A la espera de los materiales para construir la solución al desalojo

Veinte días atrás, una familia que llegó hace unos ocho meses a Villa Nueva y se instaló en una precaria y deteriorada piecita junto al río Ctalamochita, en cercanías al puente de la ruta 2, quedó expuesta ante el intento de desalojo que hizo el municipio.

La situación derivó en la presentación del caso en la Justicia por parte de la Municipalidad, aduciendo que era riesgosa la permanencia de Beatriz, Javier, sus cinco hijos y una joven de 21 años en el lugar, planteando que existe peligro de derrumbe.

El Diario dialogó con el padre de familia quien, en primer lugar, aclaró que desde aquella situación en la que efectivos de Seguridad Ciudadana se hicieron presentes para advertirles que tenían que abandonar el espacio, no volvieron a tener novedades. El municipio judicializó el caso para que, justamente, el futuro de ellos sea decidido vía judicial.

La novedad tiene que ver con que ellos mismos van a empezar a levantar un espacio para poder mudarse, para lo cual están esperando los materiales que adquirieron tras cobrar el IFE.

Una piecita

“Está todo igual, hasta ahora nadie más vino después de aquel momento en el que nos quisieron desalojar. Nosotros no nos fuimos, y no pasó más nada”, relató Javier Romero.

El hombre confió que “volvió una asistente social, me preguntó qué iba a hacer y le dije que por ahora de acá no me voy, pero que estoy consiguiendo material para levantar algo, estoy en eso”.

Específicamente, Javier destacó que “cobré los 10 mil pesos y compré material que me dijeron que esta semana me lo traen”. El dinero, aseguró, es el que recibió mediante el Ingreso Familiar de Emergencia.

Con los materiales “vamos a levantar algo acá mismo, tengo marcado el terreno, ya lo rellené y todo, en poco tiempo vamos a poder dejar esta pieza, apenas termine de levantarme una nueva”. No van a dejar el espacio que ocupan, sí el inmueble que está en peligro de derrumbe.

Allí, en cercanías del puente carretero, la familia trabaja en la extracción de arena en la costa del río.

Cambio de domicilio

Javier reveló también que han iniciado los trámites para hacer el cambio de domicilio “porque no somos de Córdoba, somos de acá, y a Córdoba no me voy más”. Esto, en referencia a que una de las posibilidades que el municipio había puesto a su disposición era trasladarlos a la capital provincial, que es el lugar donde la familia residía antes de pisar suelo villanovense. “Acá mis hijos son libres, allá era peligroso, y había droga”, dijeron en su momento a este medio.

“De a poquito todo se va solucionando”, dijo con tono de esperanza. Javier contó que no recibieron colaboración externa en materia de donación de materiales o chapas y elementos para poder abandonar el pequeño inmueble que hoy habitan. Aunque sí mencionó que “una sobrina está haciendo una rifa para comprar los caños y lo necesario para hacer una bomba de agua y que podamos tener nuestra agua, que sale unos 13 mil pesos”.

Quien quisiera colaborar con ellos donando materiales o lo que pueda servirles para la construcción del nuevo espacio, pueden hacerlo al 3534273357.