“Siento que es el momento ideal para ofrecerle a la ciudad toda mi energía”

Nació el 15 de septiembre de 1973. Comerciante, casado, dos hijos. Comenzó su militancia política en 1995.  En 2003 llegó a una banca del Concejo Deliberante y fue por esos años en que fijó su mira en Mauricio Macri. En 2007 fue candidato a intendente por Juntos por Villa María. No le fue bien, la elección se polarizó entre tres fuerzas y volvió al llano. En 2011 fue concejal del Partido Villamariense. En 2015 asumió como legislador provincial en el marco de la alianza Juntos por Córdoba y fue reelecto. Hoy pone todo su esfuerzo en llegar al Sillón de Viñas para poder gestionar la ciudad que viene “soñando” desde hace años. Es el candidato a intendente de Juntos por el Cambio.

-Hace desde 1995 que estás en la militancia política, tenés una carrera de años en el Legislativo, ¿qué significa en esta etapa de tu vida ser candidato a intendente?

-Significa poder volcar toda esa experiencia y mis energías en poder darle todo a mi ciudad. En un proceso donde siento una gran contradicción. A medida que nos aproximamos a la posibilidad de ganar una elección y ser Gobierno está la mirada de la sociedad diciendo: “este es político, son todos iguales, son todos chorros”. Y no lo somos.

En todo caso todo, todo este cúmulo de años tiene que ver con encontrar el momento de la experiencia y la capacidad para tener una gestión como la que soñamos algún día.

Una oportunidad para solo cuatro años.  Esa es la contradicción que mientras se cuestiona la política, se rechaza a los políticos, se ve esa dualidad. Y en realidad no somos iguales, no somos todos chorros, entonces confío en que la sociedad nos dé la posibilidad de ganar y a partir de ahí tener una gestión distinta.

-Tu sueño siempre fue ser intendente de la ciudad ¿Creés que lo podés cumplir?

¿Qué expectativa tenés?

-Sí, no solo es un sueño de creer que podés ganar una elección, sino todo lo que se puede hacer. Mis energías, todas mis ganas, mi dedicación, tienen que ver con lo que podamos dar en cuatro años como mejora de la ciudadanía. Yo me preparé de verdad.

Todo este cúmulo de años cedí, pensé, reflexioné, me equivoqué, aprendí y siento que es el momento ideal para poder ofrecerle a la ciudad la energía, que creo  que este Gobierno ya perdió en 24 años.

El problema de este Gobierno es que está agotado el proceso de energía que trajo. La nuestra está intacta, tenemos ganas de resolver cuestiones, de dar vuelta realidades, de poder potenciar una ciudad que vemos muy estancada.

En lo personal estoy fuerte, decidido, y percibo en la gente que es el momento. En todo caso, que el único momento oportuno que tenemos para ganar una elección y gestionar de esa manera.

-En los sueños que tenés, en la ciudad que pensás, dijiste que tenés ejes. ¿Cuáles son los ejes principales?

-Son cuatro cuestiones de gestión: Construir la matriz productiva potente que tiene que ser Villa María. Que el intendente y su equipo esté decidido a empujar una matriz productiva que genere laburo, oportunidad y condiciones.

Reconstruir la cuestión social, vivimos en una ciudad muy dispar, con realidades muy distintas, el Gobierno tiene que resolver la vida social de las personas. Podemos hablar días de eso.

Y después, dos aspectos reales: mejorar la calidad de los servicios municipales y tener un municipio eficiente, con una administración moderna y fácil.

Hay que reducir impuestos, una gestión en que la matriz productiva que soñamos tiene que ver con generar laburo y generar mejores condiciones al vecino.

Uno siente que vivimos en una ciudad que es pujante, que tiene ejes que tenemos que cuidar muchísimo, como es la Universidad, o el Parque Industrial. Que ese desarrollo es tan distante porque la gente está quedando en el medio, para bien y para mal. Si no nos ponemos a trabajar sobre ejes de estas características, brindar seguridad, y ofrecer garantías desde la oportunidad que necesita el vecino, estamos liquidados.

