Un regreso lleno de esperanza

Con todos los protocolos y cuidados necesarios, durante la jornada de ayer las voces de niños y jóvenes volvieron a invadir los pasillos de las escuelas de nuestra ciudad y región.

Tal como en diferentes puntos del país (y la provincia), la vuelta a clases llenó de esperanzas a padres, alumnos y docentes. La preocupación, de ahora en más, será poder mantener esta modalidad.

Con horarios específicos, burbujas y conciencia, los educadores ya se encuentran trabajando y varios terminaron el día agotados de tanto subir y bajar escaleras, pero embargados de emoción.

Nivel Primario

Con padres comprometidos y toda una comunidad educativa conforme, Analía Buggia, directora de la escuela primaria Justo José de Urquiza de barrio Mariano Moreno dialogó con El Diario y expresó: “Estamos sorprendidos de la reacción de los chicos que entendieron todo lo que le explicamos”, reflexionó .

En cuanto a las actitudes, Buggia especificó: “Los niños respetaron el protocolo, mantuvieron su lugar, estuvieron con el barbijo puesto, en el recreo salieron y estuvieron en el lugar indicado y manteniendo la distancia”.

“Cuando terminamos (las docentes) estábamos muy emocionadas por haber vuelto a la presencialidad y también porque tenemos la satisfacción de que los alumnos se adaptaron y nos enseñaron un montón (a los grandes)”.

“Esta es una nueva forma de hacer escuela, y ellos  estaban felices, nos han contado muchas cosas que pasó este año que no nos vimos”.

A este punto no se llegó de manera azarosa. Si no que la directiva explicó que se trabajó previamente con las familias y se los fue capacitando.

“Le explicamos cuál era el protocolo a los padres y creo que es un trabajo en conjunto.  Comencemos pensando desde el punto en el que el padre no puede ingresar a la escuela tal como lo hacía antes, y es que siempre cuando vienen ingresan con los chicos. Esta es la primera vez que tienen que esperar en la puerta y que la maestra los reciba; entonces, partiendo desde donde el padre aceptó, eso hace mucho a todo el trabajo que nos toca a nosotros y quiere decir que se ha trabajado en la casa”.

Por otra parte, en cuanto a la asistencia valoró que todos estuvieron presentes. En ese tono, aseguró que ninguna familia se mostró en desacuerdo o tomó una actitud distinta al hecho de volver a las aulas. Es que en otros establecimientos el riesgo de contagio aún está latente.

Secundarias

 Por otra parte Marcelo Coppari, director del IPEM 147, Manuel Anselmo Ocampo MAO, narró: “Esto es un reencuentro que estábamos esperando. Esta mañana (por ayer) nos encontramos con los chicos de sexto y durante la tarde le dimos la bienvenida a los de primero”.

 “Terminamos de corroborar la necesidad de vernos y la socialización. Nos encontramos con estudiantes muy animados, con ganas de volver y de encauzar trayectorias escolares que, en algún caso, se vieron interrumpidas”.

“Tenemos una alegría muy grande porque el Plan Acompañar dio sus frutos y nos permitió que los alumnos desvinculados pudieran volver; a nivel insumos, lo que hemos solicitado, lo tenemos”. 

En ese tono, y respecto a lo que se viene, subrayó que “lo importante ahora es que los alumnos se van a tener que armar de mucha paciencia y de mucho cuidado. Los ingresos son paulatinos (en cuanto a los años y las asistencias van siendo un día sí y otro no”.

Vale la pena destacar que el MAO optó por la “modalidad bimodal”: los alumnos están en la presencialidad, pero también seguirán diversas actividades en el marco virtual.

Ahora, con la vuelta marcada, lo importante es poder sostenerlo en el tiempo. A eso, Coppari explicó: “El objetivo es transmitirle a los estudiantes la mayor responsabilidad social. Esto no es algo de ellos y nosotros, sino que es toda una comunidad implicada en este protocolo y forma de trabajar”.

En cuanto a la asistencia, el entrevistado valoró que a la mañana fue de un 90% y durante la tarde de un 97%.

Apostillas

Por un problema en un caño de agua, el IPET 49 (ex-Escuela del Trabajo) no se pudo desarrollar el retorno de modo presencial.  De igual manera, en la institución dirigida por Mónica Scaraffía,  se prevé que el próximo lunes retomarán “de forma escalonada”.

Los quioscos escolares son aún una materia pendiente ya que ninguno está habilitado y la merienda debe ser llevada desde cada uno de los hogares.

En el caso del jardín de infantes Gabriela Mistral, tal como se publicara en este medio, una docente había dado positivo y la vuelta se pospuso.