2 de julio - Día de las Cooperativas - Desde la entidad esperan “con entusiasmo” la culminación del nuevo vertedero de residuos

Crecer, soñar y tener nuevas oportunidades

Son algunos de los deseos que la presidenta, Marcela Durán, anhela para sus compañeras y compañero de la Cooperativa 7 de Febrero

La Cooperativa 7 de Febrero es un pilar fundamental de nuestra ciudad desde hace 17 años. Actualmente, se encuentra conformada por 37 asociados, de los cuales 36 son mujeres.

Apuntando a contribuir con el medioambiente, la tarea principal que realizan desde la Cooperativa es el tratamiento de residuos sólidos de la ciudad, es decir, clasifican todos los residuos que los vecinos separan en sus casas. También llevan a cabo trabajos de cuidado y mantenimiento.

La presidenta de la entidad, Marcela Durán, se refirió a la labor que efectúan, la cual “nunca se detiene”.

“Creo que hace pocos años comenzó a visibilizarse el impacto que tenemos en la ciudad, la pandemia contribuyó con eso”, dijo Marcela y agregó: “El gobierno actual también ayudó a que eso pase con las políticas que destina a la cuestión ambiental. Estamos a la espera de la culminación del nuevo centro de gestión ambiental y el vertedero, que nos va a permitir trabajar con mejoras edilicias y mayor tecnología. A su vez, el lugar está pensado para incorporar más operarios y aportar valor agregado a la materia prima, por lo que estamos muy entusiasmados”.

Además, relató: “Nuestra labor es día a día, ni siquiera en la pandemia dejamos de trabajar. Creo que a la sociedad le sorprende el hecho de que un grupo de mujeres bajo el sistema cooperativo pueda llevar adelante una empresa desde hace casi 17 años”.

Tras consultarle por la actividad de la cooperativa y cómo incide en el medioambiente, Durán precisó: “La temática ambiental está muchísimo más en agenda. Siempre nos llamaron para dar charlas en los colegios, pero ahora esa situación ocurre cada vez con mayor frecuencia y con más entidades. Ahora nos llaman desde asociaciones, ONG y empresas, algo que es muy positivo y por lo que se nota que se está generando conciencia”. “Incluso, hay vecinos que se acercan a nuestras propias casas con los residuos separados para que lo llevemos al vertedero”, destacó.

“Esto es esencial, no solo porque lo necesitamos para el medioambiente, sino que también ayuda en nuestra economía, porque somos un grupo de familias que subsistimos a partir de los ingresos de la venta de residuos”, dijo Marcela.

 

Cooperativa inclusiva

Por otra parte, la presidenta se refirió a que la cooperativa “es muy inclusiva”. “Desde la entidad se generan fuentes de trabajo para personas que por una razón u otra no pudieron estudiar o tienen problemas de salud”, resaltó.

En ese sentido, comentó: “En cuanto a la parte educativa, tenemos un programa mediante el cual todos los días jueves se detiene la producción durante dos horas y tenemos clases con un tutor que nos brindó la Municipalidad. Hay gente que está terminando la primaria y otros están en primer o segundo año de secundaria”.

“Esto lo hacemos para que las personas puedan crecer y tener otras perspectivas hacia su vida y hacia la cooperativa, que tengan otros sueños y otras oportunidades”, afirmó Durán y concluyó: “La ganancia se verá a largo plazo porque los asociados van a poder aprender muchos aspectos del sistema cooperativo y aplicarlo a la producción”.

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