La pandemia y la “teoría del derrame”

Sí algo puso en acción el Covid-19 es la “teoría del derrame”. Para los que propician medidas neoliberales, el sistema capitalista en su trapicheo no excluye a nadie del banquete pantagruélico: las migas caerán para todos.

En los tiempos de pandemia aquella teoría alcanza su controvertida transparencia. No hay más que ver el viaje en avión y cruceros del SARS-CoV-2, su recorrido por lugares encantadores hasta llegar a lugares a los que el agua no llega ni por goteo.

Nunca fue tan categórica la igualdad social que el virus logró.

¿Será por eso que hoy vociferan los “anticuarentena” desde lugares más confortables al tiempo que reclaman “libertad”? Los focos de contagio hacen zoom en las barriadas del AMBA, que comprende la capital del país y los primeros cordones urbanísticos del conurbano bonaerense.

 No se pone en duda las consecuencias devastadoras que tiene la pandemia para la economía nacional. Pero en todo el planeta la pérdida de puestos de trabajo, la caída de las cadenas de producción, la crisis del precio de las materias primas que incluye al petróleo, son imbatibles. Y también las miles y miles de muertes detrás de las cuáles se esconden historias tan desgarradoras como la lluvia de napalm.

Hoy alguien muy atinadamente, y en un acto que compensa las desaforadas palabras de gente que se manifestó en la principal plaza de Buenos Aires, dijo que aquellos que descreen del Covid-19 tendrían que resignar de un respirador en caso de necesitarlo.

Casi todos ellos son jóvenes, casi todos menores de 50 años y, en caso de faltar respiradores y colapsar nuestro sistema de salud, nadie tendrá memoria y falta de moral para hacerles cumplir su resignación.

Ana Gómez
DNI 10.857.210