El RG volvió a sonreír

Atrás había quedado la fecha de los clásicos y ambos equipos necesitaban ganar para dar vuelta la página. Ricardo Gutiérrez fue quien terminó llevándose los 3 puntos de Tierra Santa, dando vuelta un partido durísimo frente al River de Rodrigo Aguirre.

Desde el inicio del partido, el viento fue protagonista y, sumado al mal estado del campo de juego y a una cancha chica, se podía prever un partido friccionado y con poco fútbol.

Sin embargo, el primer tiempo arrancó con todo: en apenas ocho minutos, había pasado mucho. El local llegó con un remate de Bolatti quizá algo apurado, porque tenía tiempo para decidir mejor y se la terminó entregando a Oliva. Después, con un avance de Pellizari que encontró la cabeza de Giraudo, pero totalmente desviado.

Por el lado de River, una vez que se acomodó a las condiciones del partido, llegó con un centro de Gigena que por poco no la pudo empujar nadie por atrás. Pero tuvo que mover las piezas rápido por la lesión de Morales, y así tuvo que ingresar De Castro, y Julián López pasó a jugar por la punta izquierda.

Ese arranque prometedor se planchó, hasta que al minuto 18 llegó la apertura del marcador: llegada al fondo de Matías Sánchez por izquierda, centro y cabezazo bien pegado al palo de Laureano Gigena. 0 a 1.

A partir de ahí, River fue un equipo ordenado, pero ya no tan voraz de mitad de cancha hacia adelante. Por el contrario, el RG salió herido en su orgullo a buscar el empate como podía. Bianchetta estaba impreciso y se notaba, pero Giraudo demostró que sería su tarde y Oliva le tapó lo que hubiese sido el empate. El goleador ya había tenido dos chances y se tiraba atrás cuando era necesario, pero el arquero visitante está teniendo un gran campeonato hasta acá y no conforme con eso, le tapó el rebote de esa jugada al mencionado Bianchetta.

En tiempo de descuento, Oliva otra vez se hizo gigante: Pérez, que se volcaba de derecha a izquierda con total naturalidad, se le pasó a Cativelli. Pero el “uno” le ganó el duelo al “11” y mandó la pelota al tiro de esquina.

Al igual que el primer tiempo, el complemento arrancó con quinta a fondo. Es que ambos equipos hicieron cambios y el RG llegaría rápidamente a la igualdad: jugada y centro de Pérez por la izquierda, no la pudo despejar nadie de la visita, y Giraudo le rompió el arco a Oliva (3’). 1 a 1.

A partir de ahí, el trámite del partido cambió porque el local se tranquilizó con la igualdad que merecía, y River se acordó de atacar. Es por esto que, si bien faltaban situaciones de gol, ambos equipos mostraban lo suyo, y el visitante sería peligroso por la banda izquierda. Con Gagliese como referente de área y Gómez como segunda punta definida tras la salida de Gigena y el ingreso de Ferreyra por Bonaveri, River empezó a encontrar el juego. Matías Sánchez participaba del armado de las jugadas y el mencionado Gómez era un problema para Boglione y compañía.

Justamente, Sánchez remató desviado entrando por la izquierda (15’), y Gómez hizo lo propio a los 26’, luego de que Sánchez ganara una pelota dividida, ayudado por el pique. Pereno se dio cuenta de esto, y reemplazó a Boglione, que estaba al borde de la roja, por Tobías Ripa. Reacomodó la defensa, dispuso la entrada de Ibarra por Pérez, que ya lucía algo cansado por todo el despliegue que había tenido, y le daría resultado.

Al minuto 36, por una falta en la mitad de la cancha, el RG mandó la pelota al área y Giraudo conectó de cabeza para anotar el segundo gol. La última parte del partido se hizo algo desprolija, con el local ahora apostando definitivamente a la contra, y con River buscando la igualdad.

Ibarra pudo liquidarlo, pero su disparo se perdió por el segundo palo (41’). Por el lado de River, avanzó con más ganas que fútbol y consiguió algunos tiros de esquina, como el centro cerrado de Facundo Ferreyra que Becco despejó con los puños.

Al minuto 50 (Sível adicionó más de lo habitual en ambos tiempos, aunque en el segundo de manera justificada), otro tiro de esquina encontró sorpresivamente a López en el área, quien en segunda pelota quiso definir de taco. Le salió a las manos del arquero. Pudo haber sido el empate en el marco de un partido parejo, aunque el local fue más incisivo donde se definen los partidos: en las áreas.

La figura: Ramiro Giraudo

Marcó los dos goles que fueron decisivos para el triunfo de su equipo. El primer tiempo Pérez también se destacó. En River, Oliva y Matías Sánchez.

El árbitro: Marcos Sivel

Bien. Controló el partido sin sobresaltos y se mostró firme frente a las protestas de los jugadores. Pudo haberle mostrado la roja a Boglione en el segundo tiempo.