Ya se lanzaron dos mil misiles desde Gaza

Unos dos mil misiles fueron lanzados hasta ahora desde Gaza hacia Israel. El jueves por la noche más de 200 fueron arrojados desde el enclave palestino y, de esos, 30 cayeron dentro mismo de la Franja, informó el Ejército israelí.

A la vez, durante la misma noche unos 160 aviones del Ejército israelí atacaron más de 150 "objetivos subterráneos" en el norte de la Franja.

Paralelamente a las incursiones aéreas de tierra, artillería y tropas acorazadas se alinearon junto a la frontera y dispararon cientos de proyectiles de artillería y tanques.

El objetivo de los ataques, agregó el comunicado, era la red de túneles subterráneos de Hamas, de la que fueron "destruidos muchos kilómetros".

Ciento diecinueve personas, entre ellas 31 niños y 19 mujeres, murieron en Gaza desde el comienzo de los ataques israelíes, informó el Ministerio de Sanidad local, precisando que los heridos son 830.

La delegación de la seguridad egipcia que se reunió con funcionarios israelíes "no logró obtener resultados positivos en detener los ataques israelíes contra Gaza y los palestinos en Jerusalén "a cambio del freno al lanzamiento de cohetes de Gaza y el anuncio de una tregua, aunque sea temporal", dijo una fuente en El Cairo.

Según los medios, entretanto, no fue un "error" la noticia del jueves por la noche según la cual las tropas israelíes entraban por tierra en Gaza, sino más bien "una estratagema para hacer que los combatientes de Hamas entraran en los túneles subterráneos que estaba atacando el ejército en un masivo bombardeo nocturno".

También a Cisjordania

Mientras más crece la escalada militar entre Israel y el movimiento islamista Hamas en la Franja de Gaza, las protestas, la represión y los choques violentos se multiplican en las ciudades israelíes con importante población árabe y ayer se instalaron definitivamente en Cisjordania, otro territorio palestino ocupado, con 10 muertos en lo que cada vez se parece más a una tercera intifada.

Esta nueva ola de violencia en un conflicto que tiene más de un siglo comenzó justamente con protestas y represión en Jerusalén este, uno de los tres territorios que la ONU y la mayoría del mundo reconocen como ocupado por Israel y que podría ser parte de un futuro Estado palestino en un eventual acuerdo de paz.

A diferencia de otras escaladas, la intensificación de los bombardeos israelíes hacia Gaza y de las hostilidades dirigidas por Hamas contra el sur y el centro de Israel, no cambió el foco de atención ni frenó las protestas de los palestinos dentro de Israel. Todo lo contrario.

La violencia creció, las protestas y la represión se convirtieron en choques entre ciudadanos judíos y musulmanes y hasta algunos linchamientos a plena luz del día. Hubo muertos y varios heridos. Ayer medios palestinos denunciaron que una nueva marcha en Jerusalén este fue agredida con disparos por parte de colonos judíos.

En este contexto, grupos de palestinos comenzaron a salir ayer a las calles en Cisjordania, en solidaridad con sus pares en Israel y en Gaza, y la respuesta de las fuerzas armadas y colonos israelíes no tardó en llegar: al menos 10 jóvenes manifestantes fallecieron en la represión o por ataques de colonos, según el Ministerio de Salud de la Autoridad Nacional Palestina, citada por la cadena de noticias Al Jazeera. Otros 500 resultaron heridos.