Los concejales no acompañan

Los concejales del oficialismo y la oposición rechazaron el dictamen del Tribunal de Cuentas de Estados de Ejecución Presupuestaria período 2023.

Este informe permitía cerrar de manera administrativa el ejercicio del año pasado.

La acción se dio en el Concejo Deliberante de Villa Nueva y sorprendió a propios y extraños. El informe contempla 11 meses de la gestión anterior, liderada por el exintendente Natalio Graglia, y un mes de la actual gestión, encabezada por Ignacio Tagni.

La mayor sorpresa fue manifiesta por el lado del oficialismo de Juntos por Villa Nueva (UCR-Pro), con Sandra Bailone, Sergio Mana, Amael Saúl y Milena Pautasso. De hecho, en primera instancia trascendió que los ediles de la oposición (Hacemos Unidos por Córdoba), dos de ellos exfuncionarios de la exadministración, Guillermo Aiassa (secretario de Gobierno) y Gisela Zannini (Obras Privadas), más Ángelo Valenzano (concejal en el mismo período), no avalaron lo actuado de acuerdo a ese informe. No acompañaron.

“De lo recaudado, alrededor de $3.700 millones (coparticipación, más tasas), se muestran devengados (pagado o a pagar) $3.550 millones, lo que arroja una diferencia de $150 millones, por lo que no habría nada que objetar, pero el contador Barotto sostiene que son $3.800 millones, porque incluiría erróneamente obras a pagar, que no sería lo mismo, porque se trataría de órdenes de cuenta a pagar”. Guillermo Aiassa 

La sesión fue tensa, con el cruce de acusaciones que generó la ocasión, interpelando de cómo unos y otros no estarían defendiendo la cabeza de quién, o si estarían, de esa manera, marcando irregularidades en el período de Gobierno en cuestión. Confuso o complicado de explicar, en contraparte, quedó planteada la posibilidad de que el Ejecutivo de hoy pueda avanzar en una auditoría, si así lo deseara, pero no se vislumbra.

Ambas partes marcaron las “inconsistencias” en la vereda de enfrente.

La nota firmada por el actual secretario de Finanzas del municipio, Daniel Barotto (ausente), tuvo inmediatas refutaciones en la devolución. “Es muy fácil acusar, pero no hay documentación alguna presentada. Faltan los documentos respaldatorios”, dijo Aiassa a elDiario.

La oposición descalzó los señalamientos con observaciones que la integrante del Tribunal de Cuentas (y exconcejal) Adriana Allasia le hizo a los primeros 30 días de Gobierno de Tagni.

• La oposición argumentó su rechazo al dictamen, a pesar de que abarca 11 meses de la gestión de Graglia.

El oficialismo marcó presuntas “irregularidades e inconsistencias”, a lo que sus pares opositores quisieron corroborar, “pero no fueron expuestas ni siquiera una orden rechazada”, dijo uno de los concejales. Recordaron que siempre la conformación del Tribunal cuenta con un integrante de la oposición, aunque esta vez, reclaman y rechazan “por mal procedimiento, por inconsistencias”.

No tan prometedor

En el ida y vuelta, no tan prometedor, quedó expuesto un modo irresponsable de hacer valoraciones en torno a la veracidad del presupuesto ejecutado y los movimientos contables del municipio cuestionados.

En un pasaje del encuentro, los tres tribunos asumieron que en ninguna oportunidad tuvieron o vieron documentos referidos, probatorios, que validarían las acusaciones cruzadas.

La oposición se encargó de dejar en claro que, a la fecha, “no existen pruebas ni informes técnicos del contador responsable ante las presuntas falencias en el procedimiento administrativo”, a cargo el Tribunal de Cuentas, donde sí se encuentran identificadas algunas observaciones en disidencias.

La bancada opositora, por último, presentó su despacho para fundamentar su voto negativo, en tanto consideró que el dictamen “carece absolutamente de los argumentos técnicos y documentación respaldatoria necesaria que permita el adecuado análisis de todo lo actuado” y subrayó que el mismo expresa una cifra superior al presupuesto autorizado por el Concejo Deliberante e invitó al oficialismo que “desista de las prácticas acusatorias y brinde mejor acceso a la información”.