El fuego devoró unas 12.300 hectáreas y hay un detenido

El voraz incendio forestal desatado el lunes en el Departamento Calamuchita arrasó unas 12.300 hectáreas de pinares, arbustos y pastos naturales en Villa Yacanto, El Durazno y localidades cercanas y anoche estaba prácticamente contenido, aunque permanecen activos tres sectores de fuego, pero sin riesgo para viviendas.

En tanto, la fiscal de Instrucción de Segunda Nominación de Río Tercero, Paula del Luján Bruera, ordenó la detención e imputación de un hombre de 72 años como supuesto autor “incendio culposo agravado”, un delito que es castigado con hasta cuatro años de prisión.

El  director del Plan Provincial de Manejo del Fuego (PPMF), Martín Degano, dijo anoche que “se evitó que el fuego le pasara por encima a El Durazno; fue mucho trabajo, pero se lo pudo parar ahí, con lo justo… si no, hubiera sido un desastre”.

El funcionario confirmó que, “si no hay sorpresas, mañana (por hoy) debería amanecer sin fuegos en la zona de Villa Yacanto”.

“Quedan tres puntos calientes, pero ya sin actividad en los perímetros. El incendio dejó al fin de avanzar”, señaló Degano. En esos tres puntos se concentraban anoche los bomberos para terminar de sofocarlos.

Desde el PPMF dijeron que se trata “del peor incendio del año, en tamaño y en daños provocados”, y anticiparon que las primeras estimaciones marcan una superficie afectada de 12.300 hectáreas, dos mil de las cuales serían de forestaciones de pinos.

Por su parte, Roberto Schreiner, vocero de la Secretaría de Gestión de Riesgo Climático, Catástrofes y Protección Civil de Córdoba, refirió que la zona devastada por las llamas tiene un perímetro de 86 kilómetros y afirmó que “el lunes a la noche, los bomberos hicieron un trabajo impresionante y evitaron que hoy (por ayer) se quemaran muchas casas. Se incendiaron cinco o seis, pero se evitó que fueran como 100”.

Asimismo, dijo que trabajaron en la zona unos 210 bomberos voluntarios, personal del Equipo Técnico de Acción ante Catástrofes (ETAC), con el apoyo de tres aviones y dos helicópteros.

Es vecino de la zona

Por su parte, el Ministerio Público Fiscal (MPF) de la Provincia de Córdoba confirmó la imputación de un septuagenario por los incendios. Se trata de un residente en la zona, quien fue detenido en un campo camino a Cerro Blanco, y su identificación fue producto del trabajo conjunto realizado por la Fiscalía interviniente, efectivos de la División de Investigaciones de la Unidad Departamental Calamuchita, un grupo especializado de bomberos de la ciudad de Córdoba y personal del Departamento de Unidades de Alto Riesgo (DUAR), dependiente de la Policía de la Provincia.

En ese marco, la fiscal Bruera dispuso un allanamiento en una de vivienda de la zona, donde se secuestró material que puede ser importante en la causa a los fines de probar su participación en el hecho que se le atribuye.

El marco legal

Al respecto, cabe señalar que el delito de “incendio culposo agravado” es legislado por el artículo 189, segundo párrafo, del Código Penal de la Nación.

Dicha norma legal establece que “será reprimido con prisión de un mes a un año el que, por imprudencia o negligencia, por impericia en su arte o profesión, o por inobservancia de los reglamentos u ordenanzas, causare un incendio u otros estragos”.

En tanto, el segundo párrafo precisa que “si el hecho u omisión culpable pusiere en peligro de muerte a alguna persona o causare la muerte de alguna persona, el máximo de la pena podrá elevarse hasta cuatro años”.

Casas quemadas

El intendente de Villa Yacanto, Fernando Moiso, dijo ayer que “ya se constataron 10 viviendas totalmente quemadas”, aunque aclaró que “el relevamiento de daños todavía no terminó”.

Señaló que se están evaluando los perjuicios en otras propiedades, así como la cantidad de productores rurales damnificados. El impacto sobre el ganado y la fauna silvestre aún no se midió.

“Desde la Provincia nos anticiparon que habría ayuda para los productores y que está el Fondo para Catástrofes disponible para atender a quienes sufrieron daños en sus casas”, añadió Moiso.