Semana marcada y remarcada por los precios

lunes, 25 de octubre de 2021 · 09:25

Estar hablando en pleno siglo XXI de los mismos problemas de hace 50 años habla del drama estructural que tenemos en el país y de una historia sin fin, que se repite y repite. El cuento de la buena pipa. 
¿Querés que te cuente el cuento de la buena pipa? Inflación, precios desbordados, grupos económicos manejando los hilos, el dólar menospreciando al peso, la política intentando el arte de lo posible, la sociedad padeciendo esa batalla entre los que no tienen límites y los que no tienen oportunidades.
El cuento de la buena pipa. Otra vez, sopa, diría Mafalda. 
La semana fue “marcada” o remarcada por los precios. La mesa familiar, el alimento de los argentinos y argentinas manejados por los mismos de siempre. Los grandes protagonistas del alabado Dios Mercado.
Pequeñas empresas, almacenes de barrio, consumidores, a merced de un grupo minúsculo de marcas líderes, poco y nada comprometidas con el bienestar general.
¿Por qué los consumidores, en general, no se rebelan? Es una incógnita de años. La política de precios subiendo por ascensor y salarios trepando por la escalera, nos hizo mucho daño. Generalmente se culpó a los gobiernos y muy poco a los dueños de las decisiones en la materia.
En 1973, el entonces ministro de Economía, José Luis Gelbard, promovió un acuerdo entre los diversos sectores para controlar la inflación que azotaba al país. La clave era el congelamiento de precios. Logró un pacto que controló la inflación, bajó la desocupación y apuntaba a la recuperación económica.
Un pacto social. No tuvo un buen final. Como todos los acuerdos de nuestra triste historia.
Gelbard logró mantener un equilibrio en el sistema distributivo, hasta que murió Juan Domingo Perón en julio de 1974.
Luego, todo se desmadró.
Pasaron casi 50 años y seguimos en la misma ruta. Control de precios, enojo de algunas empresas, amenazas de una ley que nunca, o en contadas oportunidades, llegó a aplicarse.

Ley de abastecimiento
La Ley 20.680, sancionada el 20 de junio de 1974, se refiere “a la compraventa, permuta y locación de cosas muebles, obras y servicios -sus materias primas directas o indirectas y sus insumos- lo mismo que a las prestaciones -cualquiera fuere su naturaleza, contrato o relación jurídica que las hubiere originado, de carácter gratuito u oneroso, habitual u ocasional- que se destinen a la producción, construcción, procesamiento, comercialización, sanidad, alimentación, vestimenta, higiene, vivienda, deporte, cultura, transporte y logística, esparcimiento, así como cualquier otro bien mueble o servicio que satisfaga -directamente o indirectamente- necesidades básicas o esenciales orientadas al bienestar general de la población”.
En 2014 se modificó para crear un Observatorio de Precios y eliminar las penas de prisión que contemplaba la norma original. 
En dos oportunidades se aplicó. En 2011 por una suba en los combustibles y en 2013 por un incremento en el precio del trigo.
La norma prevé multas económicas de hasta 10 millones de pesos, clausura del establecimiento por 90 días, inhabilitación para el acceso al mercado de créditos, inhabilitación especial de cinco años para ejercer el comercio y la función pública, suspensión de cinco años en los registros de proveedores del Estado, pérdida de concesiones y privilegios en regímenes impositivos, entre otras cosas.

Los controles
“En un contexto de inflación generalizada a nivel global todos los países regulan la canasta básica alimentaria”, expresó el secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti.
La canasta con precios fijos y congelados hasta el 7 de enero consta de 1.432 productos de consumo masivo. El listado de los artículos puede consultarse en la página web: argentina.gob.ar /precios cuidados.
En la provincia de Buenos Aires los intendentes del Frente de Todos iniciaron los controles en los distintos establecimientos para verificar el cumplimiento de la resolución.
En Córdoba, se estarían organizando algunos municipios para ejercer la tarea de contralor. 
“Debemos lograr un acuerdo social entre el Estado, el sector empresarial y las organizaciones sindicales. El rol del Estado es ordenar, plantear un escenario propicio para los negocios y la competitividad, pero los trabajadores necesitan acceder a una amplia canasta básica.
Queremos que nadie se frustre teniendo que dejar un producto en la góndola porque no lo puede pagar. No estamos atentando contra los planes de negocios de las empresas: queremos que también les vaya bien, y que ganen aumentando las cantidades vendidas y no los precios”, escribió Feletti ayer en su cuenta de Twitter.
La mayoría de las empresas convocadas aceptó el acuerdo de precios. Sin embargo, dos firmas líderes en el tema alimenticio pusieron sus objeciones.
Esta semana será clave, ya que el Gobierno aclaró que aplicará la Ley de Abastecimiento a quienes no cumplan con los precios fijados o dejen sin productos las góndolas.

La deuda con el FMI
Por su lado, el ministro de Economía, Martín Guzmán, apuntó a la deuda dejada por el gobierno de Mauricio Macri como “el principal problema que tiene el país”.
En el marco de una disertación, en el CCK organizada por la revista Crisis, remarcó que “la Argentina quedó rehén de las expectativas predominantes del sistema financiero internacional, una total irresponsabilidad. La única lluvia que hubo fue de capitales especulativos".
El titular de la cartera económica se refirió al poder de lobby que existe aclarando que el país no entrará en ese juego y luchará por un acuerdo sostenible que no afecte al pueblo argentino.
El Gobierno, a pocos días de las elecciones, enfrenta fuertes presiones en el mercado financiero y se amplía la brecha entre el dólar oficial y el blue. No habrá devaluación, insistió Guzmán.
"Hay muchos diciendo que se viene una devaluación, el año pasado decían lo mismo y no pasó. Ahora decimos lo mismo, no va a pasar. El Banco Central viene acumulando reservas y las exportaciones vienen creciendo. Reestructuramos deuda con acreedores privados, no hay ningún pago hasta junio de 2024. ¿Cuál es el problema de la balanza de pagos? Es el Fondo Monetario Internacional, que está en la Argentina porque lo trajo Macri", precisó.
La economía sigue siendo una de las principales preocupaciones del pueblo que en su gran mayoría no llega a cubrir las necesidades básicas de una familia.
Si bien hay señales de reactivación en el plano productivo, los resultados todavía no llegaron a los hogares.
El pueblo sigue esperando.

En campaña
“Tenemos muchas expectativas de sumar más votos el 14 de noviembre, porque el nivel de participación fue muy bajo, y ya nos ha pasado en elecciones anteriores que personas que no votaron en las PASO, piensan más su voto y hemos crecido. Además, al haber sido una PASO en la que varios partidos tuvieron interna, quedaron personas desilusionadas que no están dispuestas a votar a quienes quedaron en las listas, creemos que también de esos grupos van a venir votos”. María Rosa Marcone, legisladora de Encuentro Vecinal Córdoba

“El país se encuentra sin estabilidad económica, cerrado al mundo, poniendo límites a exportación, con graves dificultades para importar… Es un gobierno en el que se pelean entre ellos… No hay piloto, no hay rumbo”. Gustavo Santos, candidato a diputado de Juntos por el Cambio

“Reiteramos nuestro apoyo al Gobierno de la provincia de Córdoba, y en su figura al gobernador Juan Schiaretti, como desde siempre lo hemos hecho, que es quien viene desarrollando una política y un modelo de gestión del cual nos sentimos parte y coincidimos integralmente”. Comunicado del Partido Villamariense
 

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