Uno de los estadios más lindos del mundo
MESSIMANIA: Remodelar el Parque de los Príncipes
Luego del primer partido (con el futbolista argentino sentado como espectador) y con las 48.000 butacas ocupadas, el presidente del París Saint Germain hizo números... Y ya pidió una audiencia con la alcaldesa de la Ciudad de la Luz
Si el Barcelona colgaba el cartel de “Localidades agotadas” en cada uno de sus partidos, siendo que Camp Nou cuenta con 99.354 asientos..., resulta fácil entender que el sábado último Nasser Al-Khelaifi advirtiera que el Parque de los Príncipes le quedaba chico a su club.
Lionel Messi asistía como espectador y las 48.000 butacas estaban ocupadas. Era el primer partido que el París Saint Germain jugaba como local en esta temporada, la algarabía reinaba antes de que llegaran los goles, y el qatarí olió una fiesta de no acabar.
La llegada del argentino revolucionó a París y al club. Vendió en menos de una semana más camisetas con el número 30 de su nuevo ídolo, que cualquiera de las de sus otros futbolistas en los últimos 12 meses. Pero son muchos más los beneficios que el PSG obtendrá por la incorporación de Messi a su equipo: multiplicará los derechos televisivos por cada competición a la que acceda y... podrá jugar siempre a cancha llena, porque nadie querrá perderse la fiesta de cada fin de semana.
Ante esta última posibilidad, Nasser Al-Khelaifi planteó que el club necesita de una reforma en su estadio, algo de lo que inclusive se habló en 2016. En ese entonces, la idea era llevar la capacidad a 60.000 espectadores.
Lo que pasa es que el Parque de los Príncipes es un monumento histórico y protegido de París y cada obra que se desee realizar en él necesita de una autorización del Ayuntamiento. De recibir el visto bueno por parte de la ciudad, un grupo de arquitectos debe evaluar las obras y volver a autorizarlas. Para que todo el proceso se ponga en marcha, el qatarí, uno de los 100 hombres más ricos del mundo, necesita del apoyo de la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, con quien acaba de solicitar una audiencia.
Se trata de un recinto deportivo que ya tuvo 3 refacciones a lo largo de su historia, la última de ellas ocurrió en 1982. La particularidad de este estadio es que ningún asiento está a más de 45 metros del campo de juego, lo que crea una atmósfera bulliciosa.
Ya en 2011, cuando Nasser llegó al club hubo intentos por ampliar la capacidad del estadio hasta los 60.000 espectadores, pero éstos no prosperaron. La EURO 2016, que se jugó íntegramente en Francia, fue una gran posibilidad, pero el Ayuntamiento de París rechazó la obra. La asignación de París como sede de los Juegos Olímpicos de París 2024 fue otro momento donde sonó la posibilidad, pero los plazos cortos hicieron que no se aceptaran las obras.
“Necesitamos ampliarlo. Debemos discutir con la alcaldesa de París. Ella está con nosotros siempre. Me encanta el Parc des Princes, pero tenemos que ampliarlo. Esto es importante para el futuro del club. Cada club importante tiene hoy 80.000 espectadores. Ampliar el estadio es una obligación”, apretó ahora Nasser.
Es que está ocurriendo una nueva “Revolución”, aunque distinta a la de Robespierre y Danton. No rodarán cabezas. Solamente pasa que los millones de turistas que cada año viajan para visitar la Torre Eiffel, el Arco del Triunfo, la Sacré Coeur en Montmartre, el Museo del Louvre... tienen una nueva atracción: Messi.
El titular del PSG sabe que para iniciar las obras tal vez tenga que mudarse por un tiempo al Stade de France, en el que juega habitualmente la selección francesa, el estadio con mayor capacidad del país, con un total de 81.338 espectadores. Y está dispuesto.
Habrá que ver si vuelve sobre el proyecto de 2016 (eliminar el foso y colocar en su lugar filas de asientos, incorporar un restaurante, un salón panorámico para ver el partido por el cristal o por diversas pantallas...), o si mandará a elaborar uno nuevo. Lo cierto es que se prepara para jugar una final ante la alcaldesa Hidalgo.
