“No supimos cerrarlo, que es lo que veníamos haciendo bien”

Escribe: Daniel Rodríguez

Tras la serie de penales, y hasta recibir sus medallas, el plantel de Colón permaneció en un silencio casi total en el círculo central de Plaza Ocampo.

Aquel cronómetro que parecía jugar a su favor, terminó haciéndolo en contra. Para colmo de males, la lotería de los penales le fue esquiva y el elenco de Arroyo Cabral terminó alejándose de su sueño copero.

Visiblemente afectado tras la derrota, pero manteniendo la mesura, Daniel Barrera, director técnico del rojinegro, dialogó con un periodista de El Diario: “No pudimos agarrar en el segundo tiempo la mitad de cancha, pero creo que en estos dos partidos nos pasó lo mismo: no supimos cerrarlo, que es lo que veníamos haciendo bien. Después, en los penales, ellos tienen un buen arquero”, valoró el entrenador.

Más allá de este resultado fatal, el plantel cumplió un torneo por demás positivo, es que logró sacarse de encima a Alem de Villa Nueva, que venía invicto, y al último campeón, Atlético Ticino.

Respecto a ello, el entrevistado valoró: “Si bien el objetivo de jugar otra final fue interesante y más de la forma que vinimos, estando clasificados últimos y dejando a dos importantes rivales en cuartos y semi, duele perder la final, pero esperamos trabajar el segundo semestre para llegar al mismo objetivo”.

El elenco de Cabral vio perjudicado su juego en los últimos minutos, cuando Universitario comenzó a ser más incisivo. Apoyando tal definición, Barrera coincidió y explicó: “Cuando nos fuimos atrás perdimos volumen de juego, los volantes nuestros se retrasaron demasiado, pero lo estábamos defendiendo bien. Fue en la última pelota cuando nos descuidamos, como también pasó en la segunda final (N. de la R: en el segundo encuentro, le empataron el partido a diez minutos del final y terminó 2 a 2)”.

Agradeciendo y saludando a toda la masividad que se acercó hasta el estadio, redondeó: “La gente siempre nos acompaña en gran cantidad, gente que viene y apoya. A nosotros nos cuesta mucho, realmente, el trabajo semanal porque es un club que depende de la gente que apoya y de la Comisión Directiva que trabaja”.

“Estaba todo dado”

Durante el año 2010, Julio Giraudo formó parte de aquel elenco rojinegro que fue campeón. La historia no pudo repetirse durante la jornada de ayer.

 “Teníamos todo, estaba todo dado para que coronemos una buena tarde y le demos una alegría  a la gente que se lo merece y hace mucho esfuerzo para este club, donde es muy jodido hacer fútbol”, lamentó.

Generando una comparativa, El Mono, valoró: “Por ahí ellos tienen un presupuesto asignado, nosotros hacemos choripanes, polladas o pedimos plata. Hoy en día, a los clubes como nosotros se les hace muy duro hacer el fútbol a pulmón”.

Por otro lado, enfatizó que “la única diferencia estuvo en los penales, (ellos) tuvieron la suerte de que erre Martín (Barrionuevo), que es un jugador que no ha errado casi, pero son cosas que tienen el fútbol, hay aceptarlo y trabajar para el campeonato que viene”.

Referido a los últimos minutos, el arquero definió: “Nos quedamos muy atrás. Metimos a Luciano (Luppo) porque perdíamos mucho en mitad de cancha, pero es el mismo instinto de no poder agarrar la pelota. Faltando cinco minutos y teniendo la posibilidad de ser campeón, el mismo instinto te hace tirarte atrás”, insistió.

Colón - Uno x uno

Julio Giraudo: tuvo un buen desempeño, incluso le sacó un sablazo increíble a Federico Falco a poco del final. En los penales estuvo cerca, pero no tuvo suerte.

Marcos Velasco: marcó y corrió por su carril. Logró asociarse con sus compañeros de saga pero no tuvo tanto protagonismo.

Pablo Alvarez: cumplió su rol de central. Revoleó por los aires todo lo redondo y parecido a una pelota. Se mostró firme.

Matías Piovano: con oficio y entrega, colaboró con el mediocampo y trabajó para salir del fondo.

Michael Villagra: se lo halló bien parado en su sector. En las mano a mano, prácticamente se quedó con todas.

Federico Cipolat: de buen nivel. Por el sector izquierdo participó en el ataque y también en la defensa. Remató al arco pero no tuvo suerte.

Franco Ñáñez: firme y con buena distribución. Luchó, peleó y hasta metió varios pases interesantes, como ya es costumbre.

Juan Medina: se proyectó en ataque aunque la pelota pasó poco por su sector. Se lo vio impreciso.

Tomás Andrada: con poca participación; tuvo que retroceder un par de metros para poder tener participación en el juego.

Martín Barrionuevo: tal vez el punto más alto del equipo. Tuvo su propio gol, con pelota dominada, aunque en la segunda etapa fue neutralizado.

Richard Brusa: no tuvo el control ni la comodidad suficieiente. Tampoco fue bien asistido en los últimos metros.

Luciano Luppo: entró para ganar más en el mediocampo, más no logró imponer (ni exponer)  su experiencia.

Ramiro Giraudo: se lo mostró afectado al momento de volver a la actividad. Tal como en la segunda final, ingresó promediando el segundo tiempo.

Julián Luque: no llegó a tener participación y no gravitó en los últimos minutos de juego con su ingreso.