“Es volver a la raíz de la canción”

Escribe Daniel Rodríguez De nuestra Redacción

Ricardo Tapia, vocalista y fundador del icónico grupo La Mississippi, estará esta noche en La Parrilla de Arias (Italia 1050, Villa Nueva). La cena show estará marcada por la intimidad debido a las cuestiones de bioseguridad ante la pandemia de COVID-19 (el aforo permite a 50 personas).

Previo a la actuación, el cantante y también fundador de la formación nacida en Florencio Varela (Buenos Aires) dialogó con El Diario y especificó que tal encuentro será una buena ocasión para contar las historias de las canciones y resignificar cada una de las letras.

-¿Cómo se vive este momento a nivel musical?

-Salir con una guitarra es para un autor como volver a la raíz de la canción. Durante el show, con mi guitarra canto las canciones que compuse (y sigo componiendo) para La Mississippi, pero las toco de una forma totalmente diferente: esto es darle un giro distinto y está bueno. Un autor o cantante, con un instrumento, tiene más amplitud de llegada que quizás desde un género o una banda. Entonces, vas a lugares donde te puede escuchar gente a la que le gusta el folclore. Me gusta mucho resignificar las canciones y darles una vuelta diferente en esta cosa medio café concert que hacemos y, de paso, contar el origen.

-Más allá de los tiempos, ¿las canciones siguen representándote?; ¿sos el mismo?

-Uno es una persona y al mismo tiempo no es esa persona. Uno tiene algo de esa persona (que escribió la canción), pero se movió hacia otro lugar, si no, estaría estancado. De igual manera, las cosas siempre tienen “algo fijo”, es como cuando te encontrás a un amigo de la infancia, que es totalmente distinto, pero tiene algo que lo reconocés... eso se llama “la máscara y la cara”, y hay un libro muy interesante que lo define. La máscara es esa cosa que va cambiando, pero la cara, que está en el fondo, es la que se ve. En las canciones la cáscara va cambiando, pero el corazón y el sentido es el mismo. Es interesante poder resignificar eso que escribiste hace 20 y 30 años, y también cómo el resto lo hace, porque la gente también encuentra otro color y significa que están vivas.

-Con respecto al blues y al género, ¿hoy nos encontramos con máscaras o con caras?

-En realidad, lo que destaco de La Mississippi es que no somos una banda de género o de blues: somos una banda de música negra, eso nos dio una apertura, ya que si fuera una banda de solamente blues tendría un discurso específico y un público especifico, pero somos personas que vienen de muchas influencias distintas. La banda se formó del candombe, del jazz, del rock y del heavy, somos hijos de un conglomerado de música...

-También hay una cuestión ideológica que aparece o desaparece según lo comercial.

-A la larga, toda la música que es más humana se transforma en música de protesta, tal como decía Facundo Cabral. Y estamos en un mundo actual que perdió la tercera dimensión del arte, y esperemos recuperarla (respecto a los streamings). No se puede obligar a los artistas a estar en dos dimensiones, hay generaciones que transitan a través de esa música, pero no es la misma forma de vivir o llevar la música... somos como los artistas de teatro las bandas en vivo. Entonces, la cosa tiene que ver con estar y “ser ahí”. Es como cuando ves un cuadro: no es lo mismo que te describan un bosque a estar dentro del bosque escuchando los pájaros... esa la diferencia de este mundo en donde estamos confinados (en referencia a la pandemia).

-Han cambiado las formas de consumo en la música, se hacía difícil escuchar lo que ustedes hacían en la radio. ¿Eso cambió con las plataformas?

-El consumo de la gente subió en la diversificación, porque las personas como yo que escuchan a Bill Evans (panista de jazz) encuentra canales específicos. No lo escuchás en las radios, pero sí están ahí y destaco en la cosa tribal. De igual manera, los medios no determinan la importancia o no de un artista, sino que están en ese medio o es un artista difundido por una compañía. La fuerza de la difusión no determina la fuerza de la calidad... entonces, ahora los pibes están descubriendo artistas de forma subterránea y es importante, porque el arte se va desgranando y deja de ser una cosa unívoca.

-¿Cómo vienen trabajando con la banda?

-Estamos componiendo con tranquilidad un disco electro-acústico, que es algo que no tenemos ya que somos bastante eléctricos (aunque yo soy bastante acústico). Este disco es más electroacústico con canciones que tienen otro tono... un disco más para adentro. Están interesantes las letras, las ideas, y nos detuvo el año pasado porque queríamos terminarlo en España, en la gira que íbamos a hacer, quedó en stand by y vamos a tratar de hacerlo el año que viene.