“No quisieron atender a mi hijo porque presentamos una queja”

Micaela Auce se presentó el lunes último en el Centro de Atención Primaria de la Salud al que se ingresa por calle Tucumán, entre Pasteur y ruta pesada, para retirar la leche en polvo que mensualmente se le entrega para su hijo Valentino, de 2 años y 8 meses, trámite que cumplió sin inconvenientes. Seguidamente, solicitó un turno con la pediatra “que lo atiende desde antes que ese dispensario se mudara al edificio remodelado, porque quería llevarle los resultados que nos habían solicitado de fonoaudiología, psicología, entre otros”... Pero en ese momento surgió lo inesperado.

“La recepcionista, de nombre Norma, abrió la historia clínica de Valentino y la primera hoja que apareció es la nota firmada con otros papás el 5 de septiembre, quejándonos por la demora de la doctora Noble, a la que más de una vez tuvimos que esperar mucho más de una hora... Entonces me dijo: ‘Vos sos la que presentó la nota; la doctora no quiere atender a tu hijo’”, narró Auce, quien estaba grabando la conversación.

Con pruebas

La joven madre dijo a continuación: “Las irregularidades que quiero señalar son varias. Por un lado, que la nota que firmamos los padres nunca fue elevada a ninguna superioridad. Por otro lado, la tienen en la historia clínica de mi hijo estigmatizándolo, cuando fuimos varios los firmantes, más allá de que me dicen ahora que los demás desistieron del reclamo, algo que no es verdad, porque yo misma pude ver el lunes que sus firmas seguían al pie de la nota”.

La denunciante exhibe la nota original, con las firmas, y aporta el audio de la conversación con la empleada que se identifica como “Norma”, la misma que nombra a la pediatra como “Noble”.

Le dieron el turno, pero...

“Todo eso fue el lunes y ayer (por el miércoles) regresé con Valentino, para que lo atendiera la asistente social, lo que ocurrió perfectamente, tal cual estaba establecido. Ahí, posiblemente porque les había dicho que iba a venir a El Diario, se ve que hablaron con la doctora y me dieron el turno que les pedí el lunes; es el turno número seis para el próximo día en que la doctora Noble atenderá en el consultorio”, informó la mamá.

Y agregó: “Creo que estamos ante un caso de evidente mal desempeño de empleados públicos y que un empleado público se debe a los ciudadanos. Es algo que se les debería enseñar al tomar el cargo... El respeto al ciudadano, ante todo, y más todavía ante una queja legítima como la que presentamos”.

“Y ellos saben bien que es legítimo nuestro reclamo, porque aquel día que firmamos la nota, el 5 de septiembre, justo llegaba al edificio nuevo el intendente Martín Gill, a quien le hicimos saber de la demora que estábamos teniendo, por lo que hizo una llamada desde ahí mismo, no sabemos a quien, pero la pediatra apareció a los cinco minutos”, recordó.

Expresó que “aquella escena ocurrió al mediodía, como pasaba siempre, porque la pediatra tenía que llegar a las 12 y hubo días en los que la esperamos más allá de las 13.30, con los chicos con hambre y algunos de nosotros perdiendo de trabajar, como es mi caso, ya que me dedico a hacer viandas”.

“No soy una persona que vaya a pedir sanciones a un trabajador, porque me reconozco como trabajadora, y no quiero ir en contra de gente de mi misma condición, pero sí creo que al ser funcionarios deben entender a la gente y, que si no lo hacen, alguien se los debe hacer entender”, finalizó.