Adiuvim y algo más que un festejo

La Asociación de Docentes e Investigadores de la Universidad Nacional de Villa María (Adiuvim), desarrollará el martes próximo, desde las 15.30,  una serie de actividades para celebrar los 20 años de su creación, que se cumplieron en  diciembre último. El gremio que encabeza el docente e investigador  Nahum Mirad comenzará por reconocer a personas que integraron las comisiones directivas anteriores y al cuerpo de veedores gremiales ante concursos docentes. También habrá palabras de invitados e invitadas especiales, además de música interpretada por docentes de la propia universidad.

En la misma jornada se llevarán adelante dos asambleas: una ordinaria, donde se tratarán balances y memorias, y otra extraordinaria, donde se pone a consideración la modificación del estatuto social. Y El Diario conversó con el secretario general para analizar la situación de la organización y de sus afiliados.

-¿Cómo afectó a la docencia universitaria la pandemia por COVID-19?

-Los trabajadores y trabajadoras docentes de las universidades, como el resto de la sociedad, tuvimos el enorme desafío de adaptar nuestra actividad (que incluye la investigación y la extensión, además de la docencia) a las restricciones en la presencialidad que nos impuso la pandemia de COVID-19. En nuestra UNVM, en el marco de la paritaria local, casi al comienzo de las restricciones, se definió el carácter de excepcionalidad de tal situación, lo que posibilitó avanzar en el dictado de clases de manera virtual, haciendo uso de diferentes tecnologías. Esto implicó un enorme esfuerzo para los y las docentes, además de una readecuación de los programas de estudios y una instancia de formación en nuevas tecnologías. Aun en esas circunstancias, que se extendieron por casi dos años, gracias a un esfuerzo enorme de quienes ejercen la docencia, al igual que el resto de la comunidad universitaria, se completaron buena parte de los objetivos académicos e incluso se llevaron adelante concursos docentes, donde se consolidaron cargos.

-¿Cómo sobrellevaron la situación los docentes?

-En el proceso no estuvieron ausentes la ansiedad ante la incertidumbre, las dificultades para acceder a la tecnología y la conectividad, adaptación a las necesidades y posibilidades de alumnos y alumnas, etcétera. Desde el gremio acompañamos con monitoreo permanente de esas prácticas (plasmado en un informe), capacitación específica, multiplicando los canales de comunicación, logrando un bono especial por uso tecnológico y gestionando una certificación específica por ese esfuerzo pedagógico. A pesar de la situación, la carrera docente, uno de los logros más importante de nuestra universidad en cuanto a la regularización y consolidación de los puestos de trabajo docentes, se mantuvo vigente en la medida de las posibilidades durante la pandemia, con numerosos concursos, instancias de formación, etcétera.

-¿Deja algo positivo la pandemia?

-La pandemia a la vez que complicó nuestra actividad nos posibilitó adaptar y adoptar una diversidad tecnológica que pasan a ser parte de los recursos pedagógicos y también administrativos de un sistema vivo y complejo, como es una universidad. La forma de llevar adelante la docencia cambió con la pandemia y esos cambios aún están decantando; el desafío es aprovecharlos con sabiduría, en el marco de una educación pública, abierta y gratuita, a la vez que comprender y regular las nuevas relaciones laborales.

-¿Cómo está la situación de los y las docentes universitarios?

-La situación de los y las docentes universitarios no escapa a las generalidades del conjunto de trabajadores de nuestro país: la inflación diluye en el costo de la vida, lo que la paritaria logra en las mesas de negociaciones. Técnicamente, durante el macrismo perdimos más del 20% de nuestra capacidad salarial, con obras sociales y la ciencia desfinanciadas, universidades sin recursos, etcétera. Tras el cambio de gobierno comenzamos a alcanzar la inflación, pero a destiempo. Con incrementos de salarios que llegan luego de los aumentos de precios. Esto sin recuperar lo perdido antes.  La acción de la especulación por el precio de los alimentos define con más fuerza la paritaria social que la propia paritaria salarial. Los salarios se erosionan drásticamente. Por ejemplo, el adelanto de cuotas de incrementos salariales posibilitan pensar en un incremento total del salario docente del 70% para este año. Incremento que se da a saltos y por etapas, con precios que aumentan casi diariamente. La especulación como forma de desestabilizar a un gobierno requiere tanto la acción decidida del mismo como el fortalecimiento de la organización popular.

-¿Adiuvim participa de la articulación con otros gremios y organizaciones?

