OPINIÓN
Sobre la Virgen de Luján y su vínculo con Villa Nueva
El día de la Virgen de Luján, que celebramos cada 8 de mayo, es una festividad muy importante en la Iglesia Católica argentina, ya que se conmemora la coronación de la imagen de la Virgen por el Papa León XIII en 1887, a instancia del Padre Jorge María Salvaire, responsable del Santuario.
La Virgen de Luján es la Patrona de la Argentina. En 1630, dos imágenes de la Purísima Concepción de María, traídas desde Brasil, llegaron al puerto de Buenos Aires y desde allí emprendieron viaje a Santiago del Estero. En el camino, las carretas que las transportaban detuvieron su marcha a orillas del río Luján.
Pero bueno es recordar, que nuestra Virgen de Luján, Patrona de nuestro país, ofreció hace tantos años a ciudadanos de Villa Nueva y su geografía rural un hecho que conmovió a la entonces comunidad “Vicentina”, responsable de la administración de la Villa del Luján, y a toda la comunidad de Villa Nueva, que se apresta a celebrar el año 2026 su bicentenario.
Sucedió en 1866 que un malón de indios ranqueles, en el que, además de robos y muertes, llevaron cautiva a la familia Lazos, compuesta por cuatro hijos y su madre Jacinta Rosales, quienes fueron bautizados y su madre enterrada en la Parroquia del Rosario en Villa Nueva.
Este hecho, pese a su dramatismo, tuvo un final feliz. Y es que, por aquellos años, la congregación Vicentina trabajaba en las misiones con los indios, y un joven sacerdote, Jorge María Salvaire, hoy “siervo de Dios”, salió en su rescate, logrando la liberación de todos los cautivos en las tribus del cacique Manuel Namuncurá, el padre de Ceferino.
Esta tarea y misión fue solicitada por el entonces obispo de Buenos Aires, Federico Aneiros, en mayo de 1875, a requerimiento de Carranza y otros ciudadanos de Villa Nueva.
Jacinta, ya liberada, conoce al Padre Salvaire, y de aquel encuentro, el sacerdote expresa: “La vista y conversación de esta madre afligida, ha aumentado en nosotros el ánimo de hacer el viaje”, expresión que, según los documentos disponibles, fue en julio de 1875.
¡Por lo tanto, esta misión fue fundamental para liberar los cautivos de Villa Nueva, tanto por lo expresado por Salvaire como por el obispo Aneiros!
Pero el misionero vivió momentos cruciales en octubre de 1875, ya que su integridad física se vio seriamente amenazada por los indios al momento de los rescates. Es allí donde realiza “votos o promesas” a la Virgen de Luján, expresándole que si puede superar ese momento trágico propagará la historia, difundirá su culto y construirá un nuevo Santuario.
Afirma monseñor Durán: “Queda ligado, por los documentos guardados e investigados, que es absolutamente asociado el nombre de los Lazos (hijos de Jacinta) de Villa Nueva con la Historia de la Virgen de Lujan” y su Basílica, hoy ícono católico de Argentina y el mundo.
Monseñor Juan Guillermo Durán es autor del libro: “El Padre Jorge María Salvaire y la familia Lazos de Villa Nueva” y expuso en Villa Nueva en el año 2003 sobre su extensa investigación.
Lic. Jorge A. Daher