También fue aprehendido un sujeto que ocasionó disturbios en la Unidad Judicial
Jóvenes ladrones presos por un robo y un arrebato
Matías Palacios, de 21 años, rompió una vidriera y sustrajo un parlante. En tanto, Alejo Pacheco, de 18, junto a un adolescente de 17, le sacaron la billetera a un chico de 13 años en el Skate Park y escaparon en motoPersonal de la Patrulla Preventiva Villa María detuvo a tres jóvenes (uno de ellos, menor de edad) por un par de hechos delictivos perpetrados en la zona céntrica de la ciudad, mientras que efectivos policiales que cumplen funciones en la Unidad Judicial aprehendieron a un iracundo individuo que, a los gritos y efectuando distintos reclamos, pateó puertas y muebles en dependencias del edificio policial de calle General Paz.
Uno de los procedimientos se llevó a cabo alrededor de las 4.45 de la madrugada de ayer en barrio Floresta de Villa Nueva, más precisamente en calle San Luis sin número, donde los uniformados arrestaron a un sujeto de 21 años, extraoficialmente identificado como Matías Rubén Palacios, quien fue imputado como presunto autor del delito de “robo”.
De acuerdo con la información difundida en la víspera por la Unidad Departamental General San Martín, el sospechoso está acusado de haber violentado la vidriera de un local de venta de artículos electrónicos ubicado en avenida Hipólito Yrigoyen, entre las calles Buenos Aires y Corrientes, en pleno centro de Villa María, de donde sustrajo un parlante de 15 pulgadas.
A raíz del alerta originado por el sistema de alarmas del comercio, empleados del Centro de Monitoreo proporcionaron valiosa información que orientó a los efectivos policiales para esclarecer el hecho delictivo. Rápidamente, se montó un “operativo cerrojo” que permitió seguir los pasos del delincuente, quien finalmente fue interceptado y detenido en el mencionado barrio villanovense, lográndose el secuestro del elemento sustraído.
Palacios quedó alojado en la Alcaidía de barrio San Justo, a disposición de la Fiscalía de Instrucción de Feria, a cargo de Silvia Maldonado, Secretaría de Dalila Alcalá.
Hurto en flagrancia
En tanto, personal de la misma Patrulla Preventiva detuvo a un joven de 18 años y a un adolescente de 17 poco después de que le arrebataran la billetera a un chico de 13 años que se encontraba en el Skate Park Villa María, ubicado en el predio ferroviario.
La Departamental informó ayer que el procedimiento se concretó pasadas las 7 de la tarde del lunes, luego de que se recibiera un llamado a través del número de emergencias 911 que alertaba sobre el hecho delictivo.
Los uniformados se constituyeron rápidamente en el lugar del robo y, después de entrevistar a la víctima, implementaron un “operativo cerrojo” en todo el sector, que incluyó tareas de búsqueda por parte de los trabajadores del Centro de Monitoreo a través de las cámaras de videovigilancia, quienes inmediatamente localizaron a los sospechosos cuando se desplazaban en una motocicleta de 110 centímetros cúbicos, de color gris.
Tras una breve persecución, los efectivos policiales interceptaron el rodado en la esquina de las calles 25 de Mayo y Santiago del Estero, lugar donde materializaron la aprehensión de ambos ladrones, además de recuperar la billetera y de secuestrar el rodado en cuestión.
El mayor, extraoficialmente identificado como Alejo Pacheco, quedó alojado en la Alcaidía policial de barrio San Justo, mientras que el chico de 17 años quedó a disposición de personal de la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia (SENAF) para la adopción de medidas de protección de sus derechos, con conocimiento del Juzgado de Niñez, Adolescencia, Familia y Penal Juvenil de Villa María.
Incidente en la Policía
Por otra parte, un hombre de 28 años, extraoficialmente identificado como Lucas Pablo Donoso, fue detenido en los primeros minutos de ayer a raíz de un violento episodio que protagonizó en el edificio de General Paz 317, sede de la Comisaría de Distrito local y de la Unidad Judicial.
La Departamental informó que, sobre el filo de la medianoche del lunes, Donoso se hizo presente en la dependencia y, “sin mediar acción previa, comenzó a patear puertas y muebles, vociferando a gritos diferentes reclamos”.
Los funcionarios policiales que estaban trabajando lo instaron para que cese, pero lejos de acatar los pedidos e ignorando las consecuencias, el irascible individuo siguió con su postura, hasta que fue reducido y esposado.
El agresor fue imputado como supuesto autor de “desobediencia a la autoridad”, y quedó a disposición de la Fiscalía de Feria.