Jóvenes emprendedores en el recorrido que están haciendo ruido

Hidromiel y licores con la impronta de un joven local

lunes, 3 de febrero de 2025 · 08:39

La historia es así: un joven de 25 años, llamado Federico Manfredi,  de Villa María, aunque vive en Villa Nueva, comenzó a estudiar para guardabosques, previo a la pandemia. Asunto que se complicó por cuestiones económicas durante su estadía en Córdoba. Ahí, ante el dilema de si con el dinero con el que contaba comía o salía de fiesta con sus amigos, decidió -sabiamente- comer. Y como tampoco le alcanzaba para tomar ni una cerveza, se le ocurrió de la nada producir hidromiel, ya que miel -por una cuestión familiar- le sobraba.

“Mi padre murió en 2015 y era apicultor. Al fallecer le vendimos todo el equipo a un señor, que hoy nos paga con miel a la familia, misma que vendemos. Así que se me ocurrió producir Hidromiel, para consumo propio. Lo hice. Y me gustó como me quedó, y a mis amigos también, así  que comencé a producir más y a venderlo. Y me iba bien, hacía todo muy artesanal y reciclado, pero la pandemia lo complicó todo, y no solo paré con eso, sino de estudiar”, dijo Fede.

Tras los años que un virus con corona puso patas arriba al mundo, Fede regresó a Villa María, en realidad afincándose en Villa Nueva. Y además de comenzar a estudiar Agronomía en la UNVM, decidió formalizar su emprendimiento de hidromiel y licores, llamándole Ficco (Fede, en italiano), como le llamaba su abuelo, “y quien no me heredó el gusto por los licores y mucho menos a hacerlos, pero sí por el vino, así que tiene algo que ver en todo esto”.

Sí, nadie le enseñó, aprendió solo, como sucede a veces cuando sos uno de siete hermanos, y no hay tiempo para hacer lo que se quiere salvo hacerlo por uno mismo. Y cuando uno ve la cantidad de gente que se acerca, pregunta y prueba sus productos y como él los atiende, explicando a detalle cada uno y cómo los hace, es fácil darse cuenta el porqué de todo.

“Al regresar a Villa María no empecé de una con la hidromiel, de hecho realicé otros emprendimientos como de árboles nativos y haciendo embutidos, que me encantan, pero se necesita una infraestructura más grande. Así que comencé con la hidromiel, y luego con el licor, que tienen cada uno su propio secreto. Y ahora lo hago más en forma. Antes usaba botellas recicladas, pero era un gran trabajo el limpiado y la selección me llevaba mucho tiempo. Así que ahora compro las botellas, y tengo la marca más en forma, e incluso con un Instagram donde la gente puede buscarme, en_Ficco, o en la Feria Feria y en el WhatsApp 3513479357 ”, detalló. Contó que la creación de  licores le llegó porque le sobra “un alcohol neutro de uso alimenticio, me regalaron unos limones e hice lemonchelo. Ahora los hago con otros frutos. Ambos procesos son diferentes y a la vez sencillos. Pero lo mejor de todo es que a la gente le gusta el producto, y sin duda el Festival ha resultado exitoso en ventas y para darme a conocer”.

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