Video arte locales fueron elegidos y distinguidos internacionalmente

Escribe Juan Ramón Seia DE NUESTRA REDACCION

Una materia optativa de profundización para los últimos años de la carrera Diseño y Producción Audiovisual de la UNVM, de un tiempo a esta parte, comenzó a tener cierta preponderancia por fuera de los claustros académicos  y ser noticia por sus proyectos finales alusivos a la video danza y el video experimental.

“Lo que sucede es que el objetivo principal de la asignatura es justamente llegar a inscribirse en certámenes internacionales de esas dos modalidades”, explicó a El Diario el realizador y docente Leandro Navall, responsable del espacio curricular Laboratorio de Imágenes en Movimiento.

“Es una materia amada y odiada dentro de la carrera porque justamente rompe o viene a deconstruir ciertos esquemas académicos al trabajarse puntualmente como taller. En las demás asignaturas los alumnos elaboran proyectos, pero lo hacen a través de la teoría o para cumplir con algún trabajo práctico. En nuestro espacio, la idea es experimentar, provocar cruces e hibridez con otras perspectivas, convocar a artistas de otras disciplinas que lleguen a potenciar lo realizado y crear sinergia”, plasmó Navall.

De tal manera, con ese sistema de funcionamiento, desde la materia se han pergeñado una serie de proyectos con el grupo de Danza Contemporánea de la UNVM (Danzamble), dirigidos por el propio Leandro, y tres audiovisuales desarrollados por distintos grupos de estudiantes. Todos ellos han obtenido selecciones oficiales en festivales de distintos puntos del planeta; incluso, algunos de ellos han logrado ser finalistas y ser distinguidos.

Las puestas desarrolladas

Según recordó Navall, la idea primigenia de la materia optativa germinó a principios de los años 2000, cuando un grupo de estudiantes, solventado por la UNVM, participó de talleres dictados en el ex-IUNA (actual Universidad Nacional de las Artes), en Buenos Aires.

Allí, Leandro junto a la profesora Gabriela Redondo (por aquel entonces, directora del Grupo de Danza Contemporánea), participaron de una capacitación dictada por Silvina Szperling, alusiva al video arte y la video danza. “Ahí nos dimos cuenta de que teníamos todos los elementos para empezar a trabajar y experimentar sobre ello, ya que contábamos con las herramientas audiovisuales de Diseño y un cuerpo estable de danza. Lo primero que hicimos fue un proyecto basado en una puesta que tenía el Danzamble sobre Oliverio Girondo (‘Transmigraciones’, 2011). Cuando mandamos a Silvina nos dijo: ‘No puede concusar porque es muy largo’. De a poco fuimos aprendiendo algunas reglas de la modalidad. A ese trabajo lo dividimos en tres y uno de ellos fue seleccionado para un concurso”, rememoró.

Luego llegaría la pieza de “Otra piel” (2012, la cual se fue terminando en el Senado de la Nación ya que abordaba la trata de personas, además de ser seleccionado en Italia y en Portugal), “Insurrectas” (2015, sobre violencia de género, elegido en el VideoDanzaBA de Buenos Aires),  y “En la huella del ancla” (2017, codirigido junto a Mercedes Chanquía Aguirre de la Universidad París 8 de Francia, que indaga la inmigración a través de la historia y de manera global, que cosecha 16 selecciones, una mención en VideoDanzaBA y un premio del público en Francia). El año pasado, el mismo grupo de trabajo (Navall, Aguirre y Danzamble), postuló el trabajo “Fa sentadas en fa” que ganara pocos días atrás el mejor filme de danza en Jakarta, Indonesia.

Además, se suman los trabajos de los alumnos como “Ero” (2017), de Carolina Fernández y Alejandro Buttiero, “Introspectiva” (2017); de Catalina Crocco, Nayla Dub y Belén Canavozo, que acaba de ser elegida como finalista en un festival de Hong Kong; y “Abismo” (2018), de Jésica Putero y Martina Urquía, seleccionada en Italia, Bolivia e Indonesia.

“Un nicho poco explotado”

“Yo creo que esta materia, de ser optativa va a pasar a ser troncal en algún momento. Es un lenguaje nuevo, y un nicho que no está muy explotado en Argentina pero que es una buena manera para posicionar al alumno o a la alumna, a la carrera y a la Universidad dentro de un contexto

internacional. No solo que le otorga una pieza grabada e inscripta en festivales al currículum del estudiante sino que le posibilita trabajar en una modalidad que no tiene tanta competencia como los lenguajes tradicionales del

audiovisual”.

Asimismo, Navall (que se encarga de enviar los video arte a distintos festivales en diversas partes del mundo), puntualizó en cuanto al enfoque académico, que “es importante que los chicos puedan conocer en profundidad lo ficcional, lo documental, y las demás ramas tradicionales para luego romper con ello y crear algo nuevo”.