Un sueño hecho realidad

Después de muchos años, el sueño de la familia Ronco se hizo realidad: el doble de espacio, calzados e indumentaria en un mismo lugar, y trabajando todos juntos. Todo esto se logró al anexar un nuevo local, que permitió que Marvills Jeans duplique los metros para desplegar todo lo que tiene para ofrecerle a sus clientes.

“Después de tanto tiempo de anhelar tener todo junto en un solo lugar, pudimos lograrlo. En los últimos meses se dio que la gente que ocupaba el local al lado de nuestro negocio se fue, entonces nosotros tomamos ese espacio, hicimos una apertura en la pared y comunicamos ambos comercios”, explicó Héctor “Cacho” Ronco, quien junto a su esposa, Elba Porporatto, y su hijo, Maximiliano Ronco, está al frente del comercio que, con su trayectoria de décadas, ya tiene nombre propio en la ciudad.

El nuevo espacio recientemente inaugurado se sumó al local que Marvills Jeans tenía en la esquina de Yrigoyen y Corrientes, dedicado a la venta de ropa.

“Estamos felices porque logramos la conjunción de calzado e indumentaria en un solo lugar, ya que antes la venta de calzado estaba en Corrientes y 25 de Mayo. Con esta anexión, ahora tenemos un total de 300 metros cuadrados entre depósito y atención al público, la ampliación aumentó en un 100% el espacio”, precisó Héctor.

“Hace años que estábamos buscando esta oportunidad y no se daba, por eso instalamos distintos negocios en el centro de la ciudad, por la falta de espacio en un solo lugar”, agregó.

“Esto, además de cumplir un sueño, nos permite una mayor operatividad en el negocio, un mejor control, tener un mayor surtido y todo a la vista en un solo lugar. También permite acrecentar las ventas, porque en el mismo local se encuentra todo”, señaló.

“Cuando una misma línea de indumentaria y calzados hay que llevarla a otros locales, debilita en tener una buena concurrencia de clientes en un solo lugar y en tener un buen surtido. A la gente le gusta un espacio amplio donde pueda encontrar todo, que comprar una cosa en un local y otra cosa en otro negocio, porque se cansa de ir de un comercio a otro, como nos ocurría antes, que teníamos en un local la indumentaria y en otro espacio la venta de calzados”, apuntó.

“Además, estamos en el centro de Villa María, en la principal manzana de la ciudad, eso era así hace 50 años y lo sigue siendo ahora. La gente viene a comprar en esta manzana, que es el centro neurálgico de la ciudad”, consideró Ronco.

“Por otra parte, con esta unificación se logran achicar los gastos fijos, porque si hay tres locales de venta al público todo se multiplica por tres, desde lo que se necesita hasta lo que se tiene para funcionar. En cambio, en un solo lugar bajan considerablemente los gastos fijos, además se controlan mejor. Es beneficioso por todos lados, cualquier comerciante que logre concentrar todo en un solo lugar amplio y cómodo, le sirve”, afirmó.

“En tantos años de Marvills hemos abierto y cerrado muchos negocios, ahí nos dimos cuenta que no es rentable dispersarse porque debilita en todo sentido. También beneficia trabajar todos juntos, sino, antes uno estaba en un negocio y el resto de la familia en otro. Que la familia trabaje junta y no se disperse, es más productivo, porque empujan todos para el mismo lado”, indicó.

“El nuevo espacio se inauguró el 1 de septiembre, con el inicio de la temporada primavera-verano, y la recepción de la gente fue espectacular, ya lo estaban esperando porque habíamos informado dos meses antes a los clientes que íbamos a funcionar en un mismo lugar”.

De generación en generación

Marvills Jeans tiene 43 años, nació el 26 de mayo de 1978, es una empresa familiar que iniciaron Héctor junto a su hermana y su madre, a la que luego se sumó su esposa Elba y, más tarde, su hijo Maximiliano.

“Creo que mi hijo va a seguir este negocio con mucho ahínco, y vamos a tratar de que nuestro nieto de 5 años, Santino, siga cuando tenga la edad suficiente, para que las generaciones mantengan este negocio exitoso y no se corte”, manifestó.

“Es una trayectoria hermosa, hemos pasado y sobrevivido todas las políticas de todos los colores y signos. Sobrevivir durante 43 años no lo logra cualquiera”, reflexionó.

“Estamos muy contentos por lo que se ha logrado, que es mucho por los tiempos que transcurren. Pasamos un año y medio de pandemia, con meses de cierre y malas ventas, fue bravísimo el año 2020 para sobrevivir y salir a flote. Aún con ese año malo, y sin salir totalmente de la pandemia, se da esta expansión. Agradecemos a nuestros proveedores que nos acompañaron, y también al caudal de muy buenos clientes que tenemos de Villa María, Villa Nueva y la región”, manifestó Ronco, quien para finalizar confesó que están muy contentos de vivir en Villa María, “porque es una ciudad diferente”, y “espectacular en todos los sentidos”.