Esa es nuestra energía.

-En tu recorrida por los barrios, ¿sentís que la gente está enojada?

-Muy enojada, yo no digo que recorro los barrios como concepto de título político. Lo hacemos, Nancy, interpretando a cada vecino en cada rincón de la ciudad, interpretando sus realidades, sus necesidades, pero tenemos una ciudad muy dispar, de verdad, socialmente hablando, cada vez es más profunda esa disparidad.

La gente, en general, está decepcionada de la política y de los políticos. Rechaza cualquier intento mediocre de la política. Está cansada, está harta, porque no ha encontrado la solución, porque no le han solucionado un norte para facilitarle la vida.

Y esto lo hablo desde alguien que emprende y que tiene obstáculos para poder emprender, construir o invertir hasta el tipo que no tiene oportunidades.

Hay personas en nuestra ciudad que nacen, crecen, se desarrollan y no tienen oportunidades y estamos en una de las ciudades más ricas de la provincia de Córdoba y del país.

Entonces, como es posible que el poder, que la política, que los tipos que deben gobernar no se ocupen de esto.

-¿Por qué creés que no se ocuparon?, porque esto viene de muchos, muchísimos años, pasaron varios gobiernos de distinto signo político…

-Es el cúmulo de años de decisiones erróneas, de malas medidas. Por supuesto que no todo es malo, Nancy. Hay cosas y hubo gestiones que han marcado hitos. Ahora, no es suficiente.  Creo que no se ha acertado en las políticas públicas en general. Si uno entra en el debate político partidario no es por ahí. Si uno ve los resultados administrativos de la evolución de las sociedades, algo se ha hecho mal.

Tenemos cada vez menos ricos que concentran más recursos y cada vez más pobres y esa famosa clase media que hoy le cuesta horrores, no tiene respuestas del poder.

Es culpa de todos, en todo caso, de todos los gobiernos que han transitado.

-¿Te sorprendió el resultado de las PASO?

-No, no me sorprendió. Todos veíamos tres tercios, de pronto vi materializado ese voto enojo en la figura de un personaje nuevo para la Argentina, pero que no sé si es definitivo.

Me parece que la sociedad castigó, pero creo que está en el fiel proceso de evaluar su voto para el 22 de octubre.

No me sorprende, sí me preocupa. Pero, en ese contexto, creo que la gente está buscando opciones que en el fondo nadie le solucionó, ni el peronismo, ni el radicalismo, ni el kirchnerismo, ni el macrismo.

-¿La elección local, la ves despegada de la nacional?

-Sí, yo interpreto que el vecino villamariense ha votado de un modo en la provincial, en lo nacional y también votar a su intendente en un momento de reflexión separada.

Percibo que al intendente lo va a votar desde un modo diferente y eso nos permite discutir temas, no va a votar sábanas y eso es bueno.

Tenemos, como villamarienses, un valor adicional que es poder votar al intendente en función de lo que sentimos, de lo que creemos, porque lo tenemos cerca.

-¿Cómo lograste el armado de Juntos por el Cambio?

-Debo rescatar que fue un buen logro poder entendernos después de muchos años de fracasos. Poder armar un frente político donde estén todos los partidos de Juntos por el Cambio. Debo rescatar la madurez en las autoridades partidarias, incluso en los candidatos bien posicionados que traía Juntos por el cambio. Debo rescatar a Felipe Botta, a Giselle Machicado, hubo mucha madurez porque hay un propósito que se entendió: que la unidad nos permite lograr una victoria electoral.

Eso tal vez no se interpretó en otras elecciones, esta vez sí.

Y estamos muy confiados que esta unidad nos da una posibilidad mayor de cara a la gente, no solo a nuestros votos, sino que nos ven como un equipo más sólido, más integral, con diversidad de miradas.

