Inconsistencias en el horizonte

Para saber dónde estamos parados en materia económica, el licenciado Carlos Seggiaro, miembro del Directorio de Bancor y docente de la Universidad Nacional Villa María, sostiene algunos puntos de análisis sobre la inflación, las decisiones del Gobierno nacional y el movimiento del mercado agropecuario, entre otros.

Seggiaro indica que dentro de las decisiones del Gobierno hay “posibilidad de que se generen diversas inconsistencias a lo largo de los próximos meses”.

En ese sentido, apunta que la inflación del 29% que se plantea como meta el Gobierno es demasiado complicado para cumplir.

 “El anuncio de la pauta devaluatoria para el presente año, sobre el dólar en el mercado oficial de cambios se ubicará en torno al 25%. Si la inflación anual fuera del 29%, estaríamos en presencia de un atraso relativo, pero de un rango ciertamente menor, que no debería ser motivo de preocupación. Esto es así debido a que el actual tipo de cambio, medido en términos reales es, a nuestro juicio, aún competitivo”, explicó el profesional.

No obstante, indicó que “el problema radica en el hecho de que la meta de inflación del 29% plantea un objetivo casi heroico, de muy difícil cumplimiento”.

“Si la inflación se sitúa entre el 40% y el 50%, como suponemos, una pauta devaluatoria para todo el año en torno al 25% planteará efectivamente un atraso cambiario de cierta magnitud, sobre todo a lo largo del segundo semestre del año”, apuntó.

En ese aspecto, el licenciado afirmó que “un dólar oficial que corra por detrás del desempeño de los precios internos planteará un problema de competitividad creciente, que afectará al mercado de divisas y generará dificultades en las cadenas de valor que están orientadas a las exportaciones, a la par de que también exigirá más y más regulaciones para impedir el ingreso de importaciones”.

En caso que esto suceda, Seggiaro expresó que “los dólares marginales volverán a ampliar la brecha con el dólar oficial, generando así más incertidumbre en los mercados vinculados”.

Granos

En otro punto de su análisis sobre la realidad económica, Seggiaro remarcó que “los precios de los granos en Chicago en los últimos días mostraron un reacomodamiento a la baja”, sobre todo la soja.

“Si bien es un dato de la realidad que el clima en Sudamérica y especialmente en Brasil y Argentina dio señales positivas todo indica que el vuelco del mercado se produjo básicamente por un cambio de posición de los Fondos de Inversión, actores especulativos”, indicó el licenciado.

De todas maneras, Seggiaro afirmó que “persistirá en el mercado una importante volatilidad, aunque siempre en un marco de buenos precios”.

Más allá de esta situación, Seggiaro comentó como un punto importante que el “Gobierno, en su afán de controlar la inflación, está decidido a despegar los precios internacionales de los precios de los alimentos en el mercado interno”. Es por ello que “la creación del fideicomiso en aceites, de soja y girasol, que se acordó con los exportadores, es un instrumento que juega en esa dirección”.

De todos modos, para Seggiaro, quienes conocen el mercado sostienen que será muy difícil “instrumentar el mismo tipo de acuerdo en otros productos, como trigo y maíz, por ejemplo”.

“Esto es debido a la complejidad de las cadenas de valor involucradas, más atomizadas y difícil de controlar”, agregó.

Sin embargo, para el licenciado el punto más preocupante para controlar los precios internos sobre los alimentos socialmente más sensibles se plantea sobre carnes y lácteos.

“Son segmentos empresarios donde la estructura de costos viene presionando por encima de los precios de venta de los productos”, opinó Seggiaro, por lo que afirmó que esto “comprime los márgenes de rentabilidad hasta hacerlos incluso negativos”, como sucede en el sector lácteo.

“Un dólar oficial que corra por detrás del desempeño de los precios internos planteará un problema de competitividad”.

Creció la industria Pymes

La producción de las industrias Pymes manufactureras creció 0,3% en enero en comparación con igual período de 2020, con lo que marcó su segunda mejora consecutiva tras nueve meses de caída, según un informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).