“La danza como un lenguaje universal”

El sábado por la noche se llevó a cabo la presentación del filme Dantza en la Medioteca Mariano Moreno, con la organización del Centro Vasco Euzo Etxea de nuestra ciudad junto al apoyo del Gobierno vasco y del Instituto Vasco Etxepare.

Con la presencia del director de la película Telmo Esnal y el dantzari Gari Otamendi se desarrolló la velada que fue apreciada por buena parte de la comunidad vasca local, la cual brindara una muestra de música y baile en la previa.

Antes de la proyección, el realizador y el protagonista conversaron con los medios locales sobre el trabajo realizado.

Telmo, quien también es dantzari desde muy joven, señaló que “nunca se había realizado un abordaje de esta manera en el País Vasco. Tenemos un idioma muy potente y que encierra simbologías muy interesantes. Pero tal vez hemos estado muy pendientes del idioma y de la danza no tanto. Con este proyecto hemos logrado plasmar las danzas tradicionales y de reciente creación entendiendo a esos bailes también como un lenguaje en sí mismo”.

Otamendi, al respecto, subrayó particularmente: “La danza es uno de los ejes integradores de las comunidades vascas de la diáspora”. Y asimismo, aclaró que todos los participantes del filmes no son actores, sino bailarines que debieron adecuar las coreografías, miradas y gestos que venían realizando desde hace varios años, a las narrativas de la cámara. De todos modos, Esnal acotó: “Ellos no son conscientes, pero son actores acostumbrados a actuar frente a un público”.

"Estamos muy contentos de estar aquí"

La producción, que comprende diversas escenografías naturales y distintas épocas del año emulando los ciclos de la vida y de la naturaleza, está girando por distintos puntos del país y de las comunidades vascas en el mundo.

“Es muy emotivo cómo reacciona la gente al ver lo que sucede en pantalla”, indicó Esnal. En tanto, Otamendi añadió: “Sabíamos que en Villa María había una gran cantidad de vascos en relación al resto de Argentina y por eso estamos contentos de haber llegado y conocido este lugar”.

En cuanto a la inclusión o no de una mirada política del filme respecto a la autoproclamación del País Vasco como nación independiente, el director precisó: “En este caso quisimos hacer una película universal, ya que fuimos tan lejos en las raíces de la danza que nos termina tocando a todos. Queremos decir que nuestras danzas tienen formas características, pero son similares a otras partes del mundo”.

Otamendi agregó: “Las danzas de corro son las formas más arcaicas de bailar, agarrados de la mano, donde no hay jerarquización y hay comunidad, como se vislumbra en nuestras comunidades”.