José Ferrero, otro villamariense en el Gobierno de Alberto Fernández

“Yo tengo códigos... Entonces, cuando Martín Gill me pidió que lo acompañe en su gestión en Obras Públicas en Buenos Aires, lo consulté con Juan Schiaretti, con quien vengo trabajando desde 2015”. Las palabras pertenecen a José Ferrero, quien está a la espera de la publicación del decreto del presidente Alberto Fernández que lo designará como director de Arquitectura de la Nación.

-¿Y qué le dijo el gobernador?

-Que vaya, que a nuestra provincia le va a servir mi presencia en el Gobierno nacional. Y que en lo personal es un reconocimiento a mi trabajo; como una suerte de ascenso. Si bien aquí soy secretario y allá seré director, el nuevo cargo es de nivel nacional.

-¿Qué le atrajo de la propuesta de Gill?

-Conozco su forma de trabajar; es emprendedor, es un realizador. Está encima de las cosas, no para hasta que la obra se termina... Y, además, lo tomo efectivamente como un desafío personal y profesional muy importante.

-¿De dónde lo conoce al secretario de Obras Públicas de la Nación? ¿Desde cuándo lo conoce?

-La verdad, hace relativamente poco tiempo que lo conozco. Lo traté en estos últimos cuatro años, él como intendente de mi ciudad, Villa María, y yo como secretario de Arquitectura de la Provincia de Córdoba. Lo ayudamos mucho con algunas obras que quería hacer: toda la reforma del viejo edificio del Hospital Regional Pasteur, en la calle Mendoza, para que fuera el Centro Cívico; el Parque Pereira y Domínguez... y varias más.

Ferrero egresó en 1978 del Instituto Secundario Bernardino Rivadavia y a los pocos meses decidió viajar por el mundo. Toda una experiencia de vida con menos de 20 años. En 1981 regresó decidido y se inscribió en la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional de Córdoba, de la que egresó poco después.

-¿Hizo toda su carrera profesional en la actividad privada hasta que lo convocó Schiaretti en 2015?

-Gran parte. Acá y en España, donde ejercí entre 2002 y 2007. Y cuando retorné participé un tiempo como subsecretario de Planeamiento en la gestión de Daniel Giacomino en la Intendencia de Córdoba, pero me fui antes de que terminara su mandato. Regresé a la actividad privada y después sí, en 2015 me incorporé al equipo que encabezaba Daniel Rey en Obras Públicas de la Provincia. El 10 de diciembre último, Daniel pasó a formar parte del Gabinete de Martín Llaryora en la Municipalidad de Córdoba y yo fui designado en su lugar en la Secretaría.

-Se dice que su pase de Córdoba a la Nación se inscribe en el contexto de una mayor cercanía que en las últimas semanas evidencia la relación entre las administraciones de Juan Schiaretti y de Alberto Fernández...

-Puede ser... Al menos en mi área, que es la de Martín Gill, hemos coordinado mucho y bien en este tiempo de pandemia que nos toca vivir.

-¿Qué le atrae de la función pública?

-Tratar de servir a la sociedad. Está tan denostada la función pública... y uno con trabajo intenta demostrar que desde ese lugar se puede mejorar la calidad de vida de las personas. Es un poco devolver lo que uno recibió de la educación pública y gratuita.