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El Lobo se lo comió de entrada

Argentino, con goles en los comienzos de cada tiempo, le ganó 2 a 0 a Silvio Pellico y logró el pasaje sin atenuantes. Los goles fueron de sus atacantes, Diego Carrera y Mauro Fuente. En cuartos de final enfrentará a Rivadavia
lunes, 18 de octubre de 2021 · 08:30

Escribe: Juan Pablo Morre

 

C?on una incipiente actuación en los primeros cuartos de cada período, Argentino triunfó 2 a 0 de local ante Silvio Pellico, definió a su favor la “trilogía” de partidos entre ambos y llega con expectativas a los cruces de 4tos. de final del torneo “Francisco Cacho Fiandino” de la Liga Villamariense de Fútbol.

El Lobo, con un comienzo iluminado de Isaías Candiotto, rápidamente encontró la ventaja en la etapa inicial y la administró sin mayores inconvenientes ante un rival que, a excepción de lapsos, le costó en demasía poner en reales aprietos a Lionel Luciani.

Con dos acciones muy similares (desnivel por izquierda con Candiotto y apertura al otro sector), Argentino primero merodeó la apertura con un remate desviado de Fuente y, segundos después, concretó el 1-0. Pase de Candiotto a Carrera quien, apareciendo por detrás de una defensa cerrada, sacó una volea fulminante que venció al joven Angelo Conrero: 1-0.

Argentino imponía condiciones ante un rival que no encontró eje en esos primeros instantes y fue superado ante la intensidad que le propuso el rival, que además mostraba sus pergaminos, con una combinación colectiva sobresaliente entre Candiotto, Berazategui y Carrera, quien definió alto tras quedar mano a mano con Conrero.

De igual modo, promediando la etapa, el Lobo se introdujo en una laguna futbolística, cedió pelota y terreno, y el Canario fue con impulso ante la desventaja en el tanteador. A los 25’, López Leiva le entró mal, y tras despeje corto, Bomprezzi intentó con un puntapié débil que controló Luciani.

Esa aproximación visualizó un cambio de parecer en el trámite, aunque la falta de claridad en ataque del Canario no le permitió inquietar a un anfitrión que en la última parte del período inicial, y por la sapiencia de Berazategui, retomó al dominio del juego y tras el descanso, volvió a imponer las condiciones del partido.

Precisamente, ante un Canario adelantado, llegaron los espacios y a cierta falta de coberturas le sacó máximo provecho Argentino, cuando Carrera peleó una acción dividida y surgió la réplica letal. La pelota la tomó Martínez, quien tiró fuerte, despejó Conrero con muy buena atajada pero en el rebote apareció Mauro Fuente -máximo goleador histórico aún vigente del Lobo- y no perdonó: 2 a 0.

Ese tanto, cuando apenas transcurrían cinco minutos, selló la historia. Silvio Pellico, con muchos jóvenes en cancha, buscó con ímpetu y empujado por quedar con un hombre de más (se fue expulsado el joven Nahuel Franco en el local, con dos tarjetas innecesarias), aunque sin las armas y la peligrosidad para pretender la heroica (debía convertir tres goles).

Y Argentino, rearmado con diez, entendió que era historia juzgada, a veces pecó de ingenuidad y desaprovechó las oportunidades que tuvo para aumentar la distancia; ante esto, los minutos transcurrieron en una monotonía previamente resuelta con ese tanto de Fuente.

Ganó bien Argentino, que justificó la superioridad ante su rival y ahora ya piensa en el cruce dificilísimo frente al Rivadavia que comanda su exfigura, Claudio Díaz.

 

La figura

Pedro Berazategui

Fue el más constante en el partido, gravitante y de espíritu colectivo para sacrificarse en beneficio del equipo, desempeñándose en diferentes puestos. Diego Carrera anotó un gol y gestó el segundo; en la visita, Conrero impidió una goleada con la serie ya definida.

 

El árbitro

Federico Nieto

Regular actuación, pero sin mucho que reprocharle salvo acciones puntales. No influyó en el partido, amonestó poco y buscó darle dinámica al juego, pese a que en ciertos momentos del primer tiempo el juego se cortó en demasía.

 

50%
Satisfacción
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Bronca
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Tristeza
0%
Incertidumbre
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Indiferencia

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