Villanovenses detenidos por dos episodios de violencia de género

Dos irascibles vecinos de Villa Nueva fueron detenidos en horas de la noche del miércoles luego que protagonizaran sendos hechos de violencia de género, aunque uno de ellos llegó a efectuar disparos con un arma de fuego y a punto estuvo de dar muerte a un pastor evangélico que salió en defensa de una joven.

Los arrestos se produjeron casi simultáneamente, aunque en diferentes circunstancias, ya que el primero de los sujetos fue aprehendido en flagrancia y el otro se presentó espontáneamente en la Comisaría de Distrito luego de que la Policía allanara su domicilio.

Uno de los iracundos villanovenses es Rubén Antonio Ambrosio (31), quien quedó alojado en la Alcaidía de barrio San Justo, imputado como presunto autor de “homicidio en grado de tentativa, en flagrancia”.

La Unidad Departamental San Martín informó ayer que alrededor de las 22.30 del miércoles, a través de un llamado al número de emergencias 101, se tomó conocimiento que en la intersección de las calles Mitre y Florida de la vecina ciudad, había un hombre efectuando disparos al aire.

“Con la premura del caso se comisionó a personal policial que, una vez en lugar, procedió a la detención en flagrancia de una persona de sexo masculino, de 31 años, con domicilio en Villa Nueva, el cual tenía en su poder un arma de fuego tipo revólver, calibre 32 largo”, indicó la Departamental en su habitual parte de prensa.

La información oficial añade que “el detenido, momentos antes, protagonizó una acalorada discusión con su expareja, de 22 años, en la cual intervino un hombre de 36 años (pastor de una iglesia a la que asiste la joven), oportunidad en la que el aprehendido extrajo un arma de fuego y apuntó a este masculino, quien se trenzó en lucha con aquel, evitando que lo hiriera”.

La Policía precisó que, es esas circunstancias, se produjo un disparo, aunque afortunadamente ninguna persona resultó lesionada.

Por otra parte, El Diario pudo saber que Ambrosio tiene denuncias por otros hechos de violencia familiar e incluso registra dos condenas penales como consecuencia de haber amenazado de muerte con un cuchillo a su expareja y a la madre de la joven, y por haber baleado a un guardavida de Villa Nueva, a quien le ocasionó lesiones de gravedad.

De manera extraoficial, en tanto, se conoció que las víctimas del violento proceder del acusado son Brenda Micaela Asselborn y Fernando Rivero Herrera, pastor de la Iglesia Vida Nueva, quien salió en defensa de la joven al advertir que era agredida verbalmente­­­.

Un sujeto conocido

El otro villanovense detenido en la antevíspera es Diego Eduardo Arenas (41), un albañil con frondosos antecedentes, quien también quedó alojado en la Alcaidía policial de barrio San Justo, pero en su caso imputado como presunto autor de “amenazas calificadas” en perjuicio de su expareja.

Arenas se entregó en la Comisaría de Distrito Villa Nueva poco después que personal de esa dependencia realizara tres allanamientos simultáneos en otras tantas viviendas ubicadas en cortada Neuquén 1230, Neuquén esquina calle pública y Neuquén sin número, todos en barrio El Vallecito de la vecina ciudad.

Al respecto, la Departamental informó que los procedimientos se concretaron desde las 22.45 del miércoles y en el último de los domicilios allanados se procedió al secuestro de un arma de fuego, similar a un revólver, aunque se trataba de una réplica (de utilería), que obviamente no es operativa.

La Policía precisó que el operativo se llevó a cabo en relación a un hecho de “amenazas calificadas” ocurrido horas antes, denunciado por una mujer de 45 años, expareja del detenido.

Por otra parte, El Diario pudo establecer que Arenas, nacido en Villa María el 21 de junio de 1978, registra nada menos que cuatro condenas penales (una en suspenso y tres de cumplimiento efectivo), la última dictada en agosto de 2006 por hechos de violencia de género, también en perjuicio de su exconcubina.