Uno de los primeros y padrino de muchos

En el país existen más de mil asociaciones de bomberos voluntarios que se organizaron en cuerpos activos, preparan y capacitan a 36 mil hombres y siete mil mujeres.

En tal sentido hay que decir que los Bomberos Voluntarios de Villa María marcan el rumbo, desde hace muchas décadas, al punto que el 25 de mayo pasado la institución cumplió 69 años de vida.

A excepción de lo ocurrido en las ciudades de Córdoba y San Francisco (donde la asociación de bomberos fue fundada el 30 de abril de 1937), Villa María ya pasó a la historia como el tercer punto del territorio provincial y el segundo en el interior cordobés que cuenta con los servicios de bomberos desde el 25 de mayo de 1951.

Incluso llama la atención que Villa María contó con bomberos voluntarios antes que Río Cuarto (donde se fundó el 7 de marzo de 1953), mientras que en Bell Ville existe desde el 13 de enero de 1953, instituciones de las cuales Villa María es padrino.

En el interior del interior

En la región vale apuntar que en el año 1956 se crearon otros dos cuerpos: el 9 de enero, en General Cabrera, y el 28 de octubre, en Las Varillas.

En consecuencia, los bomberos de Villa María tuvieron participación en la inmensa mayoría de los siniestros ocurridos no solo en la ciudad, sino en la amplia región circundante que, hasta que no se sucedieron las décadas, fue asistida muchas veces por los bomberos locales.

La década del 60 vio surgir otros cuarteles y, salvo la creación del cuerpo de Río Tercero, acaecida el 30 de julio de 1965, llamativamente las restantes creaciones se produjeron en localidades que son atravesadas por el antiguo y aún existente trazado de la transitada ruta nacional 9: así ocurrió en Marcos Juárez (el 2 de julio de 1961), en Leones (el 25 de septiembre de 1965), en Morrison (el 10 de junio de 1968) y en Oncativo (el 12 de octubre de 1969).

Otros cinco cuerpos bomberiles de la región se inauguraron durante la década del 70: es lo que sucedió en James Craik el 28 de diciembre de 1972, en Oliva el 18 de marzo del año siguiente, en Río Segundo el 27 de diciembre de 1974 y, con una diferencia de tres días, se crearon los cuerpos bomberiles de Hernando y Pozo del Molle el 10 y 13 de junio de 1977, respectivamente.

Durante la década del 80 se registraron en la región tres fundaciones: Ballesteros lo logró el 23 de mayo de 1980, General Deheza el 16 de agosto de 1981, en coincidencia con los Festejos Patronales, y Etruria el 31 de enero de 1984.

A lo largo de la década del 90 proliferaron nuevos cuerpos de bomberos en la región. Los primeros surgieron en el año 1992: Arroyo Algodón el 15 de julio y Arroyo Cabral el 10 de octubre. Al año siguiente se fundó el cuerpo de Tío Pujio (10 de marzo), mientras que el de San Marcos Sud ocurrió el 27 de abril de 1994.

En una suerte de sucesivas creaciones también sumaron nuevas instituciones bomberiles Carrilobo (31 de marzo de 1995), La Playosa (23 de agosto de 1996), Pasco (4 de abril de 1997), Ausonia (23 de mayo de 1998), Las Perdices (19 de agosto de 1998), Ordóñez (14 de mayo de 1999) y Dalmacio Vélez (16 de agosto de 1999).

La primera década del presente siglo, por otro parte, fue tiempo de la fundación de nuevos cuerpos en aquellas comunidades donde todavía no existían, como ocurrió el 5 de marzo de 2000 en Villa Nueva, el 17 de octubre de 2005 en Ticino, mientras que en el extremo sur del Departamento General San Martín, precisamente en Chazón, cuentan con servicios de bomberos voluntarios locales desde el 17 de agosto de 2010, por lo que en esa localidad, atravesada por las rutas provinciales 4 y 11, la institución celebrará próximamente 10 años de vida.