Violento robo en barrio General Paz - Seguirán alojados en la cárcel de Villa María

Preventiva para dos ladrones por golpear y maniatar a una anciana

Se trata de Maximiliano Cuello y Darío Gaete, quienes están acusados de haber asaltado con un cuchillo a Blanca Bruno en su casa. Se les atribuye el delito de “robo calificado por uso de arma”, que tiene una pena de hasta 15 años de prisión
miércoles, 23 de noviembre de 2022 · 08:50

El fiscal René Bosio dictó ayer la prisión preventiva de dos sujetos que están acusados de haber asaltado con un cuchillo a una vecina de barrio General Paz, a quien golpearon y maniataron en horas de la siesta del domingo 30 de octubre pasado, luego de pedirle “un vaso de agua” por la ventana de su casa.

La medida procesal alcanza al cordobés Maximiliano Antonio Cuello (29) y al santafesino Darío Andrés Leonel Gaete (23), ambos domiciliados en Villa María, por el violento robo que tuvo como víctima a Blanca Bruno (89), domiciliada en Entre Ríos 173.

Los presuntos delincuentes continuarán alojados en el Establecimiento Penitenciario Nº 5 mientras se tramita la causa penal.

La prisión preventiva es una medida procesal que se aplica cuando existe un peligro cierto de que una persona acusada de un delito entorpezca la recolección de pruebas en la causa que se le atribuye, o que se dé a la fuga sin cumplir una posible condena privativa de la libertad.

Esta medida de coerción implica que el sospechoso continuará detenido mientras avanza la investigación del hecho que se le atribuye.

Cuello y Gaete están imputados como presuntos coautores de “robo calificado por uso de arma”, un delito que es castigado con prisión de cinco a 15 años, a tenor de lo establecido por el artículo 166, inciso 2º, del Código Penal de la Nación, en función del artículo 164 (ver “Qué dice la ley”).

 

Cómo fue el hecho

De acuerdo con la instrucción judicial del caso, minutos después de las 13 de aquel último domingo de octubre, Cuello y Gaete, “de común acuerdo y con fines furtivos”, se hicieron presentes en la casa de Bruno y, a través de una ventana que estaba abierta, le pidieron “un vaso de agua”.

La octogenaria, que se encontraba sentada a poco más de un metro de la ventana, se levantó, buscó un vaso, lo llenó con agua fresca y se dirigió a la puerta. Luego de abrir, le entregó el vaso a uno de los jóvenes, quienes durante unos segundos conversaron amablemente con ella sobre el intenso calor que hacía en ese momento.

En esas circunstancias, Gaete le pidió un segundo vaso con agua, esta vez para su amigo, ante lo cual la mujer se dio vuelta, volvió sobre sus pasos y se dirigió a la cocina, sin advertir que los “chicos” la estaban siguiendo.

Previamente, uno de ellos cerró la puerta con llave y luego, entre ambos, sorprendieron y abordaron a la dueña de casa en momentos que se disponía a llenar el vaso con agua por segunda vez.

 

“¡Cállese la boca!”

Cuello, quien empuñaba un cuchillo tipo Tramontina en su mano derecha, la amenazó de muerte y le advirtió: “¡Quédese quieta y cállese la boca! Queremos llevarnos el oro, la plata y nada más. Si no se queda quieta la vamos a lastimar”.

Con la situación dominada, el propio Cuello se dirigió a otros ambientes de la casa en busca de objetos de valor, mientras Gaete se quedó con Bruno en la cocina. La mujer intentó gritar, pero el asaltante hizo valer la fuerza física y le tapó la boca con la mano izquierda, mientras que con la derecha le colocó el cuchillo en la región abdominal.

Seguidamente, y siempre por la fuerza, la llevó hasta una habitación y la arrojó sobre una cama. Allí, entre los dos, le ataron las manos y le taparon la boca con una prenda de vestir de la mujer.

Cuello siguió buscando dinero y objetos de valor, mientras Gaete se quedó “custodiando” a la anciana, quien segundos después logró desatarse, se quitó la mordaza y empezó a gritar pidiendo ayuda.

Fue entonces cuando Cuello regresó al dormitorio y le dio una cachetada en la mejilla izquierda, para luego maniatarla por segunda vez, ahora sentada a una silla. Incluso utilizaron cinta aisladora negra para taparle la boca con el objetivo de que no pudiera gritar.

 

Una hora y media…

Los delincuentes estuvieron en la casa alrededor de una hora y media. Durante ese lapso revolvieron muebles y cajones, dañaron un par de cerraduras y finalmente se apoderaron de un televisor Noblex de 32 pulgadas, una filmadora JVC, una cámara de fotos Olympus, dos valijas, dos teléfonos celulares (uno de con pantalla táctil y el otro más antiguo), distintas prendas de vestir y una caja que contenía numerosas alhajas (incluidos varios relojes, medallas y cadenitas) y bijouterie.

Se fueron alrededor de las 14.40 con todo lo sustraído adentro de dos valijas, también propiedad de Bruno.

La anciana fue encontrada poco antes de las 5 de la tarde por su nieta Paula Tarca (31). La mujer estaba maniatada en una silla y presentaba golpes en el rostro, los brazos y las manos, por lo que fue asistida por personal médico del servicio de emergencias 107 y luego trasladada a la Clínica Marañón, donde estuvo internada un par de días con traumatismo de mandíbula.

 

Las aprehensiones

La detención de los delincuentes se produjo al día siguiente del atraco y fue producto de un arduo trabajo del personal de la División Investigaciones de la Policía villamariense, que incluyó el relevamiento de las cámaras de seguridad, tanto públicas como privadas, y diversos testimonios que se recabaron horas después del violento asalto.

El lunes 31, siguiendo directivas del fiscal Bosio, los investigadores policiales realizaron dos allanamientos: uno en la casa donde estaban viviendo Cuello y Gaete, en Entre Ríos 520, y otro en Intendente Maciel al 1000. En este último punto, los efectivos arrestaron a los sospechosos y secuestraron parte de los objetos sustraídos a Bruno, como relojes y varias alhajas, mientras que en la otra vivienda se incautaron distintas prendas de vestir y los celulares.

 

Otros detalles

Maximiliano Cuello nació en Córdoba capital el 13 de febrero de 1993 y se gana la vida como peón de albañil, mientras que Darío Gaete es oriundo de en la ciudad de Santa Fe (19 de junio de 1999), y trabaja como changarín.

Los dos registran domicilio en Entre Ríos 520 de Villa María.

 

Qué dice la ley

El artículo 166 del Código Penal argentino establece que “se aplicará reclusión o prisión de cinco a 15 años… 2º) si el robo se cometiere con armas, o en despoblado y en banda”. En tanto, el artículo 164 de la misma norma legal precisa que “será reprimido con prisión de un mes a seis años, el que se apoderare ilegítimamente de una cosa mueble, total o parcialmente ajena, con fuerza en las cosas o con violencia física en las personas, sea que la violencia tenga lugar antes del robo para facilitarlo, en el acto de cometerlo o después de cometido para procurar su impunidad”.

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