“El tránsito es el gran fracaso de esta gestión”

“No lo decimos ahora, lo dijimos siempre, el área de Tránsito es la peor del municipio, no por sus empleados sino por su conducción, que no establece lineamientos claros ni capacita adecuadamente al personal, limitándolos a meras cuestiones recaudatorias y de labrar actas de infracción, pero nunca actúa con una mirada preventiva y educativa para con el vecino de Villa María”. La aseveración corresponde a la edil del PRO, Karina Bruno, al referirse a las declaraciones hechas por el intendente Martín Gill sobre la problemática de tránsito, que salieron publicadas en nuestra edición del sábado, luego de una semana que dejó dos víctimas fatales a causa de accidentes viales.

“La política municipal de tránsito no existe, siempre se redujo a reacciones espasmódicas ante los hechos consumados. El tránsito es el gran fracaso de esta gestión, porque sus consecuencias se cobran en la vida y la salud de nuestros vecinos”, remarcó.

“Es preocupante que el intendente siga sin comprender la gravedad que tiene el tránsito en nuestra ciudad, avalando las pocas medidas que se tomaron, y que claramente fueron insuficientes y momentáneas. Su secretario de Gobierno (Rafael Sachetto) ha demostrado una notoria incompetencia en la materia”, manifestó.

“Sorprende que, en relación al accidente con el motorhome que se cobró una víctima fatal y otra continúa internada en grave estado, se limite a decir que ni siquiera fue un choque entre vehículos sino una mala maniobra. La consecuencia de ese accidente tiene que ver con el no uso del casco, y más allá de la responsabilidad individual de cuidarnos y protegernos, claramente evidencia una ausente campaña de educación vial y toma de conciencia de los ciudadanos por parte del municipio, campaña que se debe llevar adelante incansablemente, articulando con todos los actores sociales”, afirmó Bruno.

“No es una campaña de educación vial pegar carteles de vez en cuando, lo que necesitamos es concientizar a la gente de la gravedad de las consecuencias de no usar el casco y violar las normas de tránsito. Pero para que ello funcione tiene que haber una identificación del vecino con el actuar del municipio, una integración de acciones para llevar adelante en forma conjunta medidas realmente preventivas”, consideró la edil.

“Hasta ahora lo único que logró el municipio es que los vecinos se organicen para evadir los controles, lo que pone en claro la falta de legitimación e identidad de las acciones llevadas a cabo por el área de Tránsito, que están lejos, muy lejos de educar y prevenir”, señaló.

No alcanzó

“Como se dijo en el momento de su tratamiento, la emergencia vial tal y como había sido planteada ha fracasado. Cuando hace más de un año decidí no acompañarla expresé claramente que no alcanzaba con decir que estábamos en emergencia vial, necesitábamos un plan de acción, un plan de trabajo revisable a corto plazo para ir evaluando si se iba en la dirección correcta o qué debíamos modificar. Pero no se tuvo en cuenta lo sugerido”, subrayó.

“En materia de tránsito la gestión de Gill y Sachetto se ha quedado en meros anuncios, basta como ejemplo de ello el control de las infracciones dinámicas para el que se adquirió un equipo de gran valor, sin embargo hoy no hay ninguna implementación al respecto, se quedó en el anuncio. Y ni hablar si recordamos que esto debió llevarse adelante desde 2004, y nuevamente fue planteado en 2008. Llevamos ya 15 años desde que esta gestión promete una y otra vez poner en funcionamiento el control de las infracciones dinámicas”, sostuvo Bruno.

Sin decisión política

“Otro ejemplo es el Consejo Asesor Municipal de Tránsito y Seguridad Vial, que hace meses que no se reúne, porque nunca más fue convocado. Y a todo esto no podemos dejar de sumarle la falta de decisión política para resolver el tema del estacionamiento medido, que sería una herramienta importante para ayudar a ordenar el tránsito de la ciudad, pero la única medida de la Municipalidad al respecto es dejar que el tiempo pase para que llegue el vencimiento del contrato”, indicó.

“A Villa María cada vez se ha hecho más difícil transitarla, tanto para vehículos como para peatones, el tránsito es un caos. Las consecuencias de ello son cada vez más gravosas, los accidentes van en aumento como también la falta de conciencia y de prevención. No podemos seguir naturalizando esto, no podemos seguir acostumbrándonos a los accidentes y sus terribles consecuencias”, apuntó la edil.

“Esta gestión no supo y no sabe cómo resolver un problema que se ha transformado en su gran fracaso. Solo con educación y prevención real podemos resolver la problemática del tránsito”, concluyó.