Túnel Hermanos Seco: es útil la protección por ordenanzas

Escribe Jesús Chirino
Nota Nº 623

n este mismo espacio hemos escrito acerca de aquellas normas legales que declaran como parte del patrimonio de la ciudad algunas construcciones que poseen interés histórico y/o cultural. Puntualizamos acerca de la importancia de la legislación local acerca de este importante tema y su relación con diversos aspectos de la vida comunitaria.

El Túnel Hermanos Seco, cerrado en el año 2000, posee dos ordenanzas que dejan asentado su interés patrimonial para la ciudad. Actualmente se avanza en un proyecto para su total modificación ante lo cual surge la pregunta acerca de si se respeta la legislación local o si deben modificarse algunas ordenanzas.

Dos veces declarado de interés histórico y cultural

En primer término recordemos que la Ordenanza 2.144, del año 1985, declaró de “interés público la conservación de los edificios que por sus características posean valor histórico y/o cultural”.

En el caso que nos ocupa, podemos señalar que en 1994, mediante la Ordenanza municipal 3.461, la autoridades del Gobierno local declararon Patrimonio Histórico y Cultural de la ciudad al túnel peatonal Hermanos Seco, junto “al edificio de la Estación del Ferrocarril General Bartolomé Mitre, emplazado en el cuadro comprendido entre calles Hipólito Yrigoyen, Bartolomé Mitre y Buenos Aires”.

La misma norma legal autorizó al municipio para suscribir, “con las autoridades del Nuevo Central Argentino, concesionario de la explotación comercial de la línea ferroviaria General Mitre (cargas), los convenios pertinentes destinados a recibir en comodato el inmueble” de la referida estación. También se estableció que ese edificio se dedicará “al funcionamiento de un complejo destinado a contener el Museo Regional de Villa María u otras dependencias de carácter cultural”.

Diez años después, en 2004, quizás olvidando lo establecido por la ordenanza de 1994, el Concejo Deliberante volvió sobre el tema y aprobó otra Ordenanza, la 5.322, que nuevamente declaró al Túnel Hermanos Seco como parte del Patrimonio Histórico y Cultural de la ciudad. En esa oportunidad también se sancionó la Ordenanza 5.323 disponiendo la conformación de una comisión técnica para evaluar el estado de conservación y las posibilidades de recuperar ese espacio.

Es lógico pensar que el Poder Legislativo local, a la hora de otorgar protección a esta construcción, evaluó las razones que condujeron a ese resultado. No es objeto central de esta nota referir esos antecedentes, sino simplemente destacar que existen las mencionadas normas legales, al igual que otras, como la Carta Orgánica Municipal que, por ejemplo,  establece entre las “funciones, atribuciones y finalidades inherentes a la competencia material del Estado municipal” la de “conservar y defender el patrimonio histórico…”.

Túnel, bien villamariense

De manera breve podemos decir que el origen junto a la particularidad del túnel, lo enlazan con rasgos propios de nuestra identidad comunitaria. Hace más de 100 años, ante el problema de pasar, de manera cómoda y con seguridad, de un lado al otro de las vías del ferrocarril se abrió una discusión que involucró a diferentes actores sociales.

Surgieron varias soluciones. Una de ellas fue la construcción del que luego se denominaría Túnel Hermanos Seco. Fue una solución exitosa al problema de atravesar, sin riesgos, una zona de maniobras ferroviarias. Puede destacarse la originalidad villamariense para solucionar algo que también enfrentaban otras localidades de la provincia, en la misma línea férrea.

Este es un valor especial del túnel, dado que su construcción nos diferencia de otras poblaciones que encontraron otras soluciones para el mismo inconveniente. Por ejemplo, mediante un puente aéreo, como también estuvo previsto construir en Villa María. Es decir que aquí se ideó una manera exitosa, por muchos años, y bastante original de solucionar un problema relativamente común. Y esto hace que el túnel esté ligado a la identidad de nuestra comunidad porque marca un rasgo que nos hace iguales a nosotros mismos y diferente a los otros.

Como comunidad debemos pensar mucho antes de atentar contra aquellos elementos comunitarios que nos permiten tener conciencia de nuestra particularidad como ciudad. Son elementos, en este caso arquitectónico, que testimonian nuestra manera de ser y nos permiten comprender que, a lo largo de las diferentes situaciones históricas seguimos siendo nosotros. En diferentes momentos la comunidad, expresada en el Concejo Deliberante, decidió proteger esta construcción.

No se trata de sostener una visión romántica del pasado, incluso no se nos escapa que por años el túnel estuvo mal cuidado e invadido de fuertes olores y era un lugar que ofrecía poca seguridad. También entendemos que luego surgió otra solución para cruzar las vías. Es decir que su reapertura es deseable, respetando la legislación y asumiendo la conservación de un bien comunitario protegido.

De sus 82 metros solo dejarán 6

En noviembre de 2019 se anunció que estaba prevista, para 2020, la “refuncionalización del Túnel Hermanos Seco”. El Diario publicó que se incluyó una partida en el presupuesto municipal de 2020, de 3,6 millones de pesos, para una nueva estación de trenes y la unión peatonal entre el casco céntrico y el Parque de la Vida a través del túnel.

Este mismo medio de prensa, en junio de 2020, publicó que en documentos difundidos por el municipio se informaba que entre otras cuestiones se modificarán los accesos “remplazando las antiguas escaleras techadas por rampas y escalinatas de mayor escala".

En tanto que el penúltimo día del mes de agosto se publicaron declaraciones de autoridades municipales que el proyecto “está aprobado y en fase de firma de convenio” y que “será un paso de seis metros, atravesando dos vías”. Es decir que serán retiradas las tradicionales entradas con escaleras techadas que aún quedan y la extensión original del túnel, cercana a los 82 metros, será reducida a menos del 8% de la misma.

Ante lo cual podemos plantearnos si todo esto es parte de lo que denominan “refuncionalización” o más bien podríamos entender que se trata de algo más cercano a una destrucción, dejando un resto testimonial de seis metros. Incluso revisar si es lo que permiten las normas legales vigentes.