Nueva tendencia en Córdoba capital
El cielo como “techo” bares en las ruinas
Originarios de los barrios judíos de Budapest, se fueron extendiendo a París y Barcelona... Ahora llegaron a la Docta, para mezclar la gastronomía con el arte... y algo más
Escribe Arq. Hugo Daniel Gabetta PARA NUESTRA REDACCION
Hungría sufrió, durante la Segunda Guerra Mundial, numerosos bombardeos sobre su capital Budapest, específicamente sobre el barrio judío, convirtiendo sus edificios en ruinas.
En la actualidad esos lugares devastados se han convertido en el emplazamiento de una de las movidas nocturnas más vibrantes de Europa.
Los famosos bares de ruinas o ruin bar, son modernos clubes y pubs establecidos en edificios y sitios abandonados, sin restaurar. Cada fin de semana, estudiantes turistas, empresarios, empleados... se juntan en estos sitios ruinosos reconvertidos en espléndidos bares (casi siempre dotados de equipos de sonido de última generación), decorados con grafitis, luces de colores y eclécticas obras de arte.
Esta movida se encuentra ahora en expansión y comenzó a replicarse por otros puntos del Viejo Continente, sobre todo Francia y España. Y ahora... ¡llegó a Córdoba capital!
Esta nueva onda de bares no convencionales que comienza a dejarse ver en la Docta viene, en este caso, de la mano de las cervecerías, generalmente de productos artesanales, que se abren por doquier y se van mezclando con otras actividades gastronómicas.
Son también lugares de encuentro, pero multifacéticos, donde artistas plásticos están llamados a mostrarse, ya que el arte, sobre todo el callejero, forma parte del valor agregado que ofrecen a través de la decoración y, en ocasiones, el cielo y las estrellas como techo.
Estos dos primeros ruin bar “a la cordobesa”, que muestran las fotografías que ilustran estas páginas, pertenecen a una cadena llamada Visioner (la que, al parecer, “vio la veta”, como se suele decir).
Uno está en Chacabuco, casi bulevar Illia, y el otro en Ambrosio Olmos, casi plaza España.
A quienes anduvieron últimamente por Europa seguramente les devuelve imágenes placenteras.
En general, estos lugares están ubicados en lugares donde se han realizado demoliciones, y ofrecen comidas que pueden ser más o menos elaboradas, para ser acompañadas por cervezas o tragos y postres del tipo gourmets, con precios acomodados a un público más bien joven.
Abren desde temprano en la mañana y permanecen disponibles hasta la madrugada.
