Día del Bombero Voluntario - Hace 136 años, un inmigrante italiano creó el primer cuerpo

Y pensar que fueron prohibidos por el presidente Juárez Celman

No la tuvieron fácil los bomberos en sus comienzos: el empuje de los pobladores, muchos de ellos inmigrantes, inflamó las ansias por contar con bomberos, pero un presidente les negó la posibilidad de actuar, aunque otro los reivindicó. Es la historia que relata Adriana Alvarenga

En un día como hoy, pero hace 136 años atrás, por iniciativa del inmigrante italiano Tomás Orestes Liberti (nacido en 1860) se creó el primer cuerpo de bomberos voluntarios del país. Eran tiempos caracterizados por el enorme aluvión de inmigrantes llegados al país en procura de “hacerse la América” frente a la crisis que se vivía en el sur de Europa.

Era 1884, el mismo año de la sanción de la Ley de Educación, y gobernaba por primera vez Julio Argentino Roca. El país, si bien independiente y con el Estado constituido, aún estaba por hacerse.

La sede inicial fue plantada en calle Brandsen 567, en el barrio de La Boca, y la formación se realizó bajo el lema “Querer es poder”.

Las construcciones eran casi en su totalidad realizadas con zinc y madera, lo cual se convirtió en serio peligro para sus moradores.

Devino, como consecuencia, en algunos ciudadanos animados por un alto sentimiento de humanidad, la idea de fundar lo que se llamó Sociedad Pompieri Voluntari della Boca.

Fue precisamente Liberti, junto a Lázaro Baglietto, Luis Polinelli y otros quienes, después de varias reuniones, dieron a conocer a la población el siguiente manifiesto:

“Ciudadanos: una chispa podría desarrollar un voraz incendio que reduciría a cenizas nuestras habitaciones de madera. Tenemos necesidad de una sociedad de bomberos que, en los momentos de peligro, salven nuestros bienes y nuestras familias. Con tal motivo invitamos a la reunión que tendrá lugar el domingo próximo a las 3 p.m. en el Ateneo Iris.

¡Conciudadanos! La idea iniciada por pocos tiene necesidad de todos vosotros y de vuestro válido apoyo, y tendremos el orgullo de haber constituido una asociación filantrópica. El domingo, entonces, en el Ateneo Iris. Que nadie falte”.

Y fue así que el 2 de junio se creó la primera sociedad de bomberos voluntarios y esa fecha es la que permite celebrar hoy, en todo el país, el Día del Bombero Voluntario.

El bautismo de fuego de los primeros bomberos ocurrió el 14 de noviembre de 1885, al incendiarse la fábrica de velas de Barracas del Sud.

Arrojo de los servidores cosechó el elogio del pueblo y motivó que la capitanía del puerto cediera dos bombas a vapor que fueron bautizadas con los nombres del diputado José Fernández y Argentina.

Sin embargo, cuando lo hacía prever, el 9 de noviembre de 1889, el mismo año del surgimiento de la Unión Cívica de la Juventud, el presidente de la nación, Miguel Juárez Celman, concuñado de Roca, dictó un decreto por el que prohibió al Cuerpo de Bomberos Voluntarios de La Boca concurrir a los incendios y otros siniestros. En septiembre del año siguiente, tras la renuncia de Juárez Celman, a raíz de la crisis económica y las demandas que la Unión Cívica levantó durante la llamada “Revolución del Parque”, el vicepresidente que lo sucedió, Carlos Pellegrini, fundador del Banco Nación, anuló el decreto para el júbilo de la población.

El 15 de junio de 1900 se inauguró el edificio social de los bomberos de La Boca, acontecimiento que fue apadrinado por Roca y la esposa del embajador italiano, la marquesa Luisa Malaspina.

Recién 1 de febrero de 1954, casi tres años después de la creación de los Bomberos Voluntarios de Villa María, surgió la Federación Argentina de Asociaciones de Bomberos Voluntarios.

En noviembre de 1988, en tanto, se creó el Consejo Nacional de Federaciones de Bomberos Voluntarios de la República Argentina.

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