Mes de las Infancias - Lanzamiento de El Diario junto a Eduvim
Para leer nuestras primeras ficciones
El misterio de la casa grande, obra literaria apuntada a pequeños lectores, fue escrita por Jimena Néspolo junto a Marta Vicente. La misma ya está disponible en todos los quioscos de diarios y revistas
En el marco del Mes de las Infancias, El Diario junto a la editorial universitaria Eduvim llevan adelante el lanzamiento de la obra literaria infantil “El misterio de la casa grande”.
La placa, realizada por Jimena Néspolo y Marta Vicente, conjuga una enorme calidad literaria junto a una destacada tarea de arte plástico (en ilustración). Es que los textos son acompañadas por diversas piezas pictóricas que apoyan el sentido de oscuridad y tal vez algo de terror.
La propuesta es una buena puerta de entrada para los niños en el campo ficcional y está recomendado para lectores a partir de los 7 años.
¿Qué trama la trama?
El volumen narra las peripecias de dos niñas (Rose y Magnolia) que visitan una casa grande con la única prohibición de no mirar el espejo encastrado en el ropero de la habitación de la abuela.
Una niña desafía las órdenes de los mayores y se antepone al espejo, quedando atrapada en su espectro, encerrada en esta trampa quimérica.
Desde el punto de vista narrativo, Néspolo comentó en su momento que las protagonistas del relato se fueron manifestando de a poco y solo debieron seguirles el rastro para dilucidar qué historia tenían para contar.
Entre sus líneas, el lector experimentado, puede encontrar dialogismo con Julio Cortázar -referido a la naturaleza gótica- o del mismo Jorge Luis Borges, en lo referido a los espejos. También, en el viaje de “un mundo a otro”, se puede pensar en Lewis Caroll, autor de “Alicia en el país de las maravillas”.
Vicente, por su parte, aportó que la unión de artes, para tal libro, posibilita la expansión sensorial.
En más detalles, la esencia de El misterio de la casa grande se da por la vibración del relato a partir de la riqueza de las imágenes que potencian la creatividad, disparan la fantasía y propicia el encuentro de sentidos.
Las ilustraciones comenzaron a surgir y fueron abonando a la aparición de la escritura. Las autoras conciben a esa producción como una unidad de literatura y figuración, no como cosas escindidas e individuales que se agrupan artificialmente, ni como una relación servicial en la que la ilustración tradicional representaba a las letras. Aquí, la narración se va trenzando con la imagen, generando el efecto que se busca en el universo fantástico.
El libro está disponible en todos los puestos de diarios y revistas de ambas villas y de la región. De no ser así, puede ser solicitado al vendedor.
