Año Internacional de las Cooperativas de la ONU 2025
“El individualismo no se sustenta en el tiempo”
Entrevista al ministro de Cooperativas y Mutuales de la provincia. Como hombre del interior del interior, conoce lo que el tercer sector de la economía aportó al desarrollo de cada localidad-¿Cómo está el movimiento cooperativo cordobés en estos tiempos en que la solidaridad no es el ejemplo que se nos baja desde arriba, desde la Nación?

-Bueno, todos sabemos que la situación del país, en todos los aspectos, es bastante complicada. Por eso creo que lo más importante es estar unidos en estos momentos y acompañar a cada cooperativa, a cada sector cooperativo en esta tarea tan difícil, porque la tendencia, hasta cultural, es que todo sea individualismo y donde todo lo que sea economía social pareciera que es atacado. Pero nosotros estamos convencidos, desde el Gobierno provincial, de que el camino tiene que ser la solidaridad, el camino es que nadie se salva solo y que tendríamos que seguir profundizando políticas públicas para garantizar la existencia, por un lado, y también el desarrollo y el fortalecimiento de todas las cooperativas mutuales en Córdoba, que son muy importantes, que han sido muy importantes en la historia, porque, sin las cooperativas y las mutuales, el interior del interior de nuestra Córdoba no se hubiera desarrollado. Tenemos innumerables experiencias en donde las cooperativas han protegido las economías regionales, han desarrollado obras, servicios y, sobre todo, han permitido cumplir sueños que el mercado no hubiera resuelto nunca, porque el mercado solamente busca la rentabilidad que solamente se puede dar en aquellos lugares más poblados, en donde tienen ciertas normativas propias del mercado y el resto de la gente estaría a la buena de Dios, a la deriva.
-Nosotros, en nuestra región, tenemos decenas de ejemplos en los que el desarrollo del pueblo está decididamente ligado al hacer cooperativo...
-Hay miles de historias, cada una con su impronta y con sus características, pero la importancia que ha tenido y tiene el movimiento cooperativo abarca todos los aspectos de la vida social de la persona humana. Y esto que hablábamos recién de la onda totalmente individualista que se vive hoy en el país, que todo parece que tiene que ser individualista, yo creo que son modas que no se sustentan en el tiempo. Primero, porque los seres humanos, por naturaleza, son sociales, son de convivir en sociedad, y este individualismo no resiste mucho tiempo. El ser humano siempre busca lo social, el trabajar juntos, el aunar esfuerzos. Es la naturaleza del ser humano a lo largo de toda la historia de la humanidad.
-Usted fue intendente de Colonia Caroya, y en el acto de asunción como ministro señalaba el rol que podían jugar las cooperativas, por ejemplo, en el norte cordobés, donde tenemos los gasoductos troncales y viviendas en las inmediaciones que no estaban conectadas al servicio...
-Estamos trabajando y muy pronto vamos a tener anuncio del plan de últimas millas. Quizás tenemos cooperativas interesadas, con otra hemos avanzado de forma particular, pero no solamente con el tema del gas, también con obras de agua, energía... También se ha trabajado muy fuerte en lo que es energía solar. Hoy, el cooperativismo en Córdoba tiene el parque solar más grande de Argentina, que está en Córdoba, con una inversión de 10 millones de dólares, gracias al trabajo conjunto de nuestro Ministerio y el Banco de Córdoba. Porque el gobernador Martín Llaryora ha puesto al banco de los cordobeses al servicio de todos los proyectos que tengan que ver con obras para las cooperativas generales de la provincia.
-Para la Organización de las Naciones Unidas, 2025 es el Año Internacional de las Cooperativas; y para la Alianza Cooperativa Internacional, el lema de este año es: “Las cooperativas construyen un mundo mejor”. ¿Cree que es así?
