Las fieras no se sacaron ventaja, aunque el Lobo fue más astuto

Leandro N. Alem y Deportivo Argentino dividieron porotos en La Leonera gracias a una esmerada actuación del arquero tricolor, Leo Morales, quien detuvo tres pelotas vitales para que el último campeón no cayera como local.

El cotejo -que fue entretenido- tuvo muchas llegas (aunque algunas más claras que otras).

 En lo conceptual, y literalmente hablando, se enfrentaron dos equipos con formas de juego bien distintas. Por un lado, el Lobo, abriendo la cancha y, por otro lado, el León -la otra fiera- apostando al acecho del contragolpe.

Los primeros 20 minutos de tal choque de estilo tuvieron una tónica marcada por la visita, quien tuvo más profundidad. En esos momentos fue cuando Morales se convirtió en figura tapando dos balones que podían ser un gol seguro: la primera fue a los 10 -siempre de la primera etapa-. Allí, en una jugada iniciada por derecha por Benjamín Martínez, Pedro Berazategui remató, pero el “uno” local respondió bien. Más tarde, a los 16, volvería a detener otro embate de los pies de Benjamín Martínez tras una asistencia de Centeno en condición de ataque.

En este tramo Argentino sumó fuerzas con la tarea de Claudio Lana Díaz y también con Cristian Fernández, un volante que tiene llegada al arco de enfrente.

Alem sufría, no podía salir del fondo y creaba solamente en contragolpes por medio de Rodrigo Márquez, quien se destacó por su individualidad, pero no tenía con quien descargar.

Y tuvo más llegadas Argentino por medio de dos sendos cabezazos de Gabriel Danna que se fueron por encima del travesaño.

Ya para el final de la primera etapa el visitante fue perdiendo profundidad porque los experimentados Pascual Gudiño y Pablo Fernández se asentaron bien en el fondo local.

Tuvo sus chances el campeón vigente, pero Leonel Cumbia Luciani también tuvo una tarde para destacar. Benjamín López, Martín Fava y Agustín Pereyra fueron algunos de los dueños de casa que incomodaron al rival. A los 30, por medio de un cabezazo, Gudiño probó a Luciani, quien se esforzó y envió el balón por al tiro de esquina luego de cachetearla y que el mismo cuero diera en el travesaño.

Ya para la segunda etapa Alem salió más entonado. Márquez probó desde afuera del área y Lautaro Pereyra apareció con un buen disparo, luego de una jugada elaborada por el Panzón Márquez. En su situación, Lautaro superó a Danna, pero no pudo hacer lo mismo con Luciani que salió a achicarlo y la envió al tiro de esquina.

Le costaba tener la pelota en la mitad de la cancha a Argentino. Pero luego de estas dos llegadas, el León se retrasó y el Lobo fue al frente con Díaz, Benjamín Martínez e Isaías Ñañez (quien vería la cartulina roja más tarde por irle fuerte a Nahuel Fernández).

Hubo más chances para el Lobo, y tal vez la más clara se dio con un cabezazo de Benjamín Martínez que dio en el travesaño. En el rebote de tal jugada, Cristian Fernández volvió a probar, pero el esférico volvió a reventar el caño horizontal.

Le quedaría otra más a Benjamín, pero Morales estaba en su tarde y no hubo forma, el portero campeón estaba inspirado.

Las variantes fueron finalmente amesetando el desarrollo final, que terminó siendo un 0 a 0 donde el Lobo mereció más, pero -a la postre- los partidos no se ganan por merecimientos.

La figura

Leo Morales. Muy seguro arriba y tapó tres disparos peligrosos que podrían haber significado una derrota.

El árbitro

Yoel Yúdica. De correcta labor. En un partido difícil, no tuvo inconvenientes. Supo quitarse de encima la presión y dirigió con mucha autoridad. Bien en la expulsión de Ñañez.