La conexión con un gato

Generalmente, cuando un gato entra a vivir en un nuevo hogar, se vuelve el rey de la casa. El propietario de la vivienda pasa un segundo plano entre las paredes. El felino manda.

Muchas personas sostienen que los gatos odian a sus dueños; otros tantos que es imposible que en una bolita de pelo puedan existir sentimientos tan fuertes hacia sus cuidadores. Para los que puedan dudarlo, un nuevo estudio publicado en “Current Biology” ha descubierto que los felinos sí pueden llegar a sentir conexión con sus amos.

La investigación señala que forman vínculos saludables (o todo lo contrario) con sus humanos, de la misma manera que lo hacen los perros y los bebés.

“Aunque existen muchos estudios que analizan los lazos entre los perros y las personas, no se puede decir lo mismo de los gatos”, señala Kristyn Vitale, investigadora del Laboratorio de Interacción Humano-Animal de la Universidad Estatal de Oregon y autora principal del estudio.

“Creo que parte de la razón de esta escasez de investigación sobre las interacciones gato-humano puede deberse a la idea de que los felinos no son animales especialmente sociales”, explicó. “Sin embargo, los gatos muestran un rango de comportamiento social, e investigaciones recientes indican que podemos estar subestimando la importancia de la interacción social en la vida de estos animales”, añadió.

En el estudio se usaron otros estudios previos y simplemente pensaron: “¿Los gatos realmente se ajustan a los estilos diferentes de apego o no?” Por eso, reprodujeron una investigación de los años 70 entre padres e hijo llamada ‘pruebas de situaciones extrañas’; pero en vez de humanos usaron 108 gatos: 70 cachorros y 38 adultos.

La primera prueba fue dejar a un gato junto a su dueño en una habitación durante dos minutos. Después, el humano salió del espacio el mismo tiempo y regresó de nuevo al interior durante dos minutos más, para ver la respuesta del gato y determinar qué estilo de apego tenía con su cuidador: seguro o inseguro. En el primer caso, los felinos saludan y vuelven a lo que estaban haciendo antes, como lo haría un humano; en el segundo, muestran miedo o ansiedad levantando sus colas, lamiéndose el bigote o evitando a sus amos.

La investigación también observó cómo reaccionaban 108 gatos cuando se reencontraban con sus dueños después de haber sido separados unos minutos.

Los resultados fueron concluyentes: el 64% de los gatos respondían de forma segura al reencuentro con sus dueños, un porcentaje similar al que se ve en estudios similares con perros y bebés. Según Jackson Galaxy, experto en comportamiento y bienestar del gato, es la mejor manera de acabar con el mito de que los felinos son distantes e independientes.

La mejor forma de comprender cómo es uno de estos animales, a juicio de Kristyn Vitale, es entender sus necesidades emocionales: “La mayoría de los gatos buscan que sus dueños sean una fuente de seguridad”. Si esto no ocurre, estarán molestos.

Valorar noticia

0%
Satisfacción
0%
Esperanza
0%
Bronca
0%
Tristeza
0%
Incertidumbre
100%
Indiferencia

Comentarios