Ante la gran demanda, buscan fondos para poder seguir ayudando

Hace unos ocho meses nació el grupo que se denominó Los Delfines Humanitarios y que se dedica a ayudar. Así de simple y complejo. A dar una mano a quien le haga falta, a responder al pedido de una familia, a colaborar con un merendero. A auxiliar a quien se le incendió la casa. Ayudar.

Surgió de una charla, se fue sumando gente, bajando otra, pero están y este fin de semana organizan una feria para poder reunir dinero que necesitan para gastos elementales.

Qué hacen

“Normalmente contenemos a las familias de escasos recursos. Nos movemos, vamos a las panaderías para conseguir cosas para entregar a merenderos, armamos un ropero comunitario, lo que veamos que hace falta. Por ejemplo, hubo varios incendios de casas que nos movilizaron, entonces salimos a ver qué les hace falta, a pedir lo que necesitan, también preparamos ajuares para las mujeres que están por dar a luz y no tienen ni para un pañal...”, intentó resumir Mónica Marchetti, integrante del grupo, la tarea que llevan adelante.

“La gente es muy solidaria y enseguida aparece una mesa, una cama, un colchón”, resaltó y contó que “no es un número fijo de gente a la que se ayude, va cambiando permanentemente porque la ayuda que damos es como para salir de un momento complicado y normalmente luego logramos derivar los casos a Desarrollo Social del municipio”.

Además, incluso, crearon un merendero donde ofrecen una factura y una taza de leche a quienes se llegan al centro vecinal del barrio San Antonio. “Y también colaboramos con otros merenderos llevando comida, porque hay merenderos, incluso, con problemas de recursos”, apuntó Mónica.

La feria

“La demanda es cada vez más grande”, subrayó, pero chocan con otra dura realidad: “Tenemos mucha demanda y poco recursos”.

Es por eso que “se nos ocurrió hacer la feria para al menos poder salvar algunos gastos, que lejos están de ser caprichosos, sino que son necesarios”.

Si bien reconoció que “por momentos me incomodó un poco lo de la feria porque tenía miedo de que la gente piense que la ropa que nos da la quiero vender, pero no, hay ropa que no se puede dar por ahí, o ropa de fiesta, cosas así que es la que se va a vender, y que quede claro que el ropero comunitario está para quien lo necesite”.

La feria será el próximo sábado en avenida Patria 1018, por la mañana. Mónica incluso llamó a que “la gente que quiera donar algo y sumar su granito de arena será bienvenido”.

“La gente, cada vez que le pedís una mano, te da las dos. Por ahí pedís un andador y aparecen tres. Ya nos conoce, sabe que ayudamos, no tiene dudas de que las cosas llegan a quienes más lo necesitan y por eso damos gracias por la confianza”, cerró.