También siento que no es suficiente eso, lo importante es que la sociedad interprete lo que queremos hacer.

-¿Intentaron acercarse al sector del radicalismo que armó su propia alianza por fuera de Juntos por el Cambio?

-Ningún radicalismo va por fuera, sí hay actores que se unieron con partidos distintos a Juntos por el Cambio, afines al peronismo provincial y que eligieron no dialogar.

Esta es la realidad.

Me parece que el esfuerzo de haber armado Juntos por el Cambio era lograr la identidad de todos los partidos, de toda la institucionalidad y toda la unanimidad.

Porque el radicalismo local logró unanimidad orgánica a la hora de hacer Juntos por el Cambio y poder elegirnos para ser el candidato del frente, el resto lo dirá la historia.

-¿Qué rol juegan los jóvenes en el proyecto de ustedes?

-Mucho. No solo porque sintetizamos, en una lista, muchos de los jóvenes que la integran tiene que ver con darle un espacio de desarrollo, sino que es el sector más reticente a la política de hoy.

En otras épocas se veía que los jóvenes se identificaban con un partido, eso hoy no ocurre. Eso también tiene que ver con el malestar generalizado con la política.

Pero también desde la gestión hay que darle el lugar que busquen. Las gestiones tienen que darle espacio de desarrollo, porque, además, hay allí las nuevas capacidades, los nuevos pensamientos, los nuevos formatos, una mentalidad increíble que, si bien se muestra contrario a las construcciones de los políticos, deben encontrar en las gestiones su lugar de desarrollo.

-Si llegaras a la Intendencia, cómo abordarías la relación con las demás fuerzas

-Soy una persona de diálogo. He decidido tener cuatro decisiones el primer día. Dos que tienen que ver con cuestiones políticas. La primera es llamar a todos los candidatos a la Intendencia y a todos los exintendentes para sentarnos en una mesa y que sean parte de las soluciones que la sociedad necesita.

Otra medida son las cuestiones administrativas, mandar al Concejo un proyecto de reducción de impuestos, facilitación de tasas, un programa que vamos a presentar esta semana con el próximo secretario de Economía.

Después, tomar decisiones de fondo. Yo sueño que voy a firmar un compromiso el próximo 10 de diciembre. El compromiso que no voy a ser reelecto. Solo voy a ser intendente por cuatro años y sin plan B.

Quiero dar lo mejor de mí en esos cuatro años, es lo que he soñado para mi ciudad.

-¿Vas a despedir empleados municipales?

-No, a ninguno. Venimos a dar lo mejor, no venimos a romper nada. Ahora, los funcionarios de la actual gestión están todos afuera, no va a quedar ninguno.

-¿Tenés pensado un posible gabinete?

-Hoy (por el sábado) anunciamos que el jefe de Gabinete va a ser Juan Zazzetti. Durante la semana vamos a anunciar que el secretario de Economía va a ser Miguel Maceda y en dos semanas más voy a anunciar el secretario de Obras Públicas, que va a ser el arquitecto Primo.

Y me voy a parar ahí porque me vas a quemar todos los anuncios. (Risas).

-¿Y en tu propuesta se incluyen cambios en el organigrama municipal?

Sí, completo. Vamos a reducir la estructura jurídica y eso no afecta a ningún empleado. Vamos a gestionar con 42 funcionarios, no con 200. Estamos hablando de las jerarquías.

La reducción tiene que ver con hacer eficiente el Estado.

-¿Tu familia te respalda?

-Sí, gracias a Dios, tengo una mujer que vale oro y dos chicos. Además de mis padres, mis hermanos, mis suegros. Jakie me ha acompañado en todo este proceso y rescato su fortaleza, para mí es muy valiosa su ayuda. Parte de la tranquilidad que tengo y la fortaleza que tengo tiene que ver con mi familia, una familia bien formada, donde los valores están intactos, lo que tengo en mente está claro. Y eso me permite poder pensar en esto y poder dar lo mejor como ser humano.