta ese punto llega el desconcierto que nos ha provocado esta situación”, aportó una trabajadora.

 

Dicen tres

En el Ministerio de Trabajo de la Provincia, recibieron “tres opciones”, según la palabra oficial de funcionarios de esa cartera: pasar a ser “contratado” por el estado (del que sienten no tienen garantías porque se renuevan en febrero de cada año), una segunda posibilidad por la que optó la mayoría, de aceptar el despido y la indemnización, y una tercera de pasar a ser parte de Caminos de las Sierras. Para los gremialistas y los trabajadores, “no son opciones”, y de serlo, contarían solo dos. El propio ministro de Trabajo, Omar Sereno, salió a ratificar que eran tres, en discrepancia con el secretario general de Uecara, Gustavo Rossi. Una discusión que cae en el mismo vacío de incertidumbres, de finales inesperados.

De las reubicaciones, cuatro personas que se desempeñaban en el peaje de Tancacha, dos que lo hacían en Dalmacio y una a cargo de la cuadrilla de mantenimiento, aceptaron ser contratados por la provincia.

Otras dos trabajadoras de Tancacha pasaron al puesto que la empresa Caminos de las Sierras tiene en Piedras Moras. No pudieron alcanzar la misma suerte dos vecinos de Las Perdices que aspiraban ir a la estación Tegua, de la misma empresa privada, ya que sumaban demasiados kilómetros hasta el lugar (52 km hasta Alcira Gigena y otros 20 hasta el paso).

Desde el gremio, lamentaron que no pudieron “lograr garantías” para quienes pasan al estado provincial desde el mes próximo. Estimaron que el gobernador “aseguró los puestos de trabajo, pero no en condiciones dignas para los trabajadores, respetando su antigüedad y sin garantía de continuidad”.

 

Mañana, otro lunes

En la jornada de mañana, los dirigentes y delegados del sindicato que representa a los futuros exempleados del Ente, volverán a otra audiencia, como el lunes pasado, en el Ministerio de Trabajo, donde plantearon un nuevo reclamo. Explicaron que existe una diferencia en los montos indemnizatorios, porque “en el recibo incluyeron los viáticos y nunca habrían sido presentados o demostrados con los tickets”, no se habrían solicitado o exigido, en tanto se establecía un monto fijo, que se había convertido en remunerativo, “pero ahora no fue tenido en cuenta”. Se trataría de cuatro o cinco salarios para muchos de los trabajadores, por lo que lo están reclamando y esperan sea entendido y atendido.

En la audiencia de mañana, también deberían resolver sobre los porcentajes que corresponden a los dirigentes gremiales, delegados y un administrativo (he aquí el que faltaba) que pasó a trabajar en el gremio en estos tiempos (con licencia gremial por Ley). “Que vayan a juicio”, contaron que deslizó un representante de la patronal (el Ente), que se asume, estaría dispuesta a que esto se resuelva en la vía judicial. Lo que no tendrían en claro es en quién deberá responder, pero que todo indica, serán los mismos municipios, lo que para el Estado provincial no quedan dudas, ya que si no, no les quedaría ninguna carga y hasta aparece como “un alivio” que se produzca hoy este final, ya que si llegaban al plazo perentorio de la concesión, dentro de un año, no podrían afrontar siquiera el costo de las indemnizaciones.

A la espera del telegrama y antes de la que sería la última audiencia, justo en la última semana de trabajo, confiaron que esperaban “más respuesta de parte de los intendentes que integran el Ente”.

 

¿Cuáles son los plazos del preaviso?

Si lo envía el empleador, en caso de despido:

-El plazo es de 15 días cuando está en período de prueba.

-El plazo es de un mes cuando el empleado tenga una antigüedad que no exceda los 5 años.

-El plazo es de dos meses cuando el empleado tiene una antigüedad máxima de 5 años.

 

No tengo preaviso, ¿qué me corresponde?

Si el empleador omite esta obligación legal de preavisar, se debe abonar una indemnización sustitutiva, que equivale al sueldo que hubiera percibido el trabajador, como si continuara con sus tareas durante el tiempo del preaviso.

 

Firulais y compañía

Los trabajadores van desarmando historias por estos días. Acusaron que cada una de las tres casillas, debieron resolver qué hacer con las mascotas, porque también se las tomó como zonas para el abandono de animales, por parte de desaprensivos.

En Tancacha, había tres perros y un gato, para lo que buscaron adoptantes.

En Dalmacio, estaba Firulais, un perro que llegó lastimado y rescataron, acogieron y mimaron hasta estos días, cuando una de las futuras desempleadas fue designada para adoptarlo y tuvo su momento de prometer buen cuidado.

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