Bellezas del corazón de “Floripa”

Escribe: Pepo Garay (Especial para El Diario)

Una laguna que es alma y vida:

Si hay algo que caracteriza a Lagoa da Conceição y la diferencia del resto de las también preciosas localidades de Florianópolis (o para hablar con propiedad, de la isla de Santa Catarina), es justamente su “lagoa”: una portentosa laguna que es alma y vida del pueblo, rodeada de morros y verdores y de una costanera de intenso movimiento.

Allí, locales y turistas disfrutan de la jornada fácil, de los atardeceres y amaneceres diáfanos y elementales y, por supuesto, del chapuzón sagrado en playas que son de arena (algunas) y césped (otras).  

Actividades para todos, con los morros de protagonistas:

En ese contexto privilegiado, viajeros de todo Brasil, Argentina y el resto del mundo aprovechan para realizar actividades acuáticas de las más diversas, como paseos en kayaks, barcos, canoas e incluso un nado extenso y solemne, sobre aguas calmas y de una frescura que es más que bienvenida en los días de calor (que son protagonistas en verano, pero también en primavera y otoño, y a veces hasta en invierno).

Ya fuera del agua, vale la pena aprovechar la costanera para pasear, trotar o correr admirando el paisaje. También es recomendable realizar las “trhillas” o caminatas. Entre morros tenues y armoniosos, las postales casi tropicales sientan de maravilla a los sentidos. Uno de los circuitos, por caso, lleva a Barra da Lagoa, en la costa oeste de la isla de Santa Catarina.

Playas por doquier

Al respecto hay que decir que Barra da Lagoa es una de las playas más seductoras de “Floripa”. Prácticamente un “barrio” de Lagoa da Conceição, el balneario es ideal para engatusarse con el azul esplendido del océano Atlántico, la arena fina, las olas y más morros verdísimos y cautivantes. 

Con todo, Barra (así se la conoce popularmente) es apenas una de las muchas playas que enriquecen el centro-occidente de la Isla. Otras perlas del sector son Mozambique (se extiende por casi 15 kilómetros de fantástica arena), Joaquina y Mole (ambas de grandes olas, óptima para los amantes del surf, uno de los deportes más populares a nivel local), Morro das Pedras y la siempre a mano Campeche (cercana a la Laguna do Peri y a la isla de Campeche, a la que se llega en barco para enfiestar los ojos del turquesa marítimo y de la arena como harina dorada); por sólo nombrar algunas.

Aquí resulta esencial decir que la isla de Santa Catarina (unos 50 kilómetros de norte a sur, por unos 20 de este a oeste) cuenta con más de 100 playas. Las del sector centro-oeste, para muchos, son las mejores.

La relajada cultura local

Todo lo antes descripto, con las maravillas de la naturaleza en primer plano, combina de maravilla con la cultura local. En Lagoa da Conceição, a pesar del gran afluente de turistas durante buena parte del año, la vida se pasa en relax pleno.

Se los ve a los “caras” y a las “mininhas” tan relajados en sus formas, en ojotas y gesto despreocupado, tan, pero tan brasileños. O para más: tan, pero tan propios de “Floripa”. El surf (ya se dijo), la samba y el pagode (el cavaquinho, especie de charango tropical, y la pandereta, infaltables en varias esquinas, sobre todo en la época de carnaval) y la “cerveja” (cerveza) se hacen presentes en el centro (repleto de tiendas) y en la costa. Justo a la vera de la Lagoa, esa que nos encanta, y nos convoca.

Mini guía: Ubicación: sureste de Brasil, centro-oeste de la isla de Santa Catarina (Florianópolis). Distancias: 1.800 kilómetros al noreste de Villa María, 15 kilómetros al este de la ciudad de Florianópolis. Población: 5.000 habitantes