Las agencias de viajes piden que se declare la emergencia para el sector

Las agencias de viajes no arrancaron bien el año. Al asumir el nuevo gobierno nacional ordenó el impuesto PAIS, que encarecía en un 30% los paquetes de turismo que comprendían servicios en el exterior, incluidos boletos aéreos, marítimos y terrestres, es decir, lo que se pagaba en moneda extranjera. No terminaron de reclamar por ese tema que el mundo se vio paralizado por una cuarentena a raíz de la pandemia de coronavirus.

“Tenemos un panorama muy negro”, admitió Emilia, la propietaria de la agencia Departure Villa María, al referirse a la situación que vive actualmente el sector.

En abril, representantes de la Federación Argentina de Asociaciones de Empresas de Viajes y Turismo (Faevyt) y de la Cámara Argentina de Turismo, entre otras entidades del rubro, se reunieron con autoridades nacionales para plantear la necesidad de contar con medidas específicas para el sector ante la crisis económica causada por el Covid-19. Los empresarios pidieron profundizar las medidas dispuestas para las Pymes, pero más enfocadas al sector turístico, y desde el Gobierno se comprometieron a conformar una mesa de trabajo para dialogar sobre los pasos a seguir.

“Las agencias autoconvocadas participamos de una reunión con el Gobierno, pero no recibimos ninguna respuesta adicional, puntual para nuestro rubro, que es uno de los más afectados en esta cuarentena, porque cualquier empresa o Pyme que ahora está parada, cuando levanten el aislamiento van a poder trabajar. En nuestro caso, cuando podamos reabrir las agencias de turismo, no vamos a tener qué vender”, explicó Emilia.

“En nuestro rubro se van a tener que dar no solo factores sanitarios, sino también económicos y a nivel mundial para que podamos volver a trabajar. Tenemos un panorama muy negro y hasta ahora no tuvimos ninguna medida del Gobierno más allá de la que se menciona para cualquier Pyme”, remarcó.

“Tampoco accedimos a los créditos, y a los empleados tenemos que pagarles, al igual que los alquileres, los impuestos, los servicios”, agregó.

“A la reunión las agencias llevaron una propuesta con ocho puntos, entre otras cosas, hemos pedido compartir oficinas con colegas, y que podamos ofertar otras cosas que no tengan que ver con viajes, pero todavía no hay nada concreto. En un momento calcularon que recién íbamos a poder empezar a vender el 1 de septiembre, pero hay mucha incertidumbre, además, cómo vamos a sobrevivir hasta ese momento. Hoy está totalmente parado y no se puede vender nada”, aseguró.

En mayo, el grupo de Agentes de Viajes Autoconvocados envió una carta al ministro de Turismo de la Nación, Matías Lammens, solicitando que se declare la emergencia económica, productiva y fiscal para el sector, lo que implicaría medidas urgentes sobre el Impuesto a las Ganancias y Bienes Personales, la suspensión del pago de monotributo, y la prórroga del vencimiento de impuestos.

También reclamaron la eliminación del Impuesto PAIS, que “provocó una catastrófica caída de ventas, dejando a las Pymes de turismo en una situación de vulnerabilidad extrema”; la urgente implementación de ayudas económicas específicas para el sector a fin de evitar despidos y cierres; el acceso a créditos ATP y tasa 0 que ofrece el Gobierno, y que el Ministerio de Turismo junto a Defensa del Consumidor intervengan en acuerdos sobre los diferentes reclamos de viajeros, como cancelaciones, devoluciones, incumplimientos, etcétera, ante el imposible desenvolvimiento normal.

“Se habla de muchas medidas que podrían tomarse para que la gente pueda viajar, pero no hay nada cierto. Creo que esto recién se va a dinamizar cuando haya una vacuna. Mi agencia vende mucho al exterior, hasta que esto se pueda agilizar creo que el año ya está perdido. Y estiman que posiblemente la reactivación total se dé a fin de 2021”, concluyó la titular de Departure Villa María.