-Como gremio docente universitario somos parte de la Federación de Docentes de las Universidades (Fedun), por su intermedio a su vez integramos la Confederación General del Trabajo (CGT). A nivel local también formamos parte de la mesa regional de la CGT. Al margen de la articulación federativa, avanzamos en la construcción de una agenda con gremios docentes de las universidades nacionales de Córdoba (Adiuc/Córdoba y AGD/RIV) y a su vez con gremios docentes en general de la provincia. Es muy importante para nosotros, también, el vínculo con Apuvim -el gremio nodocente de la UNVM-. A nivel regional nos integramos con otros gremios, asociaciones mutuales y cooperativas y otras organizaciones donde nos apoyamos a los fines de la acción social de nuestro gremio. Por ejemplo, acabamos de firmar un convenio con AMMA para el acceso a proveedurías en Villa María, tenemos acuerdos con el Sindicato de la Madera de Villa del Rosario, el Jockey Club en Villa María y el Círculo de Suboficiales de la Fuerza Aérea de Córdoba para uso de piletas, hotelería, campings... Con varias organizaciones participamos de la mesa de la soberanía alimentaria de Villa María, interviniendo en el operativo de frutas y verduras, yerba, etcétera. Nuestra cuenta está en el Banco Credicoop, banco cooperativo. Esto entre otras numerosas articulaciones. De esta manera, nuestra acción va en el sentido de fortalecer este entramado de vínculos con organizaciones comunitarias.  Creemos que la organización de la comunidad, con su mayor capacidad de contención social, debe adquirir mayores niveles de participación y -en definitiva- de poder de acción como uno de los factores ordenadores de la situación política y económica en favor de nuestro pueblo.

-¿Cómo es la relación con la gestión de la UNVM?

-La gestión/conducción de la universidad es ejercida por pares y en esa generalidad siempre hay un proyecto compartido: queremos una universidad afianzada en sus principios de apertura, libertad y gratuidad; en el caso de la UNVM muy vinculada a su región y a la comunidad; una universidad comprometida con sus tiempos y los desafíos de los mismos; una universidad que garantice los derechos laborales, y la estabilidad entre ellos, a quienes nos desempeñamos en ella a la vez que avancemos en perfeccionar conocimientos y habilidades para ofrecer lo mejor de nosotros/as a la Educación Pública.

En ese marco común miramos de diferentes lugares entre el gremio y la gestión. En ese sentido,  hay grandes acuerdos de colaboración, a la vez que discusiones propias de los puntos de vista de cada espacio, que se dirimen en la mesa paritaria local. Allí se revisan condiciones laborales de los y las docentes; cuestiones particulares de nuestra universidad, por ejemplo, el aporte por movilidad -uno de los pocos casos que existen en el país-; avances y formas de instrumentación de la carrera docente, etc.

-En la Asamblea se renovará el estatuto gremial ¿Qué cambios se introducen?

-El Estatuto nuevo prevé una serie de cambios que -entendemos- abren al gremio a una mayor participación, a más espacios de encuentro, de diálogo y de compromiso. Por ejemplo: se amplían las atribuciones de los delegados/as; se asegura la participación de las minorías en la conducción y el control interno del gremio; se incorporan docentes jubilados/as a la vida gremial; trabajadores con diferentes modalidades de vínculo y contratación pueden afiliarse; se crean nuevas secretarías, se garantiza la perspectiva de género y respetamos la representación femenina en la conformación de todos los cuerpos colegiados de nuestra organización, entre otras modificaciones. Lo fundamental es que entendemos que la participación es el camino de quienes trabajamos para modelar las relaciones laborales con base en el  principio de Justicia Social. Esa participación tiene diferentes formas y momentos (va desde la acción social, la acción política, la articulación institucional hasta las diferentes maneras de llevar adelante las reivindicaciones gremiales). Desplegarlas en su conjunto fortalece la capacidad de la organización gremial de incidir en los temas centrales para los trabajadores y trabajadoras.

-¿Este año también se prevé un cambio en la conducción gremial?

En octubre de este 2022 la gestión actual de Adiuvim cumple su ciclo y el gremio convocará a elecciones con una particularidad. Se convocarán tanto las elecciones a delegados/as como a la Comisión Directiva. Las mismas están previstas para fines de septiembre y los primeros días de octubre. Es una instancia de reafirmación de la democracia gremial, donde para el primer caso (delegados/as) participan más de mil docentes de nuestra UNVM, en el segundo caso participan afiliados y afiliadas al gremio. La conformación de listas, el proceso electoral, la presentación y difusión de propuestas es un momento crucial y a la vez movilizadores de la vida de una organización gremial. Junto con las asambleas y las reuniones de cuerpos representativos de delegados/as, las elecciones son momentos revitalizantes de un proyecto colectivo como es el gremial. Desde nuestra lista “Celeste y Blanca” aspiramos a ser parte de la conducción en la próxima etapa, apoyando a delegados y delegadas a la vez que proponiendo un conjunto de compañeros y compañeras para las comisiones directivas y revisoras de cuenta. Creemos que el gremio tiene mucho por crecer, que es una organización que cuanta más fuerza tenga podrá contribuir a una mejor UNVM, porque creemos que la UNVM es su comunidad donde los trabajadores y trabajadoras cumplen un rol determinante.