Una marcha “en contra de” con múltiples consignas y reclamos

Una marcha en contra de muchas cosas. Una movilización para reclamar sobre diversas consignas. Una concentración que reunió a mucha gente, pero que, lamentablemente, no respetó el distanciamiento social necesario en este contexto para no exponerse a más contagios.

Eso fue lo que sucedió ayer en plaza Centenario. Alrededor de las 16 empezaron a llegar los primeros autoconvocados. Una hora más tarde se dio el pico de gente. Algunos se reunieron principalmente en la esquina de General Paz y Buenos Aires, mientras que otros tantos hicieron un surco alrededor de la manzana céntrica, tanto a pie como en vehículos.

Al igual que sucedió en diferentes puntos del país, hubo bocinazos, aplausos permanentes, cacerolas, gritos y hasta el Himno. Hubo banderas patrias, barbijos en su gran mayoría, pero no hubo demasiados carteles o pancartas con consignas.

Estuvieron los que reclamaron en contra de las últimas medidas de restricción que redujeron o, en algunos casos, cerraron la posibilidad de trabajar a determinados rubros. Otros levantaron la voz en contra de diferentes medidas del Gobierno nacional que van más allá de la cuarentena y lo que tenga que ver con la pandemia.

En definitiva, el “12O”, como se denominó la movilización, tuvo múltiples consignas. Incluso hubo quienes se sumaron pero desde lejos, en las veredas de enfrente a la plaza, reconociendo el riesgo de amontonarse: “Compartimos los reclamos, pero no queremos correr riesgos y por eso nos quedamos acá”.

De a poco se fue disolviendo la concentración, y prácticamente terminó frente al Concejo Deliberante, adonde se dirigió una parte de todos los que hubo en la plaza.

En general

“El dólar está por las nubes y este Gobierno lo justifica. El 90% del país es más pobre que antes, y también lo justifican. Si hoy estoy acá es porque la administración económica y social del país es un desastre y se escudan con la pandemia”, remarcó Marisel, quien se acercó a la marcha con su pequeña hija envuelta en una Bandera argentina.

Otro de los planteos que se pudo ver en algunos pocos carteles fue: “Señor presidente, devuelva la libertad y la independencia de los poderes. No al avance contra la Justicia”.

“Se olvidan para quiénes están gobernando. Castigan a las empresas, castigan a los trabajadores, castigan a los que producen, castigan a los que tienen ahorros. En este país te invitan a quedarte en tu casa a empobrecerte y a esperar lo que te den a cambio. Yo no quiero eso”, enfatizó un hombre que llegó en bicicleta hasta la marcha.

En particular

La cuarentena, las restricciones, los cierres de comercios, las idas y vueltas en cuanto a medidas que se han tomado por parte de cada nivel gubernamental (local, provincial y nacional) ganaron también lugar en las definiciones que se escucharon en la tarde de ayer.

“Es la cuarentena más larga del mundo y estamos entre los países con mayores contagios y mayor cantidad de muertes, y aún así nos echan la culpa a los ciudadanos de que la situación está complicada. Estaría bueno que reconozcan que las cosas se hicieron mal”, lanzó un joven opinando en general sobre el abordaje de la pandemia a nivel país. Junto a un compañero sumaron que “te piden que te quedes en tu casa y no te dejan trabajar, pero te lo dicen desde la comodidad de vivir del Estado; claro que no me muero si no voy a un bar o a un gimnasio, los que se van a morir de hambre son los bares, los gimnasios y las familias que están detrás de ellos”.

Por su parte, Carla, propietaria de un comercio, resaltó sobre una de las últimas obras anunciadas en la ciudad: “Nos estamos fundiendo y, en vez de proteger el sistema de salud, anuncian una circunvalación para Villa María. La esperamos durante años, mirá si no íbamos a poder esperar un año más. Era el momento de no hacer obras para la tribuna, sino para poder dejar el Hospital y los centros de salud a pleno”.

Hubo comerciantes de diversos rubros. Gastronómicos, escuelas de danza. “Lo estamos pasando realmente mal. Nos guardaron durante marzo, abril, mayo, junio, sin tener casos en la ciudad, solo por seguir órdenes de gente que desde Buenos Aires quería manejar la ciudad. Ya no se le puede pedir a la gente que siga aguantando, es hora de hacerse cargo de los errores”, expresó desde su auto Gabriel.