Abrió temprano, cerró tarde

Con goles en los extremos del juego (principio y final), Alumni le ganó con lo justo y cierto apremio por 2-1 a 9 de Julio y extendió su racha triunfal en este retorno de la competencia, en el marco de la novena fecha del Torneo Apertura Francisco “Cacho” Fiandino.

El gol del final le otorgó los méritos a la búsqueda constante del equipo de Santoni, que generó múltiples ocasiones de gol, pero no persuadió con su actuación frente a un rival que, sin todas sus armas, trabajó el partido con oficio y apuntalado por individualidades. El equipo de Bonaveri, para más, también tuvo una satisfacción pese a la derrota porque aseguró la clasificación, mientras piensa en recuperar soldados para los cruces (Manu Coria, esencialmente).

A los tres minutos, llegó el 1 a 0. El primer ataque a fondo del Fortinero en una notable acción colectiva a pura precisión y velocidad: Elías Delsole (atacante natural ubicado como lateral derecho) desbordó por la banda derecha, habilitó a Galleguillo, cuya definición encontró la gran respuestas de Reartes, pero en el rebote facturó Gayoso.

Ese gol, el funcionamiento de Alumni y la intranscendencia que mostró el rival en ese primer cuarto de hora, pareció mostrarle las cartas al local para definir rápidamente la historia. Igualmente, nada de eso sucedió. El Fortinero, con dominio territorial y de pelota, apagó la intensidad y empezó a decidir mal los pases en zona media, confundir las vías de ataque -dejó de utilizar las bandas con Cecchini, Galleguillo y Delsole- y le permitió al Patriota asentarse en el campo de juego y empezó a desenvolver con despliegue y empuje su rol estratégico en el partido.

Primero insinuó Diego Deheza por derecha, luego Gabriel Deheza la envió apenas elevada en un tiro libre y, sobre el final, una notable corrida y preciso centro de Gabriel Díaz le permitió al goleador Alejandro Salinas, en su única clara en el juego, facturó el 1 a 1 con potente cabezazo.

Previo al empate, Alumni tuvo las suyas, con un tiro rasante de Galleguillo y más tarde, Reartes, con espectacular volada, le impidió la segunda conquista a Gayoso, quien captó una falla en la salida del fondo del rival.

En el complemento, el local volvió a tener el rol protagónico y atacó profundo, acumulando arribos en el área rival sin lastimar porque falló en la definición (Gayoso, tras gambeta al arquero, remató a un costado) o eligió el pase en lugar del tiro. Como el gol no llegaba, Santoni metió a Iván Pessuto, quien entró activo y punzante, y en su primera aparición casi metió “el golazo”, pero definió a las manos del arquero.

Fueron minutos de mucha zozobra para el visitante, asfixiado físicamente y sin respuestas defensivas, y hasta casi le costó perder al arquero, pero el referí le perdonó la roja cuando cortó con su mano y afuera del área una ocasión manifiesta de gol.

Como no acertó Alumni y, tras tomar respiro, el Patriota llevó otra vez el trámite a su campo más favorable, e insistió por izquierda con Díaz y encontró algunas réplicas con los despegues de Gabriel Deheza.

Así, el partido fue más abierto en la recta final. Alumni siguió moviendo piezas para encontrar el anhelado gol del triunfo, al cual lo tuvo en primer momento el equipo de Bonaveri pero Bergese, a los 43’, culminó con un remate débil a las manos de Scalzo una acción de contragolpe.

En el primer minuto recuperado, el juvenil Julián Beltrando llegó al fondo por la derecha y le dio el pase atrás a Pessuto, quien esta vez acertó al arco, la pelota entró pegada al palo y le dio la victoria a Alumni.

Con los tres puntos, el equipo de Santoni trepó un escalón en la Zona Sur (quedó cuarto) y, pese al revés, el Patriota confirmó su lugar en playoffs por el triunfo ticinense.

La figura: Iván Pessuto. Entró activo, desequilibrante, picante y terminó dándole la victoria al Fortinero en la agonía del juego. También fue constante lo de Julián Cecchini. En la visita, el mejor fue el arquero Alex Reartes y las corridas de Díaz, autor intelectual del gol Patriota.

El árbitro: Diego Ortega. Cobró casi todo, hasta las propias de roce de juego; en las más complejas, perdonó a ambos. Interpretó que no era expulsión a Reartes por cortar ocasión manifiesta de gol fuera de su área y que no hubo intercepción ilícita cuando la pelota pegó en el brazo en un remate dentro del área de Alumni, que significaba penal para la visita.