-Por supuesto. Lo decía el Papa Francisco, lo dijo la Iglesia durante años y años, lo dicen todas las expresiones de la vida humana, que las cooperativas han tenido un rol fundamental y sobre todo afuera de Argentina, en Europa; nosotros, que siempre miramos a Europa o nos quieren, por moda, hacer mirar a Europa, miremos toda la cantidad de cooperativas que tienen en otros países. En Francia, en Italia..., cómo se ha manejado. Son ligas enormes y en Argentina, en cierta forma, aunque más asociado a la cultura del interior del interior.
-¿No tanto en Buenos Aires?
-Por ahí nos pasa... Escuchamos gente de Buenos Aires, sobre todo, que nos quieren imponer esa cultura de allá, del puerto, donde nos quieren dar cátedra de cómo se puede prestar un servicio. No tienen la más pálida idea de cómo se vive en el interior del interior. Estos opinólogos de Buenos Aires que están muy cómodos en una ciudad donde no les falta nada, donde viven, encima, a expensas lo que aporta el interior, porque ellos no aportan lo que aporta el interior, y encima nos quieren dar cátedra de cómo se tienen que prestar los servicios, de los costos, de cómo tiene que ser, que el mercado tiene que resolverlo... No tienen la más pálida idea de lo que es vivir en el interior del interior del país, en donde si no hubiera sido porque los vecinos se hubieran agrupado hace 50, 60, 70 años en cooperativas, no habría desarrollo de nada, sería tierra arrasada o sería desierto. Y esta gente nos quiere imponer esa cultura. Por eso creo que también está en nosotros mostrar todas las experiencias, que son innumerables, que hay en materia cooperativista.
-¿Esa necesidad de mostrar estas experiencias es la que abre paso al congreso que se viene?
-Exacto. Es por eso que vamos a tener, el 11 y el 12 de julio, un Congreso Nacional e Internacional de Cooperativas, para mostrar todo lo que este mundo cooperativo y mutual hace por el bien de la sociedad y también para seguir trabajando y planificando políticas públicas para seguir haciéndolo en conjunto; no compitiendo, sino poniendo el Estado al servicio de este sector.
-Ministro, estaba hablando usted de Buenos Aires, me imagino la impotencia cuando trata con esa clase de funcionarios, pero quería saber cómo está el INAES hoy, el Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social, que es la autoridad de aplicación para el sector. ¿Hay gente que todavía escucha ahí cuando van ustedes a dialogar acerca del cooperativismo?
-No, ahí, la relación es muy buena. La verdad es que tenemos muy buena relación. Cuando yo hablo de lo que opinan otros en Buenos Aires no es justamente el caso del INAES. Acá, el tema pasa por medios de prensa, por otros sectores del Gobierno, sectores políticos también, y no necesariamente del Gobierno. Tenemos gente que no es del Gobierno, pero para quedar bien, para congraciarse, terminan diciendo cosas que hacen ver que no tienen idea de lo que dicen. Inclusive aquí, en Córdoba, me tocó hace muy poco encontrarme con un legislador de la oposición, haciendo un video comparando el costo de la energía de poblados rurales alejados de Córdoba con lo que se paga en Córdoba capital. Realmente, una lástima, porque encima son gente del interior, o dicen ser del interior, y no saben que prestar un servicio donde hay 300 kilómetros de líneas rurales, donde son dos o tres empleados...
-El costo que tiene prestar el servicio es otro...
-El costo es obvio que es mucho mayor que prestarlo en la capital de Córdoba o en una ciudad grande. No es lo mismo estar comparando peras con manzanas, y realmente hacen un daño terrible. Primero, porque demuestran una ignorancia total de los temas, y segundo, porque quieren hacer un poquito de demagogia con algo que no saben y terminan por hacer un daño al sistema. Porque la decisión de mantener servicios en el interior, en las zonas rurales donde la densidad poblacional es extremamente menor, no merece que se genere ese tipo de comparaciones que llevan a rivalidades. Hay que buscar soluciones y hay que trabajar, hay que escuchar, hay que atender a cada una de las cooperativas que tienen una situación muy difícil hoy, en un país donde la tendencia es individualista, donde se denosta todo lo que sea asociativismo.