Creó una app para ir a misa en todo el mundo

Pablo Licheri (52) nació en la ciudad y vivió en ella hasta los 13 años, cuando se fue con sus papás a vivir a Buenos Aires. Estudió en la Escuela Juan Bautista Alberdi y en el  Instituto Rivadavia, antes de mudarse a CABA, donde finalmente, tras terminar el secundario, estudió  la Licenciatura en Sistemas.

Este hombre es una persona muy católica, está casado y tiene 7 hijos. Su carrera profesional siempre estuvo ligada a cuestiones relacionas directamente a su profesión, como él mismo lo cuenta.

“Tras graduarme trabajé en distintos bancos. En el último que trabajé fue en ICBC, en Puerto Madero, como responsable de desarrollo de software, por lo que siempre estuve ligado a la creación de programas informáticos y aplicaciones”, señaló.

Nace una idea

Licheri contó que tras asistir a un retiro espiritual, allá entre 2013 y 2014, y tras escuchar la prédica del sacerdote sobre la importancia de la Santa Misa “y de lo fundamental que es para todos asistir, bueno, pues se me ocurrió desarrollar la aplicación ‘Horarios de Misa’”.

Explicó que en un comienzo trabajó por las mañanas de los domingos, su día de descanso, “porque mi trabajo y mi familia me demandan mucho tiempo”.

“Venía buscando una manera de ayudar a los demás usando mis conocimientos informáticos, uniéndolo con los temas de la fe, que mucha gente quiere hacer, pero no sabe cómo”, dijo.

Originalmente, su idea partió de hacer una página web “que ofreciera la Santa Misa las 24 horas, transmitiendo desde distintas iglesias. Hice parte del diseño y del contenido, hasta que se la comenté a un amigo y me dijo que me iba a ser muy complicado, por los temas de logística que iba a tener, porque tenía que tener cámaras en iglesias en muchas partes del mundo con diferentes husos horarios, y me instó a hacer algo más sencillo y  hacer un app con los horarios de misa”.

“Cuando me lo dijo me pareció genial y sencillo de hacer. Empecé con las iglesias de Buenos Aires, entre 250 y 300. Las iba cargando a mano los fines de semana, muy temprano, antes de que se me despierten los chicos. Y nada, la app comenzó a  funcionar muy bien ahí y, de a poco, la gente se la fue recomendando a otras y a otros y los mismos usuarios comenzaron a viajar. Y como la aplicación permite a cualquiera de ellos cargar la información de las iglesias, fue creciendo, y no para de crecer. Y las actualizaciones se hacen casi de inmediato”, explicó.

En todo el mundo

Hoy, “Horarios de misa” tiene 1.600.000 usuarios, en 202 países del mundo. Está presente, obviamente, en todo el país, y varias regiones y lugares de todas esas naciones del planeta.

“Hay usuarios que, más allá de usar la aplicación para saber dónde y a qué hora ir a misa en el lugar donde estén,  son muy activos y están cargando información sobre nuevas iglesias todo el tiempo, y algunos han sumado a cientos de ellas”.

Explicó que la aplicación tiene mucho éxito porque es orgánica y, como dijo, se alimenta de la información que los mismos usuarios le van cargando, “lo cual conforma un círculo virtuoso maravilloso”.

“Hay información de iglesias en los lugares más turísticos o de lugares de trabajo, y donde sea. Por eso, puedo afirmar que,  si usas al app, prácticamente en cualquier lugar del mundo al que viajes, y querés ir a misa, vas a encontrar una, seguro. Vos, cuando abrís la aplicación, enseguida la misma te detecta y dónde está la iglesia más cercana y sus horarios”, indicó.

Detalló que está hecha para que cualquier persona la pueda usar “y funciona en los celulares nuevos y antiguos, sin ningún problema.?Obviamente, la app es totalmente gratuita, sin publicidad, y junto a mi mujer bancamos el costo que tiene para que funcione, aunque también existe la posibilidad de donar para darnos una mano, pero esto es opcional, porque no es el objetivo nuestro, lo hacemos simplemente como un apostolado, para ayudar”.

Para bajar la aplicación se puede acceder a la página web horariosdemisa.com, o directamente desde la App Store o el sitio de Android.

Reconocimientos

Contó que desde Cáritas Argentina ya le pidieron la base de datos de todas las iglesias del país para organizar una campaña de ayuda: “Ni ellos ni la Conferencia Episcopal tenían la información que yo tenía con la app y les ayudó mucho”.

“Luego estuve en Roma, porque fui al Vaticano a visitar a uno de mis hijos, Tomás, que está estudiando para ser sacerdote.?Ahí hice un poquito de contactos y me terminaron entrevistando en el Observatorio Romano (diario), en Radio Vaticana, en Vatican News y Rome Reports, por ejemplo”, contó.

Además,  destacó que también fue recibido por el vocero del papa, “y me regalaron el rosario que le regala a todos los visitantes. Francisco no me pudo recibir esos días porque justo estaba la Cumbre del G7, así que me quedé un poquito con las ganas”.

Y de verdad, Pablo se merecía ser recibido por el papa, ya que su creación da una gran visibilidad de la iglesia a todos los fieles católicos alrededor del mundo, ayudando en la tarea evangelizadora. Lo que seguro es un orgullo para todos los católicos villamarienses.

“Hoy vivimos en Estados Unidos, en una ciudad de Florida que se llama Ave María.?Imaginate, nací en Villa María, viví en Santa María de los Buenos Aires y ahora acá, por lo que la virgen siempre me cuida.?Pero acá, en la Villa, tengo a mis tíos, primos y a mi madre, Lidia. En la Catedral me bautizaron e hice la Primera Comunión”, finalizó.