En alerta por la rabia
La veterinaria Aldana Banchio dio detalles de la enfermedad que dejó una víctima fatal en el país este año. Aclaró que no hay que sacrificar al animal, aunque el problema no tiene tratamiento y la única solución es la vacuna
Hace 13 años que no se detectaba un caso de rabia en el país; hasta mediados de mayo de este año, cuando una mujer de 33 años falleció por la mordida de un gato que presentaba la enfermedad.
La veterinaria Aldana Banchio (MP 4.552) aseguró que la situación “preocupa entre médicos y veterinarios”, ya que hay nuevos casos en animales y personas; convirtiéndose en un “virus emergente”.
La rabia se define como enfermedad zoonótica, es decir, su transmisión es de los animales hacia las personas. Por lo tanto, una manera de prevenirlo es con la vacunación de las mascotas.
En cuanto a la sintomatología, Banchio explicó que la enfermedad atraviesa “tres fases, donde la primera comienza con un animal agresivo y desorientado”.
En caso de animales silvestres pueden verse modificados su ciclo circadiano, cambiando sus hábitos nocturnos por diurnos, mientras que en animales domésticos “dejan de responder a su dueño”. Continúa una “fase agresiva con compromiso del sistema nervioso”; la mascota empieza a atacar a otros animales y humanos. En esta etapa la transmisión sucede a través de la saliva, sea “por una mordedura o rasguños”. La última fase es la muerte del animal, ya que, según Banchio, “no hay tratamiento sintomatológico que pueda evitar el cuadro de la rabia”.
Qué hacer
Si la persona recibe el ataque de un animal debe dirigirse inmediatamente a cualquier centro de salud e informar la situación. La veterinaria aclaró que siempre se recomienda “capturar al animal o identificar dónde se encuentra”. En este sentido Banchio, quien ejerce su profesión en Arroyo Cabral, explicó que el animal debe someterse a “una cuarentena estricta para observar sus síntomas” y evaluar su evolución.
En caso de ser positivo para la rabia, la profesional resaltó que “no se debe sacrificar al animal”, ya que es necesario la manifestación de las etapas de la enfermedad, para que pueda ser identificado con la “muestra de tejido nervioso que se envía a los laboratorios autorizados para su diagnóstico”.
Sin tratamiento
Al no haber tratamiento, Banchio enfatizó la necesidad de realizar la vacunación antirrábica tanto en perros como gatos.
El plan correcto de vacunación es “una dosis anual, repitiéndose todos los años y solo los veterinarios están habilitados para aplicarla”, confirmó la profesional.
La inoculación en humanos permite prevenir la sintomatología de la enfermedad, disminuyendo su mortalidad. En este sentido Banchio remarcó que, en caso de no recurrir a un centro médico, la persona empezará a manifestar los síntomas y “ya no habrá vacuna que pueda evitar el desarrollo de la enfermedad y, por lo tanto, la muerte”.
El vector principal en la transmisión de la enfermedad es el murciélago, llevando consigo el virus y contagiando a los animales domésticos como perros y gatos, aunque Banchio aclaró que también “los bovinos y muchos animales pueden enfermarse de rabia”.
Vacunación postergada
En Villa María, el municipio informó que el plan de vacunación antirrábica quedó en pausa, a la espera del envío de nuevas dosis por parte de la Provincia. Las nuevas fechas serán confirmadas en los próximos días por el Centro de Adopción Municipal (CAM).
La iniciativa que comenzó el 6 de septiembre lleva vacunado a casi 2.000 animales y busca promover la tenencia responsable de mascotas.
